L'Arianna

Artículo bueno
De Wikipedia, la enciclopedia libre
Esta es una versión antigua de esta página, editada a las 14:02 2 may 2017 por Raymond Gelow (discusión · contribs.). La dirección URL es un enlace permanente a esta versión, que puede ser diferente de la versión actual.
Ariadna
L'Arianna

Baco y Ariadna, de Tiziano, National Gallery de Londres (1520-23). Baco desciende de su carro a su llegada a Naxos.
Género Ópera
Actos 1
Basado en Abandono de Ariadna por Teseo.
Publicación
Idioma Italiano
Música
Compositor Claudio Monteverdi
Ubicación de la partitura Perdida
Puesta en escena
Lugar de estreno Palacio Ducal de Mantua (Mantua, Ducado de Mantua)
Fecha de estreno 28 de mayo de 1608
Personajes
  • Ariadna (soprano)
  • Apolo
  • Teseo
  • Amor
  • Consejero de Teseo
  • Baco
  • Coro de soldados de Teseo (coro)
  • Coro de pescadores
  • Coro de soldados de Baco
Libretista Ottavio Rinuccini[1]
Lamento d'Arianna
(10.4 MB)

L'Arianna (en español: Ariadna), (SV 291) es la segunda ópera del compositor italiano Claudio Monteverdi, compuesta entre 1607 y 1608.[2]​ El fragmento conservado forma parte de las óperas más representativas del Barroco, así como una de las más influyentes en la obra lírica posterior. L'Arianna fue estrenada en Mantua el 28 de mayo de 1608 como parte de la celebración de la boda entre el duque Francisco Gonzaga y Margarita de Saboya.[2]​ La representación, que contó con efectos especiales lujosos e innovadores, fue muy elogiada. Además, el trabajo fue igualmente bien recibido en Venecia, cuando la obra fue nuevamente puesta en escena bajo la dirección del compositor en 1640, con motivo de la inauguración del Teatro San Moisè.[3]

Las partituras se han perdido, excepto el recitativo conocido como Lamento d'Arianna («Lamento de Ariadna»), que se ha conservado gracias a que Monteverdi lo publicó de forma independiente en diferentes versiones.[4][5]​ Este fragmento se convirtió en una obra musical de gran influencia y ha sido ampliamente imitado. El «recitativo expresivo» se convirtió en una característica fundamental de la ópera italiana durante gran parte del siglo xvii.[6]​ Recientemente, el Lamento se ha convertido en una popular pieza en conciertos y recitales, y ha sido grabada con frecuencia. Una versión del Lamento, compuesta por el escocés Gareth Wilson para los textos de los coros que han llegado hasta nosotros, fue interpretada en el King's College de la Universidad de Londres el 29 de noviembre de 2013 con motivo de la celebración del 370º aniversario de la muerte de Monteverdi.[7]

A diferencia de las partituras, el libreto escrito por Ottavio Rinuccini[8][1]​ se ha conservado en su totalidad.[9]​ Rinuccini escribió ocho escenas, basadas en las Heroidas de Ovidio y otras fuentes clásicas, para narrar la historia del abandono de Ariadna por Teseo en la isla de Naxos y su posterior ascensión al Olimpo como esposa del dios Baco.[a]

Contexto histórico

El Palacio del Té, en Mantua, sede de la dinastía Gonzaga, donde Monteverdi trabajó como músico de la corte de 1590 a 1612.

Alrededor de 1590, Claudio Monteverdi —nacido en Cremona en 1567—,[11]​ obtuvo un trabajo como violagambista en la corte de Mantua de Vincenzo Gonzaga.[12]​ Durante los siguientes diez años prosperó hasta convertirse en maestro della musica del duque («maestro de música»).[13][12]​ En esa época se estaban dando avances significativos en el mundo del teatro musical; por ejemplo, en 1598 se presentó en Florencia la obra Dafne de Jacopo Peri, generalmente reconocida como la primera de este nuevo género de la «ópera».[14]​ El duque de Mantua se dio cuenta del potencial que tenía ese nuevo género musical para aumentar el prestigio de aquellos mecenas que estuvieran dispuestos a patrocinarlo.[15]

