Diferencia entre revisiones de «Sanatorio Antituberculoso de Agramonte»

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El '''Sanatorio Antituberculoso de Agramonte''' ([[Zaragoza]], [[España]]) es un antiguo hospital situado a las faldas del monte [[Moncayo]].


Se empezó a construir en los [[años 1920]] por iniciativa del Gobierno. Una vez terminado en el año [[1930]], se destinó en un principio a centro de descanso para las familias pudientes de la época, pero al empezar la [[Guerra civil]] en [[1936]], quedó abandonado hasta el fin de la guerra. En [[1939]], las Hermanas de la Caridad de Santa Ana, se hicieron cargo del edificio, instaurando el "Sanatorio Antituberculoso de Agramonte". Sus moradores fueron mayoritariamente mujeres y niños, aunque al final también hubo hombres. Allí cada día luchaban por vencer a la tuberculosis, y la mayoría con el tratamiento médico y la situación geográfica cerca del Moncayo lograron curarse.
En los años veinte se quiso dar un empuje al Moncayo y los pueblos que se encuentran en su falda. Varios son los intentos hasta que el 30 de julio de 1927 por Real Orden se declaró Sitio Natural de Interés Nacional a la Dehesa del Moncayo.
Pero sería con las mejoras que introdujo la Segunda Republica cuando por Orden Ministerial se concede al Ayuntamiento de Tarazona en diciembre de 1934 la ocupación de 40,5859 ha en las partidas de Peña Agramonte, Praluengo y Plana de Castilla con destino a la edificación de hoteles particulares, sanatorio y colonias escolares.
El fin de esto era mitigar el paro obrero y dar alojamiento asequible a las familias que quisieran veranear en el Moncayo.
El primer paso para crear la Ciudad Montaña de Agramonte fue la construcción de un pequeño hotel, que para aquella época contaba con agua corriente, cuartos de baño, calefacción y luz eléctrica.
Tenía dos plantas, en la primera se encontraba el comedor y un salón y en la segunda había once habitaciones.
Por desgracia este ambicioso proyecto nunca se llegó a ejecutar porque estalló la guerra civil y el hotel no se llegó a inaugurar. Por lo tanto si NUNCA se abrió al público es imposible que se violara y asesinara a los turistas y al personal laboral durante la guerra civil.


En el mes de [[Septiembre]] de [[1978]], después de 40 años en activo, el Sanatorio cesó su actividad, se cerró el hospital y el lugar quedó totalmente vació y en silencio, a merced de los vándalos y visitado por otras personas fascinadas por la belleza y el misterio de aquel lugar.
Nos encontramos pues ante un hecho que se puede demostrar con documentación que anula la primera parte de la leyenda negra de este sanatorio. Sigamos buceando en la historia de este edificio para ver que otras sorpresas nos depara.
El 11 de febrero de 1936 la Caja de Ahorros y Monte de Piedad de Zaragoza, Aragón y La Rioja, inauguró en la calle Costa nº12 de Zaragoza un dispensario para tratar la tuberculosis.
Al estallar la guerra civil, se transformo en un puesto de socorro de urgencia que rápidamente paso a ser con la militarización de los médicos un Hospital Militar para heridos de tórax procedentes de otros hospitales. Ante las crecientes necesidades por aumentar los heridos procedentes del frente, hace que la entidad bancaria transforme unas colonias infantiles que tienen en el monasterio de Veruela en un hospital. Este nuevo hospital contaba con 100 camas y todos los servicios médicos y quirúrgicos necesarios.
En 1938 se completó este hospital añadiéndole unas instalaciones para el personal civil que padecía enfermedades de pulmón a petición del Presidente del Patronato Nacional de Antituberculosos, el general Martínez Anido.
Todo esto fue posible por la gran capacidad del edificio que permitió que hubiera dos hospitales, uno militar y otro civil. Así como poder tener separados a los enfermos de los heridos.
Ambos hospitales fueron atendidos al principio por enfermeras profesionales contratadas por la Caja y enfermeras voluntarias, pero más tarde se hicieron cargo de estos servicios las religiosas de Santa Ana que ya perduraron en todos los servicios de la Caja.
Pese a este esfuerzo todavía eran necesarias más camas para las enfermas de pulmón por lo que La Caja adquiere al ayuntamiento de Tarazona el pequeño hotel que tenía sin utilizar situado en el Moncayo a 1.150 metros de altura, rodeado de pinos y orientado al sudoeste.
La Caja se encargo de realizar las obras de ampliación y adecuación para llegar a construir el sanatorio tal como lo conocemos.


Desde hace años, muchos investigadores han acudido al viejo Sanatorio para inspeccionarlo y han descubierto [[psicofonía]]s y [[Paranormal#Fenómenos paranormales|fenómenos paranormales]].
Así el 8 de agosto de 1938 llegarían hasta el sanatorio las hermanas de la Caridad de Santa Ana que serían las encargadas de gestionar el sanatorio hasta su cierre. Las primeras enfermas llegaron el 18 de agosto de 1938
Aunque era un sanatorio de mujeres también fueron atendidos hombres pero eran los menos, solo hay que observar las dimensiones del pabellón de mujeres y el de hombres.
En 1942 se iniciaron las tareas quirúrgicas en el sanatorio, siendo tan importantes que fueron estudiadas detalladamente en varias publicaciones médicas y en el año 1957 el discurso inaugural del curso académico de la Real Academia de Medicina del distrito de Zaragoza trato sobre una de estas operaciones.


