Isabel Gabriela de Baviera

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Isabel en Baviera
Reina consorte de los belgas

Fotografía oficial de la reina (1919).
Reinado
23 de diciembre de 1909-17 de febrero de 1934
(24 años)
Predecesor María Enriqueta de Austria
Sucesor Astrid de Suecia
Información personal
Nombre completo Isabel Gabriela Valeria María
Otros títulos
Nacimiento 25 de julio de 1876
Bandera de Imperio alemán Castillo de Possenhofen, Pöcking, Reino de Baviera, Imperio alemán
Fallecimiento 23 de noviembre de 1965 (89 años)
Bandera de Bélgica Castillo de Stuyvenberg, Laeken, Reino de Bélgica
Sepultura Panteón Real de la Iglesia de Nuestra Señora de Laeken
Religión Católica
Familia
Casa real Wittelsbach
Padre Carlos Teodoro de Baviera
Madre María José de Portugal
Consorte Alberto I de Bélgica (matr. 1900; viu. 1934)
Hijos

Isabel en Baviera (en alemán: Elisabeth in Bayern; en francés: Élisabeth en Bavière; Pöcking, 25 de julio de 1876-Laeken, 23 de noviembre de 1965) fue hija del duque Carlos Teodoro de Baviera —miembro de una rama menor de la Casa de Wittelsbach y hermano de la famosa emperatriz de Austria, Sissi— y de la infanta María José de Braganza —hija del destronado rey Miguel I de Portugal—. Se casó en Múnich el 2 de octubre de 1900 con el príncipe Alberto de Bélgica, futuro rey Alberto I de Bélgica.

Primeros años[editar]

Isabel fue criada en un ambiente liberal y anticlerical, donde su padre, a quien la guerra de 1870 había hecho despreciar la vida militar, había abandonado el ejército para comenzar estudios de medicina. Apasionado de la oftalmología, instaló una clínica en Possenhofen, que mantenía con su dinero y donde él mismo operaba a sus pacientes, asistido por una enfermera —su propia esposa María—. En este lugar, Isabel aprendería a ejercer la profesión de enfermera.

Matrimonio y descendencia[editar]

Isabel y Alberto fotografiados en el día de su boda, el 2 de octubre de 1900.

Durante el funeral de su tía, Sofía Carlota de Baviera —fallecida en el incendio del Bazar de la Charité—, celebrado en Dreux en 1897, Isabel conoció al príncipe Alberto de Bélgica. Tres años después, contraería matrimonio con este joven tímido, serio y pesimista, con el que chocarán en más de una ocasión su vivacidad y su fantasía.

Hasta la muerte del tío de Alberto, el rey Leopoldo II, y con su ascensión al trono en 1909, la pareja residió en el Hotel Assche de Bruselas, en donde nacieron sus tres hijos:

Reinado[editar]

Aunque era nativa de Alemania, la reina tomó partido por los Aliados y por la independencia de Bélgica desde el inicio de la Primera Guerra Mundial, y dijo que entre su familia y ella hay "un telón de hierro que ha caído para siempre". Tras poner a salvo a sus hijos en el Reino Unido, regresó junto a su esposo y lo acompañó durante su peligrosa estancia de cuatro años en De Panne. Isabel organizó hospitales de campaña, alentaba a los médicos, curaba a los heridos cuando era necesario y, para elevar la moral de las tropas, creó la Orquesta Sinfónica del ejército en campaña.

Tras la guerra, realizó una gran labor con huérfanos, heridos y mutilados, y emprendió otras tareas que no le impidieron dedicarse al resurgimiento de la vida cultural belga. Isabel era una talentosa artista y amante de la música —sobre todo de la escultura y el violín—, y en 1937 creó el Concurso de Música Reina Isabel, de renombre internacional. También le apasionaba la ciencia, la egiptología (el 13 de febrero de 1923, junto con Lord George Herbert de Carnarvon y Howard Carter entró en la tumba nunca penetrada de Tutankamón), las obras de Tagore, el yoga, el canto de los pájaros —sobre el que publicaría una obra científica— y, sobre todo, las relaciones humanas. Sus encuentros con personajes tan dispares como Albert Einstein, Colette, Pau Casals, Romain Rolland, Columba Marmion, Verhaeren o Loti, acabarían por convertirse en amistades con las que mantendría frecuente correspondencia.

Tras la muerte de Alberto I y de su nuera, Astrid de Suecia, la Segunda Guerra Mundial le supuso una nueva prueba, más cuando algunos políticos franceses la acusaron de ser partidaria del régimen nazi.

Tras la guerra, acrecentó sus obras caritativas, sociales y médicas, que recibieron un inmenso apoyo. Pero con el paso de los años, el lado bávaro de Isabel, excéntrico y anticonformista, se acentuó, contradiciendo sus causas con sus ideas izquierdistas, sus convicciones pacifistas, sus viajes a la Unión Soviética y China, y su declarada simpatía por Iósif Stalin, Nikita Jrushchov, Mao Zedong e incluso Fidel Castro. A pesar de ello, su octogésimo cumpleaños fue celebrado en medio del regocijo popular.

Isabel murió de un infarto en el castillo de Stuyvenberg, donde vivía desde 1951.

Fue distinguida como Justa entre las naciones.

Distinciones honoríficas[editar]

Referencias[editar]

  1. «Guía Oficial de España». Guía Oficial de España. 1914. 
  2. Hof- und Staats-Handbuch der Österreichisch-Ungarischen Monarchie - 1912. Consultado el 6 de marzo de 2017. 

Enlaces externos[editar]