Diferencia entre revisiones de «Gaara»

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==El Primer Sueño De Gaara==

Los miembros de Akatsuki extrajeron el Bijuu en el interior de Gaara, lo cual lo dejo sin vida. Para su suerte la anciana Chiyo dio su vida por la de el.
Luego de esto el ya no puede realizar muchas de sus tecnicas, ya que no posee el Bijuu en su interior el podria dormir, por lo que se presume que las ojeras que rodean sus ojos desaperecerian.

Es asi como gaara al fin pudo dormir...

Transcurrieron dos días, desde que los enviados de Konoha habían dejado Sunagakure. Los aldeanos de la Aldea Secreta de la Arena, disfrutaban una sensación de bienestar sin precedentes. El Kazekage se había ganado su respeto al protegerlos arriesgando su vida y por encima de esto, el aprecio y agradecimiento aún de los habitantes más escépticos. En pocos días, los maestros de la prestigiosa Academia Ninja de la Arena, comenzaron a citar a Sabaku no Gaara, como el Kazekage más digno y memorable de toda la historia de Sunagakure.

Ahora que Gaara había dejado de ser el portador del demonio Shukaku, sus hermanos mayores, Temari y Kankuro, aguardaban impacientemente el momento en que su pequeño hermano necesitará dormir.

Pese a sus disimulados esfuerzos de acostumbrar a Gaara a beber leche tibia durante las noches y prontamente ambientar toda la estancia con música relajante, no alcanzaron su objetivo. Inclusive Kankurou; sin previo acuerdo con Temari, había insistido en invitarlo a una sala de masajes de dudosa reputación, engañándole desde luego, sobre la honradez del servicio. Pero Gaara, siempre declinaba las invitaciones de su hermano, por consagrarse a tiempo completo al ejercicio de ser Kazekage.

Con lo que cada noche sus hermanos acababan descorazonados y por la mañana, con lo placentera que era la música ambiental, Kankurou y Temari apenas podían despejar un párpado para comenzar despertarse.

Esa mañana, sintiéndose nuevamente desilusionados, esperaban a que Gaara se presentara en la cocina para desayunar. Temari había preparado avena y la servía en pequeño tazones coloridos. Kankurou servía pan en un plato localizado a mitad de la mesa. Fatigados, ocuparon sus asientos correspondientes, mirando con ojos de cansancio el vapor que emanaban los tazones con avena.

-Gaara nació con insomnio...- asegura con fastidiado Kankurou, frotándose con el puño un ojo adolorido de sueño –Y con insomnio morirá…-

-No seas pesado…- replico con cansancio Temari -… Sabes perfectamente que Gaara comenzó a padecer insomnio para evitar que Shukaku se adueñara de su vida…-

Sus murmuros apenas eran audibles. Demasiados cansados para hablar con normalidad.

-… Temari… Dejémonos de jugar como aficionados y demos el siguiente paso- solicitó Kankuro con una maliciosa sonrisa.

-¡Que nadie va a añadirle somníferos a los alimentos de Gaara!- contesto furiosa Temari, levantando su cuchara de la mesa para amenazarlo -¡Podríamos causarle una maldita adicción!-

Parecía una criatura salvaje, disputa a sacarle los ojos a cualquiera. Kankurou se le quedó observando evidentemente impresionado. Reconociendo que el cansancio, había hecho presa a la serenidad de Temari.

-Esta bien… No insistiré más- responde con cautela Kankurou, quitándole suavemente la cuchara –Continuaremos como hasta ahora, esperando que pueda dormirse por sí solo…-

Satisfecha, Temari asintió orgullosa de su exitosa labor de convencimiento.

De repente, Gaara se presentó en la cocina. Vistiendo inmaculadamente su pulcra vestimenta de un color blanco irreprochable. Con la cara lavada y el cabello rojizo aunque un poco mojado lo mostraba peinado, dejaba claro que recién se había bañado. Era la imagen misma de la fresca brisa matinal.

En contraste con Kankurou y Temari, que todavía vestían sus pijamas y los cabellos espigados y enmarañados. Sus cabelleras parecían dos pelambres de distintos color. Y sus rostros apagados, apenas podían iluminarse con la radiante luz solar que se filtraba desde la ventana más próxima.

-Gaara ¡Buenos días!- saludo animosa la desarreglada Temari.

-Hola… - responde con rectitud Gaara, encaminándose a su silla para desayunar con la compañía de sus hermanos.

Ocupo su asiento y todos comenzaron a degustar la pálida y humeante avena.

-Kankurou ¿Me acercarías el plato con el pan?- solicita Gaara con expresión relajada, escondiendo la angustia de saborear como otros días, la repulsiva avena que preparaba Temari.

-Si…- responde con pereza Kankurou, interrumpiendo su desganado cuchareo para extenderle amablemente el plato.

Ambos sabían, que el repugnante sabor de su cereal se reducía acompañándolo con pan.

Cuando Gaara sujeto el plato con el pan, discretamente avizoró a sus hermanos.

“Cada día que pasa, lucen más desaliñados” piensa Gaara con ligero desagrado “Les convendría cuidar más su aspecto por las mañanas... Deberían comprender que me desmoraliza descubrirlos así”

Cuando el desayuno terminó, Gaara, Kankurou y Temari agradecieron la comida.

…...

Eran apenas las siete de la noche; en su oficina, Gaara sufrió un cansancio sin punto de comparación. Se encontraba bebiendo un vaso de agua cuando éste, se deslizó de su mano cayendo sobre el escritorio, mojando los informes que estaba revisando.

-¡Momo entra de inmediato!- ordena exaltado Gaara, ansiando la ayuda de su asistente para solucionar rápidamente el desastre que provoco.

En un parpadeo, Momo estaba secando los informes ondeando las hojas de papel contra el aire. Atestiguando la eficiencia de su asistente, Gaara respiro tranquilo, sosteniendo los pocos papeles que no habían sido alcanzados por el agua.

Estaba agotado. Al punto, que se permitió caer aparatosamente sobre su asiento. Extenuado, recostó su espalda contra el respaldo de la silla, sin estar conciente que abrazaba un par de informes mientras comenzaba a quedarse dormido.

-Kazekage sama…- murmuro angustiada Momo, temiendo que su jefe estuviese trabajando muy enfermo -¿Quiere que lo lleve a su casa para que descanse?.. O ¿Qué mande a llamar a uno de sus hermanos para que puedan llevarle? -

-¿Eh?- responde aturdido Gaara entreabriendo los ojos, para lentamente razonar la propuesta de Momo durante varios segundos –Gracias, pero no… Puedo irme solo…-

Gaara respiró muy hondo y se puso de pie.

-Por favor, termina de asear mi escritorio… Cuando termines puedes retirarte… Nos veremos mañana temprano- menciona débilmente Gaara, alejándose con pesadez.

El trayecto de la oficina hasta su casa, nunca había sido tan dificultoso ni prolongado para Gaara. Tampoco antes, había notado que su ostentoso ropaje de Kage pesaba demasiado y que el clima nocturno a esa hora, era insoportablemente frío.

-¡Kazekage sama!... ¡Buenas noches!- saludan con entusiasmo un par de pequeñas traviesas que caminaban a lado de una esbelta mujer, una reciente viuda que también le ofreció buenas noches.

Negándose a su extremo agotamiento, Gaara las saludó con una mueca cortes, en medio de la polvorienta calle.

-¿Hoy le provocaron algún disgusto a su madre?- les pregunta a las niñas, con fingida seriedad.

-¡No!- responden al unísono con mucha seguridad.

La mujer que las acompañaba, comenzó a reír con timidez tapándose los labios con la mano.

-Kazekage sama, mis hijas se portaron muy bien en esta ocasión. Y han estado entrenando muy duro porque desean defender Sunagakure cuando crezcan…- mencionó satisfecha de sus hijas la joven mujer, incitando que Gaara sonriera orgulloso de los aldeanos que protegía.

Las pequeñas asentían enérgicamente con la cabeza, confirmando que era cierto lo que su mamá había dicho.

-Estoy seguro que así será- comenta complacido Gaara, despidiéndose sutilmente.

…….

A muchas calles de ahí, Temari transitaba calmosamente los angostos pasillos del minisuper que siempre visitaba de camino a su casa, después de concluir las misiones de clase A con sus alumnos. En una canasta que cargaba en el brazo, depositaba sus futuras compras.

-Temari san, buenas noches…- saluda con cordialidad Momo, que también cargaba en el brazo, una canasta con comestibles –Noto que les gusta mucho la avena…-

La canasta que cargaba Temari, estaba colmada con cajas de avena natural.