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Como parte de la leyenda negra de este sanatorio nos encontramos con que los enfermos vivían agonías tremendas y la mayoría de ellos no podían superar la terrible enfermedad, pues bien nada más lejos de la realidad.
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Nos contaba una de las trabajadoras del sanatorio que cuando la gente llegaba pasaban unos días tristes y llorosos por haberse separado de su familia, pero cuando se marchaban del sanatorio pasaban también unos días tristes y llorosos porque dejaban otra familia.

Como es lógico las enfermas debían llevar un tratamiento y unos cuidados determinados por su enfermedad. Pasaban dos horas por la mañana y dos horas por la tarde tumbadas tomando el aire sano del Moncayo, pero después de esto tenían una serie de actividades y de talleres para que estuvieran activas.
Así se impartían clases para aquellos enfermos que estaban estudiando para que no perdieran el curso, se hacían talleres de costura, punto, etc y uno de los talleres que más existo tenía era el teatro, varias veces al año se hacían representaciones teatrales.
Por último, la parte de la leyenda negra en la que se afirma que muy poquitas enfermas se curaban, que la mayoría moría entre espantosos dolores podemos afirmar después de hablar con las Hermanas de La Caridad de Santa Ana, con el personal laboral y con alguna de las enfermas que estuvieron en el sanatorio que esto no es cierto que la mayoría de los enfermos se curaban y no permanecían más de dos años en el sanatorio.

Es cierto que junto al sanatorio hay un pequeño cementerio, pero como nos comentaban la mayoría de los difuntos pertenecían al periodo de la guerra civil y los años posteriores. Después si alguien no resistía el tratamiento y fallecía su cuerpo se lo llevaba la familia y si esta no podía sufragar los gastos se enterraba en el cementerio del sanatorio.

Hace unos años fue profanado por vándalos y tuvieron que sacar los restos que quedaban. Se notifico a todos los familiares y aquellos que no fueron reclamados se trasladaron al cementerio de San Martín del Moncayo.
Hoy tan solo nos queda el recuerdo de lo que antaño fue, pero sentimos la obligación, la responsabilidad de devolverle la dignidad de la que disfruto este edificio, antes un lugar de sanación y hoy una fuente de leyendas urbanas y mentiras.
De todo lo mostrado, extraemos una conclusión, y es que toda la leyenda negra de este edificio no es verdad, que su posible impregnación trágica no corresponde a las vivencias de este edificio, por lo tanto aquellos fenómenos que hemos podido registrar, tan solo vienen a confirmar lo esporádico de estos sucesos.


A día de hoy y gracias a la documentación recopilada, al seguimiento realizado en este escenario, entendemos que teníamos la obligación ética de desmentir las mentiras vertidas en un edificio puntero en su época, revelar que gracias al análisis del material obtenido en las investigaciones realizadas por los equipos de investigación del Grupo UFO y al esfuerzo y paciencia de Charo Lozano, … aquello que nace como un rumor, crece como una leyenda y muere siendo una gran mentira …




==Enlaces externos==
==Enlaces externos==

'''VIDEO'''


[http://video.google.es/videoplay?docid=-5851502872483289129 Programa de Aragón Televisión sobre el Sanatorio]
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'''PROGRAMA ESPECIAL DE RADIO'''

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[[Categoría:Sanatorios de España]]
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Revisión del 19:45 21 may 2009

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El Sanatorio Antituberculoso de Agramonte (Zaragoza, España) es un antiguo hospital situado a las faldas del monte Moncayo.

Se empezó a construir en los años 1920 por iniciativa del Gobierno. Una vez terminado en el año 1930, se destinó en un principio a centro de descanso para las familias pudientes de la época, pero al empezar la Guerra civil en 1936, quedó abandonado hasta el fin de la guerra. En 1939, las Hermanas de la Caridad de Santa Ana, se hicieron cargo del edificio, instaurando el "Sanatorio Antituberculoso de Agramonte". Sus moradores fueron mayoritariamente mujeres y niños, aunque al final también hubo hombres. Allí cada día luchaban por vencer a la tuberculosis, y la mayoría con el tratamiento médico y la situación geográfica cerca del Moncayo lograron curarse.

En el mes de Septiembre de 1978, después de 40 años en activo, el Sanatorio cesó su actividad, se cerró el hospital y el lugar quedó totalmente vació y en silencio, a merced de los vándalos y visitado por otras personas fascinadas por la belleza y el misterio de aquel lugar.

Desde hace años, muchos investigadores han acudido al viejo Sanatorio para inspeccionarlo y han descubierto psicofonías y fenómenos paranormales.

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Enlaces externos

Programa de Aragón Televisión sobre el Sanatorio