-¿Momo?... ¡Momo, que tal!...- responde con agrado Temari -… Son para mis hermanos, les encanta que todas las mañanas les prepare avena para desayunar… ¿Kazekage sama te dio el día libre?-

-No… Kazekage sama, me permitió salir temprano- menciona con alegría Momo, levantando su canasta repleta de comida instantánea –Gracias a eso, hoy podré preparar temprano la cena de mi esposo y mía-

-… ¿Él se quedo solo en la oficina?- pregunta confundida Temari.

-No- contesta con serenidad Momo – Kazekage sama se retiro de su oficina alrededor de la siete y media de la noche… Según entendí, se dirigía a su casa-

-¿Te dijo el porque?- pregunta asustada Temari temiendo que su hermano pudiera estar enfermo, al haber transcurrido una semana desde que Shukaku fue robado de su cuerpo y que Gaara, continuaba padeciendo insomnio.

-No… Al principio pensé que podría tener una enfermedad, pero Kazekage sama es una persona de salud inquebrantable… Estoy segura que solamente necesita descansar, porque estaba quedándose dormido en su… ¿Temari san?...-

Al oír que Gaara casi se quedaba dormido, Temari dejó caer su canasta con las cajas de avena y desapareció simultáneamente de la vista de Momo.

“Tengo que avisarle a Kankurou” piensa con inquietud Temari, corriendo a buscarlo en su lugar de entrenamiento.

….…

Profundamente agotado, Gaara apenas empujó la puerta de su casa. Una vez en la privacidad de su hogar, comenzó a desvestirse mientras atravesaba la sala. Dejándose puesto los pantalones y una camiseta de malla. Caminando descalzo, se dirigió a su habitación. No obstante, cada paso que daba era más inestable que el anterior, provocando que Gaara finalmente perdiera el equilibrio antes de cruzar el comedor.

Al precipitarse de frente contra el suelo, un fuerte abrazo desde su espalda, lo sostuvo de pie.

-Kankurou… - murmuro débilmente Gaara, esforzándose por mantener los ojos abiertos -… Me estoy durmiendo…-

-Eso veo… - responde muy contento Kankurou, sin explicarse el semblante nervioso que exteriorizaba Gaara.

Gaara reconocía de sobra, que su insoportable agotamiento era por causa del sueño. Que ahora, que había dejado de ser el contenedor de Shukaku, dormiría cuando le placiera. Aún así, se sentía inquieto. Temía que su cuerpo, respondería inadecuadamente a la alteración del estado de conciencia que implicaba soñar. Porque jamás había dormido en quince años. Siempre había estado conciente del mundo que lo rodeaba y de pronto, debía adaptarse a dormir por las noches, en vez de contemplar la luna en el firmamento.

Por eso, decidió continuar con su desgastante rutina habitual hasta que su cuerpo, consumiera toda su energía.

-Temari preparo la tina para que te bañaras y durmieras con mayor comodidad… Pero dudo, que puedas bañarte sin ayuda de nadie aunque lo intentaras- comenta intranquilo Kankurou, cruzando el brazo de Gaara sobre su cuello –Pienso que deberías dejarlo para otro día-

-…No…- murmura con tono casi inaudible Gaara, dejando que Kankurou lo ayudará a caminar –Sí se tomo la molestia de prepararme el baño, quiero usarlo… No me gustaría ofenderla…-

-Igual que con la repulsiva avena que desayunamos todas las mañanas… jejejeje… Somos demasiado condescendientes con ella…- menciona con broma Kankurou, consiguiendo robarle una delgada sonrisa al reservado de Gaara.

Cuando llegaron al cuarto de baño, Temari los esperaba.

Al ver el angustioso grado de fatiga que experimentaba Gaara, también Temari considero inconveniente que tomara un baño. Temiendo que pudiera sufrir un accidente, Temari quiso sugerirle dejarlo para otra ocasión.

-Kankurou… ¿Querrías bañarte conmigo?- pregunta suavemente Gaara, pareciendo sonrojado.

-¡Kankurou responde!- grita exaltada Temari, exigiendo una respuesta al propinarle un violento codazo a Kankuro en las costillas.

-S…si…- responde adolorido Kankurou, sorprendido que cada vez más, parecían una familia.

Admirada, Temari sonrió satisfecha. Los dos hermanos entraron al baño mientras ella, les detenía la puerta. Una vez adentro, cerró la puerta del baño y se quedo sola en el pasillo.

“En lo que se bañan, cambiaré todas las sábanas de la cama de Gaara por las que tengo guardadas en mi armario, pondré en su cama mi mejor almohada y hasta comprare un pijama nuevo si me apuro...” piensa emocionada Temari, entrelazando con maravilla los dedos de ambas manos “Fue una verdadera suerte que Momo me saludara. De lo contrario no hubiésemos improvisado este pequeño obsequio. Espero que Gaara recuerde con cariño su primer sueño pero sobretodo… Aprecie que nos preocupamos por él…”

…….

Para Kankurou, era admirable la audacia de Gaara para enjabonarse con su pequeña toalla y aclararse después con agua, sentado equilibradamente sin ninguna ayuda sobre la reducida banqueta. Sentados en banquetas separadas delante del grifo de agua, Kankurou también se enjabonaba con otra diminuta toalla y se aclaraba el jabón con agua.

Una vez aseados, enjuagaron las toallas con agua fría y las doblaron para usarlas en la frente. Con mucho cuidado, Kankurou asistió a Gaara para que pudiera sumergirse en la enorme tina del baño. Una vez que Gaara pudo sentarse con firmeza en medio del agua, Kankuro lo acompaño ocupando un lugar a su lado para vigilarlo de cerca; pensando, que por el intenso calor del agua, Gaara pudiera desfallecer y hundirse en la tina.

Los minutos transcurrieron lentamente. Silenciosos, Gaara y Kankurou contemplaban la resplandeciente luna, a través de la estrecha ventana delante de ellos. Súbitamente, Gaara comenzó a revolverse, agitando el agua. Sobresaltado, Kankurou uso un brazo para sujetarlo por los hombros, temiendo que su hermano se deslizara fuera de su alcance.

-Podríamos dejar la tina sí lo deseas- menciona Kankurou de forma servicial, atrayendo a Gaara contra su hombro.

Gaara negó con la cabeza, consternando a Kankurou.

-¿Por qué?..- pregunta con desconcierto Gaara, inclinando la cabeza hasta que su barbilla rozo con el agua -… ¿Por qué tomarse estas molestias?... ¿Tu y Temari… no podían simplemente dejarme dormir?-

Kankurou carraspeo la garganta antes de responderle.

-Sí… Supongo que podíamos… Pero…- responde con sinceridad Kankurou y observando con detenimiento varios mechones de cabello rojo, suspiró con nostalgia -… Hace una semana eras un cadáver y hace siete días que deberías estar conciliando el sueño… Temari y yo, pensamos que podrías perder tu salud si continúas con insomnio… Gaara, no voy a negar que queremos ser mejores hermanos contigo, porque todavía nos duele haberte perdido… Por todo esto, pienso que podemos tomarnos cualquier molestia por ti, aunque sea estresante tenerte como hermano pequeño…-

Impresionado de la inesperada confesión de su hermano, Gaara lo volteó a ver con ojos anhelantes. Por su parte, Kankuro le correspondió con una sonrisa juguetona.

“¿Así es como se quieren los hermanos?” piensa conmovido Gaara, llevándose una mano al corazón y apoyando la cabeza en el hombro de Kankuro, que cerraba con mayor fuerza su abrazo sobre él.

Por primera vez, Gaara disfrutó a plenitud la proximidad con su hermano mayor.

Transcurrieron varios minutos más y decidieron que era tiempo de salir del agua.

…...

El relajante baño, ocasiono que el cuerpo de Gaara se entorpeciera completamente y no pudiera sostenerse de pie aunque se apoyara otra vez en Kankurou. Arropados con batas, Kankurou cargó a Gaara hasta su habitación, lugar casi en penumbras donde Temari los aguardaba intranquila.

-Gaara ¿Te sientes bien?- pregunta muy preocupada Temari acercándose hasta ellos -¿Qué puedo hacer por ti?... ¿Quieres cenar?... ¿Te preparo un tazón de avena?...-

-Gracias… - murmura suavemente Gaara, durmiéndose en los brazos de Kankurou… - Pero… no ahora. Siempre… eres muy gentil... conmigo -

Respetando los deseos de Gaara, Temari suspiro.

-… Si…- responde con dulzura Temari, revolviendo cuidadosamente la espesa cabellera de Gaara - En otra ocasión será…-

Con suma delicadeza, Kankurou apoyó una rodilla sobre la cama para descansar a Gaara.

-Fin del paseo- menciona con agrado Kankurou, recostando a Gaara sobre las sábanas de seda.

Bajo la tenue luz de la habitación, Temari se reunió con Kankurou a una orilla de la cama. Juntos contemplaron el instante cuando Gaara se desvaneció.

-Es una lástima que nuestro hermano, no sea más un niño- murmura con añoranza Temari.

-¿A que viene eso?- susurra confundido Kankurou, cruzándose de brazos.

Con una sonrisa melancólica, Temari colocó las manos en sus caderas.

-Me hubiese gustado arroparlo con el pijama que compre- responde con voz baja, señalando dos prendas perfectamente dobladas sobre el buró, que nadie había notado –Supongo que te corresponde vestirlo o podría resfriarse sí amanece con esa bata húmeda-

-Entiendo…- responde discretamente Kankurou, observando fijamente a su pequeño hermano –Temari… ¿Algún día le compensaremos todos los años que lo hicimos a un lado?-

Ignorando una respuesta, Temari hizo una mueca de tristeza.

-No lo sé… - responde pausadamente Temari, posando una mano sobre el hombro de Kankuro -… Lo importante es que tenemos toda la vida para resarcir el daño. Y estoy segura, que en estos dos años hemos tenido un magnífico progreso… Míralo, duerme tranquilo y pareciera que sonríe…-

Por indicación de su hermana, Kankurou presto mucha atención a los labios de Gaara.

-Jejejeje… Talvez tengas razón- menciona satisfecho Kankuro, esbozando una gigantesca sonrisa que contagio de alegría a Temari, que sonreiría como él -… ¿Crees que Gaara nos platicará sus sueños?-

-Eso me gustaría mucho… ¿En que podrá soñar nuestro pequeño hermano?- murmura con curiosidad Temari, ladeando la cabeza.

En el primer sueño de Gaara, él es muy pequeño y alegremente juega pelota con los niños de la aldea. Su hermano Kankuro lo protege de los grandulones, mientras su hermana Temari le ofrece deliciosos pastelillos durante la merienda.

FIN


== Antecedentes a la serie ==
== Antecedentes a la serie ==

Revisión del 02:00 19 jul 2009

Gaara
我愛羅
(Gaara)
SexoMasculino
Fecha de nacimiento19 de enero[1]
Primera aparición
  • Manga: Capítulo 35
  • Anime: Episodio 20
  • Naruto
    Edad12[1]​/13[2]
    Estatura146,1 cm[1]​/148,1 cm[2]m
    Peso39 kg[1]​/40,2 kg[2]kg
    OcupacionGennin
    RelevanciaSecundario
    AldeaAldea Oculta de la Arena
    PaisPaís del Viento
    MaestroCuarto Kazekage, Baki
    EquipoEquipo Baki
  • Temari
  • Kankurō
  • Gaara
  • Familia
  • Cuarto Kazekage (Padre, Muerto)
  • Karura (Madre, Muerta)
  • Temari (Hermana)
  • Kankurō (Hermano)
  • Yashamaru (Tio, Muerto)
  • BijūShukaku
    Naruto: Shippūden
    Otros nombresKazekage
    Edad16[3]
    Estatura166,1 cm[3]m
    Peso50,9 kg[3]kg
    OcupacionQuinto Kazekage
    RelevanciaPrincipal
    AldeaAldea Oculta de la Arena
    PaisPaís del Viento
    MaestroBaki
    FamiliaYondaime Kazekage, (padre, muerto) Karura (madre, muerta), Temari (hermana), Kankuro (hermano)

    Gaara (我愛羅?), conocido también como Gaara del Desierto (砂漠の我愛羅 Sabaku no Gaara?), es un personaje ficticio del manga y anime Naruto, creado por Masashi Kishimoto. Proveniente de la Aldea Oculta de la Arena, perteneció al equipo que conformado por él, Temari y Kankurō y que estuvo bajo el mando de Baki para la misión de invasión a la Aldea Oculta de la Hoja, en alianza con la Aldea Oculta del Sonido.

    Creación y Concepción

    Masashi Kishimoto, el autor de la serie de Naruto, creó a Gaara como un Doppelgänger del protagonista de la serie, Naruto Uzumaki. Él y Naruto poseen las mismas experiencias infantiles: él es rechazado por su familia y por su villa debido que es un huésped del bijū, Shukaku, una situación que Kishimoto describe como "muy parecida como a la de Naruto".[4]​ Pero Naruto y Gaara tienen diferentes puntos de vista sobre su pasado, eso hace que converjan en un conflicto.[5]

    Por otra parte, el primer vestuario de Gaara fue, junto a los de sus hermanos, lo más difíciles de dibujar para Masashi por lo que cambió las vestiduras durante la saga del rescate a Sasuke Uchiha, la cual, además, se ha convertido en la ropa favorita de Kishimoto ya que a este le gustan los trajes que cubran el cuello ya que se ve "como algo sacado de The Matrix, película que me encanta."[6]​ Dándole a Gaara un traje con un collar en forma vertical.



    El Primer Sueño De Gaara

    Los miembros de Akatsuki extrajeron el Bijuu en el interior de Gaara, lo cual lo dejo sin vida. Para su suerte la anciana Chiyo dio su vida por la de el. Luego de esto el ya no puede realizar muchas de sus tecnicas, ya que no posee el Bijuu en su interior el podria dormir, por lo que se presume que las ojeras que rodean sus ojos desaperecerian.

    Es asi como gaara al fin pudo dormir...

    Transcurrieron dos días, desde que los enviados de Konoha habían dejado Sunagakure. Los aldeanos de la Aldea Secreta de la Arena, disfrutaban una sensación de bienestar sin precedentes. El Kazekage se había ganado su respeto al protegerlos arriesgando su vida y por encima de esto, el aprecio y agradecimiento aún de los habitantes más escépticos. En pocos días, los maestros de la prestigiosa Academia Ninja de la Arena, comenzaron a citar a Sabaku no Gaara, como el Kazekage más digno y memorable de toda la historia de Sunagakure.

    Ahora que Gaara había dejado de ser el portador del demonio Shukaku, sus hermanos mayores, Temari y Kankuro, aguardaban impacientemente el momento en que su pequeño hermano necesitará dormir.

    Pese a sus disimulados esfuerzos de acostumbrar a Gaara a beber leche tibia durante las noches y prontamente ambientar toda la estancia con música relajante, no alcanzaron su objetivo. Inclusive Kankurou; sin previo acuerdo con Temari, había insistido en invitarlo a una sala de masajes de dudosa reputación, engañándole desde luego, sobre la honradez del servicio. Pero Gaara, siempre declinaba las invitaciones de su hermano, por consagrarse a tiempo completo al ejercicio de ser Kazekage.

    Con lo que cada noche sus hermanos acababan descorazonados y por la mañana, con lo placentera que era la música ambiental, Kankurou y Temari apenas podían despejar un párpado para comenzar despertarse.

    Esa mañana, sintiéndose nuevamente desilusionados, esperaban a que Gaara se presentara en la cocina para desayunar. Temari había preparado avena y la servía en pequeño tazones coloridos. Kankurou servía pan en un plato localizado a mitad de la mesa. Fatigados, ocuparon sus asientos correspondientes, mirando con ojos de cansancio el vapor que emanaban los tazones con avena.

    -Gaara nació con insomnio...- asegura con fastidiado Kankurou, frotándose con el puño un ojo adolorido de sueño –Y con insomnio morirá…-

    -No seas pesado…- replico con cansancio Temari -… Sabes perfectamente que Gaara comenzó a padecer insomnio para evitar que Shukaku se adueñara de su vida…-

    Sus murmuros apenas eran audibles. Demasiados cansados para hablar con normalidad.

    -… Temari… Dejémonos de jugar como aficionados y demos el siguiente paso- solicitó Kankuro con una maliciosa sonrisa.

    -¡Que nadie va a añadirle somníferos a los alimentos de Gaara!- contesto furiosa Temari, levantando su cuchara de la mesa para amenazarlo -¡Podríamos causarle una maldita adicción!-

    Parecía una criatura salvaje, disputa a sacarle los ojos a cualquiera. Kankurou se le quedó observando evidentemente impresionado. Reconociendo que el cansancio, había hecho presa a la serenidad de Temari.

    -Esta bien… No insistiré más- responde con cautela Kankurou, quitándole suavemente la cuchara –Continuaremos como hasta ahora, esperando que pueda dormirse por sí solo…-

    Satisfecha, Temari asintió orgullosa de su exitosa labor de convencimiento.

    De repente, Gaara se presentó en la cocina. Vistiendo inmaculadamente su pulcra vestimenta de un color blanco irreprochable. Con la cara lavada y el cabello rojizo aunque un poco mojado lo mostraba peinado, dejaba claro que recién se había bañado. Era la imagen misma de la fresca brisa matinal.

    En contraste con Kankurou y Temari, que todavía vestían sus pijamas y los cabellos espigados y enmarañados. Sus cabelleras parecían dos pelambres de distintos color. Y sus rostros apagados, apenas podían iluminarse con la radiante luz solar que se filtraba desde la ventana más próxima.

    -Gaara ¡Buenos días!- saludo animosa la desarreglada Temari.

    -Hola… - responde con rectitud Gaara, encaminándose a su silla para desayunar con la compañía de sus hermanos.

    Ocupo su asiento y todos comenzaron a degustar la pálida y humeante avena.

    -Kankurou ¿Me acercarías el plato con el pan?- solicita Gaara con expresión relajada, escondiendo la angustia de saborear como otros días, la repulsiva avena que preparaba Temari.

    -Si…- responde con pereza Kankurou, interrumpiendo su desganado cuchareo para extenderle amablemente el plato.

    Ambos sabían, que el repugnante sabor de su cereal se reducía acompañándolo con pan.

    Cuando Gaara sujeto el plato con el pan, discretamente avizoró a sus hermanos.

    “Cada día que pasa, lucen más desaliñados” piensa Gaara con ligero desagrado “Les convendría cuidar más su aspecto por las mañanas... Deberían comprender que me desmoraliza descubrirlos así”

    Cuando el desayuno terminó, Gaara, Kankurou y Temari agradecieron la comida.

    …...

    Eran apenas las siete de la noche; en su oficina, Gaara sufrió un cansancio sin punto de comparación. Se encontraba bebiendo un vaso de agua cuando éste, se deslizó de su mano cayendo sobre el escritorio, mojando los informes que estaba revisando.

    -¡Momo entra de inmediato!- ordena exaltado Gaara, ansiando la ayuda de su asistente para solucionar rápidamente el desastre que provoco.

    En un parpadeo, Momo estaba secando los informes ondeando las hojas de papel contra el aire. Atestiguando la eficiencia de su asistente, Gaara respiro tranquilo, sosteniendo los pocos papeles que no habían sido alcanzados por el agua.

    Estaba agotado. Al punto, que se permitió caer aparatosamente sobre su asiento. Extenuado, recostó su espalda contra el respaldo de la silla, sin estar conciente que abrazaba un par de informes mientras comenzaba a quedarse dormido.

    -Kazekage sama…- murmuro angustiada Momo, temiendo que su jefe estuviese trabajando muy enfermo -¿Quiere que lo lleve a su casa para que descanse?.. O ¿Qué mande a llamar a uno de sus hermanos para que puedan llevarle? -

    -¿Eh?- responde aturdido Gaara entreabriendo los ojos, para lentamente razonar la propuesta de Momo durante varios segundos –Gracias, pero no… Puedo irme solo…-

    Gaara respiró muy hondo y se puso de pie.

    -Por favor, termina de asear mi escritorio… Cuando termines puedes retirarte… Nos veremos mañana temprano- menciona débilmente Gaara, alejándose con pesadez.

    El trayecto de la oficina hasta su casa, nunca había sido tan dificultoso ni prolongado para Gaara. Tampoco antes, había notado que su ostentoso ropaje de Kage pesaba demasiado y que el clima nocturno a esa hora, era insoportablemente frío.

    -¡Kazekage sama!... ¡Buenas noches!- saludan con entusiasmo un par de pequeñas traviesas que caminaban a lado de una esbelta mujer, una reciente viuda que también le ofreció buenas noches.

    Negándose a su extremo agotamiento, Gaara las saludó con una mueca cortes, en medio de la polvorienta calle.

    -¿Hoy le provocaron algún disgusto a su madre?- les pregunta a las niñas, con fingida seriedad.

    -¡No!- responden al unísono con mucha seguridad.

    La mujer que las acompañaba, comenzó a reír con timidez tapándose los labios con la mano.

    -Kazekage sama, mis hijas se portaron muy bien en esta ocasión. Y han estado entrenando muy duro porque desean defender Sunagakure cuando crezcan…- mencionó satisfecha de sus hijas la joven mujer, incitando que Gaara sonriera orgulloso de los aldeanos que protegía.

    Las pequeñas asentían enérgicamente con la cabeza, confirmando que era cierto lo que su mamá había dicho.

    -Estoy seguro que así será- comenta complacido Gaara, despidiéndose sutilmente.

    …….

    A muchas calles de ahí, Temari transitaba calmosamente los angostos pasillos del minisuper que siempre visitaba de camino a su casa, después de concluir las misiones de clase A con sus alumnos. En una canasta que cargaba en el brazo, depositaba sus futuras compras.

    -Temari san, buenas noches…- saluda con cordialidad Momo, que también cargaba en el brazo, una canasta con comestibles –Noto que les gusta mucho la avena…-

    La canasta que cargaba Temari, estaba colmada con cajas de avena natural.

    -¿Momo?... ¡Momo, que tal!...- responde con agrado Temari -… Son para mis hermanos, les encanta que todas las mañanas les prepare avena para desayunar… ¿Kazekage sama te dio el día libre?-

    -No… Kazekage sama, me permitió salir temprano- menciona con alegría Momo, levantando su canasta repleta de comida instantánea –Gracias a eso, hoy podré preparar temprano la cena de mi esposo y mía-

    -… ¿Él se quedo solo en la oficina?- pregunta confundida Temari.

    -No- contesta con serenidad Momo – Kazekage sama se retiro de su oficina alrededor de la siete y media de la noche… Según entendí, se dirigía a su casa-

    -¿Te dijo el porque?- pregunta asustada Temari temiendo que su hermano pudiera estar enfermo, al haber transcurrido una semana desde que Shukaku fue robado de su cuerpo y que Gaara, continuaba padeciendo insomnio.

    -No… Al principio pensé que podría tener una enfermedad, pero Kazekage sama es una persona de salud inquebrantable… Estoy segura que solamente necesita descansar, porque estaba quedándose dormido en su… ¿Temari san?...-

    Al oír que Gaara casi se quedaba dormido, Temari dejó caer su canasta con las cajas de avena y desapareció simultáneamente de la vista de Momo.

    “Tengo que avisarle a Kankurou” piensa con inquietud Temari, corriendo a buscarlo en su lugar de entrenamiento.

    ….…

    Profundamente agotado, Gaara apenas empujó la puerta de su casa. Una vez en la privacidad de su hogar, comenzó a desvestirse mientras atravesaba la sala. Dejándose puesto los pantalones y una camiseta de malla. Caminando descalzo, se dirigió a su habitación. No obstante, cada paso que daba era más inestable que el anterior, provocando que Gaara finalmente perdiera el equilibrio antes de cruzar el comedor.

    Al precipitarse de frente contra el suelo, un fuerte abrazo desde su espalda, lo sostuvo de pie.

    -Kankurou… - murmuro débilmente Gaara, esforzándose por mantener los ojos abiertos -… Me estoy durmiendo…-

    -Eso veo… - responde muy contento Kankurou, sin explicarse el semblante nervioso que exteriorizaba Gaara.

    Gaara reconocía de sobra, que su insoportable agotamiento era por causa del sueño. Que ahora, que había dejado de ser el contenedor de Shukaku, dormiría cuando le placiera. Aún así, se sentía inquieto. Temía que su cuerpo, respondería inadecuadamente a la alteración del estado de conciencia que implicaba soñar. Porque jamás había dormido en quince años. Siempre había estado conciente del mundo que lo rodeaba y de pronto, debía adaptarse a dormir por las noches, en vez de contemplar la luna en el firmamento.

    Por eso, decidió continuar con su desgastante rutina habitual hasta que su cuerpo, consumiera toda su energía.

    -Temari preparo la tina para que te bañaras y durmieras con mayor comodidad… Pero dudo, que puedas bañarte sin ayuda de nadie aunque lo intentaras- comenta intranquilo Kankurou, cruzando el brazo de Gaara sobre su cuello –Pienso que deberías dejarlo para otro día-

    -…No…- murmura con tono casi inaudible Gaara, dejando que Kankurou lo ayudará a caminar –Sí se tomo la molestia de prepararme el baño, quiero usarlo… No me gustaría ofenderla…-

    -Igual que con la repulsiva avena que desayunamos todas las mañanas… jejejeje… Somos demasiado condescendientes con ella…- menciona con broma Kankurou, consiguiendo robarle una delgada sonrisa al reservado de Gaara.

    Cuando llegaron al cuarto de baño, Temari los esperaba.

    Al ver el angustioso grado de fatiga que experimentaba Gaara, también Temari considero inconveniente que tomara un baño. Temiendo que pudiera sufrir un accidente, Temari quiso sugerirle dejarlo para otra ocasión.

    -Kankurou… ¿Querrías bañarte conmigo?- pregunta suavemente Gaara, pareciendo sonrojado.

    -¡Kankurou responde!- grita exaltada Temari, exigiendo una respuesta al propinarle un violento codazo a Kankuro en las costillas.

    -S…si…- responde adolorido Kankurou, sorprendido que cada vez más, parecían una familia.

    Admirada, Temari sonrió satisfecha. Los dos hermanos entraron al baño mientras ella, les detenía la puerta. Una vez adentro, cerró la puerta del baño y se quedo sola en el pasillo.

    “En lo que se bañan, cambiaré todas las sábanas de la cama de Gaara por las que tengo guardadas en mi armario, pondré en su cama mi mejor almohada y hasta comprare un pijama nuevo si me apuro...” piensa emocionada Temari, entrelazando con maravilla los dedos de ambas manos “Fue una verdadera suerte que Momo me saludara. De lo contrario no hubiésemos improvisado este pequeño obsequio. Espero que Gaara recuerde con cariño su primer sueño pero sobretodo… Aprecie que nos preocupamos por él…”

    …….

    Para Kankurou, era admirable la audacia de Gaara para enjabonarse con su pequeña toalla y aclararse después con agua, sentado equilibradamente sin ninguna ayuda sobre la reducida banqueta. Sentados en banquetas separadas delante del grifo de agua, Kankurou también se enjabonaba con otra diminuta toalla y se aclaraba el jabón con agua.

    Una vez aseados, enjuagaron las toallas con agua fría y las doblaron para usarlas en la frente. Con mucho cuidado, Kankurou asistió a Gaara para que pudiera sumergirse en la enorme tina del baño. Una vez que Gaara pudo sentarse con firmeza en medio del agua, Kankuro lo acompaño ocupando un lugar a su lado para vigilarlo de cerca; pensando, que por el intenso calor del agua, Gaara pudiera desfallecer y hundirse en la tina.

    Los minutos transcurrieron lentamente. Silenciosos, Gaara y Kankurou contemplaban la resplandeciente luna, a través de la estrecha ventana delante de ellos. Súbitamente, Gaara comenzó a revolverse, agitando el agua. Sobresaltado, Kankurou uso un brazo para sujetarlo por los hombros, temiendo que su hermano se deslizara fuera de su alcance.

    -Podríamos dejar la tina sí lo deseas- menciona Kankurou de forma servicial, atrayendo a Gaara contra su hombro.

    Gaara negó con la cabeza, consternando a Kankurou.

    -¿Por qué?..- pregunta con desconcierto Gaara, inclinando la cabeza hasta que su barbilla rozo con el agua -… ¿Por qué tomarse estas molestias?... ¿Tu y Temari… no podían simplemente dejarme dormir?-

    Kankurou carraspeo la garganta antes de responderle.

    -Sí… Supongo que podíamos… Pero…- responde con sinceridad Kankurou y observando con detenimiento varios mechones de cabello rojo, suspiró con nostalgia -… Hace una semana eras un cadáver y hace siete días que deberías estar conciliando el sueño… Temari y yo, pensamos que podrías perder tu salud si continúas con insomnio… Gaara, no voy a negar que queremos ser mejores hermanos contigo, porque todavía nos duele haberte perdido… Por todo esto, pienso que podemos tomarnos cualquier molestia por ti, aunque sea estresante tenerte como hermano pequeño…-

    Impresionado de la inesperada confesión de su hermano, Gaara lo volteó a ver con ojos anhelantes. Por su parte, Kankuro le correspondió con una sonrisa juguetona.

    “¿Así es como se quieren los hermanos?” piensa conmovido Gaara, llevándose una mano al corazón y apoyando la cabeza en el hombro de Kankuro, que cerraba con mayor fuerza su abrazo sobre él.

    Por primera vez, Gaara disfrutó a plenitud la proximidad con su hermano mayor.

    Transcurrieron varios minutos más y decidieron que era tiempo de salir del agua.

    …...

    El relajante baño, ocasiono que el cuerpo de Gaara se entorpeciera completamente y no pudiera sostenerse de pie aunque se apoyara otra vez en Kankurou. Arropados con batas, Kankurou cargó a Gaara hasta su habitación, lugar casi en penumbras donde Temari los aguardaba intranquila.

    -Gaara ¿Te sientes bien?- pregunta muy preocupada Temari acercándose hasta ellos -¿Qué puedo hacer por ti?... ¿Quieres cenar?... ¿Te preparo un tazón de avena?...-

    -Gracias… - murmura suavemente Gaara, durmiéndose en los brazos de Kankurou… - Pero… no ahora. Siempre… eres muy gentil... conmigo -

    Respetando los deseos de Gaara, Temari suspiro.

    -… Si…- responde con dulzura Temari, revolviendo cuidadosamente la espesa cabellera de Gaara - En otra ocasión será…-

    Con suma delicadeza, Kankurou apoyó una rodilla sobre la cama para descansar a Gaara.

    -Fin del paseo- menciona con agrado Kankurou, recostando a Gaara sobre las sábanas de seda.

    Bajo la tenue luz de la habitación, Temari se reunió con Kankurou a una orilla de la cama. Juntos contemplaron el instante cuando Gaara se desvaneció.

    -Es una lástima que nuestro hermano, no sea más un niño- murmura con añoranza Temari.

    -¿A que viene eso?- susurra confundido Kankurou, cruzándose de brazos.

    Con una sonrisa melancólica, Temari colocó las manos en sus caderas.

    -Me hubiese gustado arroparlo con el pijama que compre- responde con voz baja, señalando dos prendas perfectamente dobladas sobre el buró, que nadie había notado –Supongo que te corresponde vestirlo o podría resfriarse sí amanece con esa bata húmeda-

    -Entiendo…- responde discretamente Kankurou, observando fijamente a su pequeño hermano –Temari… ¿Algún día le compensaremos todos los años que lo hicimos a un lado?-

    Ignorando una respuesta, Temari hizo una mueca de tristeza.

    -No lo sé… - responde pausadamente Temari, posando una mano sobre el hombro de Kankuro -… Lo importante es que tenemos toda la vida para resarcir el daño. Y estoy segura, que en estos dos años hemos tenido un magnífico progreso… Míralo, duerme tranquilo y pareciera que sonríe…-

    Por indicación de su hermana, Kankurou presto mucha atención a los labios de Gaara.

    -Jejejeje… Talvez tengas razón- menciona satisfecho Kankuro, esbozando una gigantesca sonrisa que contagio de alegría a Temari, que sonreiría como él -… ¿Crees que Gaara nos platicará sus sueños?-

    -Eso me gustaría mucho… ¿En que podrá soñar nuestro pequeño hermano?- murmura con curiosidad Temari, ladeando la cabeza.

    En el primer sueño de Gaara, él es muy pequeño y alegremente juega pelota con los niños de la aldea. Su hermano Kankuro lo protege de los grandulones, mientras su hermana Temari le ofrece deliciosos pastelillos durante la merienda.

    FIN

    Antecedentes a la serie

    Gaara es el más joven de los hijos del Cuarto Kazekage, siendo Temari y Kankurō sus hermanos mayores. Para cuando nació, la Aldea Oculta de la Arena vivía su época oscura originada por la desaparición del Tercer Kazekage,este desaparecio por Sasori quien secuestro al tercer kazekague, lo asesino y lo convirtio en una se sus marionetas; esto provoco que los enemigos aprovecharan de esto para atacar la aldea, haciendo difícil, por ende, la existencia de la población. Debido a lo anterior, el cuarto Kazekage le ordenaría una de las ancianas de la Aldea, Chiyo, que sellara al bijū de una cola, Shukaku, en su hijo recién nacido,[7]​ con la esperanza de que Gaara se convirtiera en una poderosa arma que protegiera a la debilitada villa de sus adversarios. Como un sacrificio era necesario, Karura, la madre de Gaara, falleció al dar a luz, maldiciendo a la Aldea antes de morir.

    Gaara sería entrenado por su padre, pero fue criado por su tío materno Yashamaru quien en una ocasión le indicó a este que pensaba que la arena que lo protegía tenía en sí la voluntad de su madre. Durante sus seis primeros años Gaara fue objeto del temor y el odio de su familia y de toda la aldea, quienes veían en él solo al monstruo sellado, pero, a la vez, sentía que su tío Yashamaru lo quería, al ser el único que cuidaba de él comprendiendo que el jinchūriki no podía controlar sus poderes.

    Ideograma Kanji para Amor. Gaara posee este ideograma tatuado en la parte izquierda de su frente

    Su padre, sin embargo, no observaba las cosas de igual manera y, al ver como Gaara atacaba frecuentemente a los aldeanos, concluyo que su experimento había fracasado y que su hijo se estaba convirtiendo en una amenaza para la población. Por todo ello, le ordenaría a Yashamaru que lo matara, para lo cual él se cubriría el rostro buscando no ser reconocido. De todas maneras, fallaría en su intento, quedando al borde de la muerte y siendo reconocido por Gaara gracias a una cortada en su dedo y al quitarle este el velo que lo cubría.

    Antes de morir, y ante la suposición de Gaara de que había sido obligado por el Kazekage para cumplir la misión, Yashamaru le revelaría que sus intenciones de asesinarlo eran genuinas y que nunca le quiso ya que le consideraba responsable de la muerte de su querida hermana. También le explicó el significado del nombre Gaara: El demonio que sólo se ama a si mismo (我を愛する修羅, Ware wo ai suru shura?), nombre que su madre había escogido no porque lo amara sino para recordar el rencor que ella había sentido al ser sacrificada para crear un arma, legándole a su hijo su deseo de destruir la Aldea Oculta de la Arena como venganza a esa afrenta. Finalizadas esas palabras, se inmolaría en una explosión esperando que su sobrino muriera con él, un último intento en vano. Comprendiendo entonces que era odiado por todos, y que la única persona con la que había establecido un lazo afectivo y que le había enseñado el significado del amor como protección a sus seres queridos le había traicionado, Gaara empleó su arena protectora para tatuarse en la frente el signo '愛' ("amor") como señal de que él sería, en lo sucesivo, el "demonio que sólo se ama a sí mismo".

    El fracaso de Yashamaru no amilanaría al padre de Gaara para seguir enviando asesinos a su hijo por los siguientes seis años; sin embargo, dados los fracasos sucesivos, finalmente aceptaría que él podría ser más útil como una herramienta efectiva y poderosa y decidiría usarlo en todas las misiones importantes que implicaran largos viajes fuera de la aldea. Bajo ese concepto, Gaara sería enviado para participar en la invasión a la Aldea Oculta de la Hoja con el objetivo de demostrar la fortaleza de los shinobis de la Arena. Esa demostración sería importante ya que la apariencia de debilidad militar había llevado, incluso, a que el gobernante del País del Viento, en donde se encuentra localizada la Aldea, prescindiera de sus servicios para preferir contratar a los de la Hoja para cumplir sus encargos y misiones. Así mismo, sería acompañado por sus hermanos en una célula ninja al mando de Baki (muy a pesar de los deseos de Temari de no combatir), con la esperanza de que, ante la ausencia total de lazos afectivos, fueran los lazos sanguíneos los encargados de controlar a la bestia... por el momento.

    Historia

    En la Aldea de la Hoja, Gaara aparecería deteniendo verbalmente a Kankurō y, con ello, un altercado entre su equipo y el Equipo 7, debido a un incidente entre el marionetista y Konohamaru, que se encontraba en ese momento con Naruto y Sakura y que tomaba tintes agresivos con la aparición de Sasuke, de quien el jinchūriki de la Arena se interesaría.

    Durante los exámenes Chūnin, en la prueba escrita, se mostraría a Gaara ejecutando su técnica del Tercer Ojo para labores de espionaje y recolección de información. Después, el equipo de Gaara logra alcanzar la meta de la prueba del Bosque de la Muerte en primer lugar, superando por cuatro horas el anterior récord. De hecho, Anko le mencionó a Sarutobi que los del equipo de Gaara no tenían ni heridas ni ninguna señal de que les hubiese ido difícil la prueba. En esta prueba, además, se muestra por primera vez el talante sanguinario de Gaara, cuando asesina al ninja de la Aldea Oculta de la Lluvia Shigure, que le había atacado, para después encargarse de sus compañeros Baiu y Midare a pesar de sus súplicas de clemencia. Kankuro le increpó por sus ansias de sangre, pero Gaara le terminó amenazando.

    En los combates preliminares, Gaara, cuya mente ya mostraba signos de inestabilidad después del combate sangriento entre Neji Hyūga y su prima Hinata, sería emparejado para combatir con Rock Lee. En este combate, el ninja de la Arena vería como una pelea en principio sencilla se le complicaría al ser vulnerada su defensa absoluta por el fuerte y veloz taijutsu de su contrincante, quien, además, potenciaba su ataque con una técnica prohibida que le permitía abrir puertas mentales para un mayor fluido de chakra. No obstante lo anterior, Gaara neutralizaría los ataques de Lee con sus técnicas defensivas y, aprovechando el desgaste de su rival, le trituraría la pierna y el brazo izquierdo, teniendo que interponerse Maito Gai para proteger a su alumno predilecto. Esa intervención le daría la victoria a Gaara pero, a la vez, le volvería a traer los dolorosos recuerdos de la infancia que llevaba.

    El no haber podido acabar con su contrincante de preliminares haría que Gaara se sintiera sin la tranquilidad que necesitaba para, según él, <<Reafirmar su Existencia>>. Por ello, en el interludio entre los exámenes preliminares y los finales, volvería a intentar el asesinato de Lee en el Hospital, siendo oportunamente detenido por Naruto y por Shikamaru Nara, a los cuales Gaara les contaría su historia, aterrorizando, con ello, al jinchuriki de la Hoja al verse inferior frente a alguien que había creado su fortaleza con base en la absoluta soledad, sin la ayuda de nadie. Luego, acecharía a Sasuke, quien se encontraba entrenando con Kakashi, explicándole que su interés en él se basaba en que conocía lo que era la soledad y sentía, por ende, que el matarlo le daría un apego más fuerte a la vida que llevaba. Finalmente, asesinaría fácilmente al genin del Sonido Dosu Kinuta, quien había decidido atacarlo con el fin de asegurarse una confrontación con Sasuke Uchiha en las finales, usando el despertar de su bijū.

    En el examen final, enfrentando a Sasuke, Gaara sería herido al punto de que, por primera vez, vería salir su propia sangre de su cuerpo tras recibir la técnica Chidori de su oponente, a pesar de que el ninja de la Arena había estado usando sus técnicas de defensa más potentes. El ataque causó tal impacto en Gaara que se desestabilizaría por completo, perdiendo el sentido y transformándose parcialmente en el Ichibi, para sorpresa y terror de sus compañeros de equipo, quienes se vieron obligados a llevárselo en momentos en que daba inicio la invasión a la Aldea de la Hoja. Comprendiendo rápidamente la situación, Sasuke saldría en su persecución siendo, a su vez, seguido por Sakura Haruno, Naruto y Shikamaru, tras una orden de Kakashi, y por Shino Aburame, quien actuaba independientemente.

    Tras internarse en un bosque aledaño a la aldea, Gaara recuperaría la conciencia y, con ello, reanudaría su batalla con Sasuke, quien le había dado alcance; sin embargo, el Uchiha se vería fácilmente sobrepasado dado su uso irresponsable del Chidori y la afección física que le provocaba el sello maligno que le hizo Orochimaru. Al final, cuando Gaara se aprestaba a dar el golpe definitivo, sería detenido por Naruto, quien venía junto con Sakura. Dicho trabajo en equipo perturbaría aún más la mente de Gaara, sobre todo cuando reinició su ataque contra Sasuke y, en el proceso, aprisionaría a Sakura en una trampa de arena después de que ella intentara protegerlo. Esto marcaría el inicio del combate entre el jinchūriki de la Arena y el de la Hoja.

    Al comienzo de la pelea, Gaara tomaría ventaja del terror y el sentimiento de inferioridad que Naruto percibía sobre sí mismo frente a su rival; sin embargo, el deseo de proteger a Sakura y el hecho de que Sasuke le pidiera que huyera con ella mientras él usaba sus últimas fuerzas para cubrirlos, haría reaccionar a Uzumaki, quien comprendería que, al final, lo que realmente fortalece es el deseo de proteger a los seres queridos, y no el de protegerse a sí mismo. Con esta resolución, Naruto tomaría el control de la pelea aun cuando Gaara se transformaría por completo en el Shukaku y lo invocaría mediante una técnica de sueño. Finalmente, Naruto, con la ayuda de su invocación a Gamabunta, derrotaría a Gaara, a quien el cansancio lo dejaría inmóvil y, con ello, vulnerable ante el próximo ataque de su rival, quien aún se podía mover con dificultad. Perplejo ante la determinación de Naruto, le pregunta como puede luchar por sus compañeros y no por él mismo, ante lo cual Uzumaki le responde que ellos reconocieron su existencia y que, con ello, lo sacaron del infierno de la soledad, volviéndose unas personas muy importantes para él al punto de enfrentarse a todo aquel que los amenace, si fuera necesario. Ello le haría recordar a Gaara la definición de Amor que le había enseñado su tío Yashamaru y comprendiendo, de ese modo, que solo se haría más fuerte si protegía a otros, desechando, de este modo, su antigua concepción de existencia.

    Para ese momento ya había llegado Sasuke a informarle a Naruto que Sakura ya había sido liberada y Temari con Kankurō con la intención de cumplir la orden de proteger al arma de la Arena; no obstante, Gaara les pide que no peleen, tras lo cual deciden huir. En el camino y tomando como propia el punto de vista de Naruto sobre la existencia, al grado de recordar el nombre de alguien de quien no tenía ningún interés anteriormente, Gaara decide dar el primer paso disculpándose con sus hermanos, algo que a ellos los sorprendería enormemente.

    La derrota de Gaara sería solo el epilogo del desastroso fracaso que había significado para la Arena la invasión a la Hoja, donde la perdida de varios shinobis y, lo más grave, la traición de la que fue víctima por parte del Sonido al asesinar estos al Cuarto Kazekage, obligarla a dicha aldea la firmar la rendición incondicional y a restablecer una alianza de cooperación mutua, en momentos en que una y otra fuerza ninja quedaban debilitadas para afrontar misiones y proteger sus territorios de otros enemigos. Bajo esa alianza se daría, tiempo después, la participación de Gaara y sus hermanos en la misión de rescate a Sasuke Uchiha que llevaba a cabo el equipo que lideraba Shikamaru y que completaban Naruto, Neji Hyūga, Kiba Inuzuka y Choji Akimichi. En dicha misión, Gaara enfrentaría al ninja del Sonido Kimimaro, quien era el antiguo líder del grupo de escolta de Orochimaru y que antes había mostrado su superioridad técnica ante Naruto y ante Rock Lee. La pelea no solo mostraría las nuevas técnicas que manejaba el jinchūriki de la Arena sino lo mucho que había cambiado su modo de ver la vida, al defender a aquel a quien antes había intentado matar y al constatar la importancia del reconocimiento de la existencia por otras personas al ver que Kimimaro se sintió ofendido tras el insulto que hizo sobre Orochimaru. Dicho insulto impulso a Kimimaro a pelear con más furia, al punto de quedar en inmejorable posición de asesinar a Gaara en momentos en que el shinobi de la Arena pensaba que le había derrotado con su último movimiento; sin embargo, la enfermedad terminal que aquejaba al subordinado del líder del Sonido, y que lo mataría en ese preciso instante, impediría esta acción.

    Una vez terminada la misión y habiendo llegado a su aldea, y en una muestra de lo mucho que había mejorado la relación con sus hermanos, Kankurō tendría una conversación privada con Gaara en donde lo intentaría persuadir de su intento de ganarse el afecto de los habitantes de la Arena dada la desconfianza y el miedo que, incluso, no solo desesperaba en ellos sino también entre los consejeros y los otros combatientes. Gaara, frente a esto, respondería que no hacer nada tampoco le ayudaría con esa intención y que había decidido tomar como suyo el sueño y la determinación de Naruto. Esta decisión daría sus resultados cuando, dos años y medio después, Gaara se convertiría en el Quinto Kazekage y sería apoyado por sus subalternos y animado por los pobladores durante su batalla contra Deidara, de la Organización Akatsuki, cayendo derrotado al proteger a la aldea y secuestrado por su rival para extraerle, junto con los otros miembros de dicha organización, el bijū que poseía.

    Este ataque y el subsiguiente secuestro provocaría la reacción de la Hoja enviando a su rescate a la célula ninja compuesta por Naruto, Sakura, Kakashi y Temari y a la que, más tarde, se unirían el Equipo Gai y la anciana Chiyo, quien estaba retirada de servicio y que le explicaría al Equipo Kakashi todo lo referente a la existencia de los bijūs y los jinchūrikis. Ya en el lugar de desarrollo de la misión y tras los duros combates que habían tenido los equipos de la Hoja contra Deidara y su compañero Sasori, Gaara sería rescatado, aunque ya muerto por haberle sido extraído el bijū que llevaba en su interior. Finalmente, ante el dolor de Naruto por haber sido incapaz de salvarle su vida, Chiyo ejecutaría una técnica que resucitaría a Gaara usando, para ello, el chakra del jinchūriki de la Hoja, aún sabiendo que, de todas maneras, esa acción implicaría sacrificar su vida. Gaara, quien ya se había resignado a perder su vida, se vería saludado y sorprendido por la visión de un Naruto tomándole el hombro, al resto del equipo que fue a su rescate y a los combatientes de la Arena celebrando su resurrección y pasando, luego, a la tristeza por el deceso de Chiyo, tras lo cual iniciarían el viaje de regreso llevando su cuerpo de vuelta a la Aldea para su funeral. Al final, Gaara se despediría de los ninjas de la Hoja y en especial de Naruto con un apretón de manos. Recientemente ha respondido a la reunion de los kages y se esta despidiendo de los aldeanos marchandose junto a sus hermanos.

    Descripción de personaje

    Personalidad

    La personalidad que se le conocería a Gaara desde su aparición en la serie sería una consecuencia directa de los sucesos de su infancia: toda la aldea le temía y le odiaba por el terrible poder del bijū que albergaba en su interior. A consecuencia de ello, Gaara se volvió retraído, silencioso y consumido por el odio que sentía hacia todo el mundo. Entendiendo que la única persona con la que él podía contar era con él mismo, en una forma extrema de narcisismo, aprendió a disfrutar aniquilando a los asesinos que mandaba su padre contra él, al punto de desarrollar la creencia de que el matar a otros era la manera de "justificar su existencia". Esto, a su vez, desarrollaría un círculo vicioso ascendente: dado que mataba para reafirmar su vida y dado el hecho de que, probablemente, existirían en el mundo personas que, siendo tan o más fuertes que él, podían amenazar su existencia, el instinto asesino de Gaara no solo sería usado para satisfacción propia sino como su propio método de subsistencia. Además, el insomnio que padecía y que se ve reflejado en las ojeras que se circunscriben alrededor de sus ojos, para evitar que, durante el sueño el bijū se hiciera con el control de su ser, lo cual haría que su personalidad consciente se volviera aún más inestable.

    Su combate contra Naruto Uzumaki, sin embargo, le dejaría como lección que el pelear para proteger a otros lo haría más fuerte que pelear para sí mismo, modificando radicalmente sus paradigmas, creencias y prejuicios, disculpándose con aquellos a quienes él les había hecho daño y proponiéndose a mejorar sus relaciones con sus familiares y con la gente de su aldea, actitudes que lo llevarían, incluso, a tener aptitudes para tomar el liderazgo de su pueblo y protegerlo al punto de dar su vida, sin importar las opiniones que estos tengan sobre él.

    Habilidades y Técnicas

    Diagrama de las habilidades de Gaara en distintos momentos de la historia:      Examen chūnin[1]     Fin de la primera parte[2]     Segunda parte[3]

    Siendo el portador del Ichibi Bijū Shukaku, Gaara tiene el poder de controlar la arena y de que, incluso, la arena lo proteja inmediatamente de cualquier ataque, actuando independientemente de los deseos del jinchūriki (este movimiento es conocido como el Suna no Tate (Escudo de arena). Sin embargo, esto le imposibilita el uso de taijutsu(pela cuerpo a cuerpo) como modo de combate. Gaara siempre lleva una calabaza hueca, la cual puede convertir en arena para amortiguar sus caidas tal y como lo demostro en la pelea que tuvo con Rock Lee en los examenes de Chunnin, esta calabaza la lleva a la espalda y contiene arena embuida de su chakra. Aunque Gaara puede controlar cualquier elemento arenoso o hasta crear arena a partir de los minerales del suelo, controla con más facilidad la arena de la calabaza, haciendo sus ataques más rápidos y potentes. Además usa la arena para actividades complementarias, como levitar o espiar.

    No se sabe hasta qué punto se han visto perjudicadas sus habilidades después de la extracción del biju, pero se supone que técnicas como el Escudo de Arena, el Sueño Fingido y el Escudo y Lanza de Shukaku consumirán más chakra o ya no podrá realizarlas.

    • Suna no Tate (砂の盾|Escudo de arena): Una técnica primaria de Gaara concedida por el poder del Shukaku. Cuando es atacado la arena se interpone entre el atacante y Gaara. Para ello la arena adopta muchas formas, desde simples ráfagas de arena hasta una semiesfera de arena endurecida.
    • Saiko Zettai Bogyo: Shukaku no Tate (最硬絶対防御・守鶴の盾| Defensa de Máxima Dureza: Escudo de Shukaku): Esta Técnica crea una estatua de arena con aspecto de Shukaku en frente de sí, que contiene los minerales más duros del suelo donde esté luchando, el cual es combinado con su chakra y la arena que posee. Dicha técnica fue usada en la batalla contra Kimimaro.
    • Saiko Zettai Hogeki: Shukaku no Hoko (最後の絶対的な違反守のやり| Ofensiva de Máxima Dureza: Lanza de Shukaku): Esta técnica fue hecha durante la saga Anime del Shintenshōnin y no ha sido retratada, hasta el momento, en el Manga. Esta técnica crea una lanza del mismo material del que se crea el Escudo del Shukaku.
    • Daisan no Me (狸寝入りの術| Tercer Ojo): Esta técnica crea un ojo flotante con arena conectado inalámbricamente con el nervio óptico del ojo, que puede usar para ver a distancia. Lo suele usar cuando está encerrado dentro de su coraza defensiva absoluta de arena, para ver al exterior.
    • Suna no Yoroi (砂の鎧| Armadura de Arena): Esta es una técnica de último recurso que consiste en ponerse una fina capa de arena sobre el cuerpo, a cambio de un gran gasto de chakra, para protegerse a corta distancia.
    • Sabaku Kyu (砂漠送葬| Sarcófago del Desierto): Este movimiento consiste en usar la arena para encerrar al enemigo en ella, dejando sólo la cara al aire. Luego puede tapársela con arena y dejar que muera lentamente por asfixia, o realizar el Funeral del desierto.
      • Suna Shigure (砂時雨| Lluvia de Arena): Una variante de la anterior, hace que llueva arena sobre el enemigo para inmovilizarlo. Su utilidad radica en que, para el enemigo, es más difícil de eludir que el Ataúd del Desierto.
      • Ryusa Bakuryuu (流砂瀑流| Avalancha del Desierto): Versión mejorada, en donde se mueve una enorme cantidad de arena hacia el enemigo convirtiendo el panorama en un océano de arena. La arena usada se extrae del terreno.
    • Sabaku Sousou (砂縛柩| Funeral del Desierto): Después de hacer el Ataúd del desierto se utiliza este movimiento para que la arena presione al enemigo hasta triturarlo.
      • Sabaku Taisô (砂漠大葬| Luto Imperial del Desierto): Variante de la anterior que es usada después de ejecutarse la Avalancha del Desierto. Genera ondas de presión que comprimen al que se encuentre enterrado.
    • Sabaku Rou (砂漠牢| Prisión del Desierto): La arena rodea al enemigo y se comprime formando una esfera de arena gigante endurecida de donde no puede salir.
    • Tanuki Neire no Jutsu (狸寝入りの術| Técnica del Sueño Fingido: Tanuki): Esta técnica fuerza el sueño de Gaara para que Shukaku tome el control de su cuerpo.
      • Futon: Mugen Sajin Daitoppa (Elemento Viento: Gran Tormenta de Arena Infinita): Usada cuando está en estado Shukaku. Inspira aire, lo mezcla con arena y chakra y lo dispara a gran presión por la boca y por bocas secundarias que salen de su cuerpo contra todos los enemigos y en todas direcciones. Es una técnica de ataque y defensa.
      • Futon: Renkudan (Elemento Viento: Ráfaga de Aire Comprimido): Absorbe aire y lo suelta por la boca en forma de bola de aire comprimido cuando está en estado Shukaku. Destroza al oponente que reciba el impacto.
    • Suna Shuriken (狸寝入りの術| Shuriken de Arena): Esta técnica, como su nombre lo dice, consiste en lanzar Shurikens hechos de arena a toda velocidad para cortar al enemigo.
    • Suna Bunshin (Clon de Arena): Crea un clon de sí mismo de arena. Originalmente sólo aguanta tres golpes, pero Gaara mejora la técnica y cada vez que el clon recibe un golpe la arena se repliega y atrapa al enemigo.
    • Suna Raishin (Trueno Divino de la Arena): Esta técnica lanza agujas de arena que rodean al enemigo. Después sueltan una descarga eléctrica que absorbe la electricidad del cuerpo del oponente y la envía bajo tierra. Es efectiva contra contrincantes con chakra elemento Rayo. Fue usada en la segunda película de Naruto.
    • Ryuu Sabakuryuu (Dragón del Desierto Fluyente): Gaara invoca una gran cantidad de arena que cubre todo el lugar, y luego crea un gran remolino de arena que comprime y corta en rodajas al que atrapa. También fue usada en la segunda película de Naruto.


    ==

    Primer Sueño de Gaara ==

    Acerca del Personaje

    Sobre el Anime

    • Además de las apariciones en la historieta, se le dedicó la última parte de la trama del Relleno que posee la serie entre los episodios 115 y 220. En esa parte, Gaara, junto con sus hermanos deben rescatar a una kunoichi, que es alumna suya, que ha sido secuestrada por unos ninjas de una Aldea conocida como Takumi con el fin de usarla como señuelo para usar el chakra del Ichibi Bijū y, así, revivir un arma definitiva propia de dicha aldea. El único efecto que tendría esa saga sobre el Anime, además de adelantarnos un aparte de la charla entre Gaara y Kankurō, sería el darle una historia particular a la secuestrada, llamada Matsuri, para darle justificación a una aparición más relevante en la animación de Naruto: Shippūden, durante la saga de rescate a Gaara.

    Popularidad

    El hecho de que este personaje ha sido concebido como un Doppelgänger del protagonista le ha granjeado adeptos entre los fanáticos de la serie y la prensa especializada; ejemplo de lo anterior es el concepto que el reconocido portal Anime News Network hace, en marzo de 2008, sobre la saga de la invasión a la Hoja, a propósito del lanzamiento de un DVD sin cortes. En esta, el portal celebra la profundidad y emoción que alcanza la serie en esa parte, describiendo que, para la fecha de la publicación del artículo, "En ningún otro momento de la serie, hasta ahora, el protagonista ha brillado con tanta intensidad como lo ha hecho en el corto periodo de su batalla contra Gaara (Nowhere in the entire series run does Naruto shine brighter than in the peak period of his battle against Gaara.)". Otro ejemplo sería, también, las encuestas que la Weekly Shonen Jump ha hecho sobre los personajes de la serie entre los lectores del Manga en Japón entre el 2001 y el 2005 y, en las cuales, Gaara siempre se mantuvo en el Top-10 y cuya mejor posición fue el 7mo lugar.[8]

    Encuesta

    (Fecha de Publicación

    -Como Tankōbon-)

    Episodio Posición
    1 (05/01/2001) 60
    2 (05/01/2002) 107
    3 (05/01/2003) 146-147
    4 (04/30/2004) 199
    5 (03/06/2005) 245 10º
    6 (05/06/2006) 293

    Otras Apariciones

    Fuera de la serie, aparece en Naruto la película 2: Las ruinas ilusorias en lo profundo de la tierra y en el OVA El festival deportivo de Konoha. En cuanto a los videojuegos sobre la serie, puede usar la apariencia del Shukaku durante el combate, así como ejecuta técnicas que no se han mostrado ni en ilustración ni en la animación.

    Misiones Completas
    • Rango D: 0
    • Rango C: 9
    • Rango B: 8
    • Rango A: 14
    • Rango S: 13[3]


    CURIOSIDADES

    • Lo que rodea los ojos de gaara son ojeras ya que el no duerme por tener el bijuu en su interior, al dormir este podria apoderarse de el.
    • Una gran parte de los fans les encantaria ver un romance entre gaara y la jounin de su aldea.
    • En todas las apariciones de Gaara nunca se ha sentido atraido fisicamente o emocional por nadie. Solo por naruto, pero es admiracion por su actitud ante la vida que le toco.

    Fuentes

    • First Official Data Book (秘伝・臨の書キャラクターオフィシャルデータBOOK, Hiden: Rin no Sho Character Official Data Book?)
    • Second Official Data Book (秘伝・闘の書キャラクターオフィシャルデータBOOK, Hiden: Tō no Sho Character Official Data Book?)
    • Jump's 2nd Great Hero Book's Mini Data Book (秘伝・翔の書オフィシャルキャラクターデータBOOK mini, Hiden: Shō no Sho Official Character Data Book mini?)
    • Anime y Manga Guidebook de Naruto (秘伝・翔の書オフィシャルキャラクターデータBOOK mini, Hiden: Shō no Sho Official Character Data Book mini?)
    • Kishimoto, Masashi (2002), NARUTO―ナルト―[秘伝・臨の書], Shueisha, 51, ISBN: 4-08873-288-X.
    • Kishimoto, Masashi (2005), NARUTO―ナルト―[秘伝・闘の書], Shueisha, 62-63 ISBN: 4-08873-734-2.
    • Tomado directamente de los capítulos de Manga y episodios de Anime de la serie.

    Referencias

    1. a b c d e Kishimoto, Masashi (2002). Hiden: Rin no Sho - Character Oficial Databook. Japón: Shūeisha. ISBN 4-08-873288-X. 
    2. a b c d Kishimoto, Masashi (2005). Hiden: Tō no Sho - Character Oficial Databook. Japón: Shūeisha. ISBN 4-08-873734-2. 
    3. a b c d e Kishimoto, Masashi (2008). Hiden: Sha no Sho - Character Oficial Databook. Japón: Shūeisha. ISBN 978-4-08-874247-2. 
    4. Kishimoto, Masashi (2007). Uzumaki: The Art of Naruto. Viz Media. p. 142. ISBN 1-4215-1407-9. 
    5. Vidas distintas...
    6. Kishimoto, Masashi (2007). Uzumaki: the Art of Naruto. Viz Media. p. 127. ISBN 1-4215-1407-9. 
    7. Kishimoto, Masashi (2007). Uzumaki: the Art of Naruto. Viz Media. p. 127. ISBN 1-4215-1407-9. 
    8. Compendio de las Encuestas de Popularidad realizadas sobre la serie (En Ingles)