Como parte de sus compromisos laborales con los Gonzaga, Monteverdi tenía que componer o adaptar a menudo piezas musicales para las representaciones que se escenificaban en la corte. Entre ellas se incluye la ópera L'Orfeo, con libreto escrito por Alessandro Striggio el Joven, que fue presentada ante la corte el 24 de febrero de 1607. Esta representación agradó al duque, quien ordenó que se repitiera el 1 de marzo.[16]​ Según un relato de la época, la pieza «no podría haberse hecho mejor;[16]​ [...] la música —que sigue los cánones— se ajusta a la poesía tan adecuadamente, que en ninguna otra parte podrá escucharse algo más hermoso».[13][17]​ Entonces, a Monteverdi le encargaron que escribiera varias piezas para la boda de Francisco, hijo y heredero del duque, prevista para principios de mayo de 1608.[18]​ Estas incluían un prólogo musical para L'idropica —una obra teatral de Battista Guarini— y la música para el ballet dramático Il ballo delle ingrate (Danza de las damas ingratas), con texto de Ottavio Rinuccini. También se planificó una ópera, aunque inicialmente no se sabía quién la realizaría; entre las obras que se propusieron estaban Le nozze di Peleo e Tetide (Las bodas de Tetis y Peleo), con música de Peri y libreto de Francesco Cini, y una nueva versión de Dafne, a cargo de Marco da Gagliano, aunque al final se decidió presentar L'Arianna.[b]​ El duque decretó entonces que la ópera para la boda estuviera basada en el mito de Ariadna y que Rinuccini escribiera el libreto[8]​. A Monteverdi le fue asignada la composición de la música.[19]

Creación

Libreto

Retrato de Claudio Monteverdi, c. 1630.

En la época en que le encargaron el libreto de L'Arianna, Rinuccini era probablemente el más experimentado e ilustre de todos los libretistas. Su carrera literaria se remontaba a 1579, cuando escribió versos para las Maschere d'Amazzoni, un entretenimiento cortesano florentino,[20]​ y era ampliamente conocido por sus contribuciones al intermezzo de la obra de Girolamo Bargagli La pellegrina (La peregrina), que se representó en mayo de 1589 en la boda de Fernando I de Médici y Cristina de Lorena.[21]​ Según Gagliano, Rinuccini tuvo una influencia primordial en el surgimiento de la ópera como género: adaptó las convenciones de los poetas líricos contemporáneos a la hora de escribir los libretos para dos de las primeras óperas, Dafne y Euridice.[c][22]

Para el libreto de L'Arianna, Rinuccini se basó en diversas fuentes clásicas, en particular el libro X de las Heroidas de Ovidio, algunos versos del carmen LXIV de Cátulo, y el pasaje de la Eneida de Virgilio en el que se narra el abandono de Dido por Eneas. También utilizó como referencias obras literarias de su época, como Orlando Furioso de Ariosto, Jerusalén liberada de Torquato Tasso y la traducción de Las metamorfosis de Ovidio hecha por Giovanni Andrea dell'Anguillara en 1561.[23]

Durante los ensayos, Carlo de Rossi —miembro de la corte del duque— hizo saber a Rinuccini que la duquesa Eleonora se había quejado de que la pieza era «muy árida» y necesitaba ser «enriquecida con más acción», por lo que el autor tuvo que ampliar la trama. El libreto, publicado en Venecia en 1622, consta de un prólogo y ocho escenas.[24][d]

Composición

Monteverdi probablemente comenzó a componer a finales de octubre o principios de noviembre de 1607, ya que se ha documentado que la llegada de Rinuccini a Mantua ocurrió el 23 de octubre de ese año. Además de la tarea impuesta por el duque de componer una ópera en tan corto tiempo, Monteverdi tuvo que sobrellevar la muerte de su esposa, que había fallecido el 10 de septiembre de 1607, dejándolo viudo y con dos niños pequeños.[26]​ Casi veinte años después, Monteverdi se quejó de esta situación en una carta a Striggio en la que narraba las dificultades que padeció: «Fue un corto período de tiempo que casi me lleva a la extenuación componiendo L'Arianna».[27]

Al parecer, Monteverdi habría completado la partitura a principios de enero, tras lo cual se iniciaron los ensayos. Sin embargo, su trabajo no estaba terminado, puesto que le solicitaron componer más música para las nuevas escenas escritas después de la petición que Rossi hiciera en nombre de la duquesa Eleonora. Entre el material añadido o ampliado se encuentran la escena de Venus y Cupido y la bendición de Júpiter desde el Olimpo al final de la ópera. En marzo de 1608, bien avanzados los ensayos, el estreno de la ópera peligró debido a la muerte de la soprano principal, Caterina Martinelli, a causa de la viruela.[28]​ Con todo, se pudo contratar en su lugar a la actriz y cantante Virginia Ramponi Andreini, conocida profesionalmente como «La Florinda», quien estaba en ese momento actuando en Mantua. El musicólogo Tim Carter ha sugerido que el Lamento de Ariadna pudo haber sido añadido en esta última etapa para explotar las reconocidas capacidades vocales de la cantante.[29]

Reparto

El reparto exacto que participó en el estreno de la ópera no se conoce, aunque sí se puede confirmar la participación de cantantes como «La Florinda» y Francesco Rasi. Las fuentes consultadas especulan sobre la participación de los otros intérpretes.[30]

Reparto original, 28 de mayo de 1608
Papel
(italiano)
Papel
(español)
Intérprete Voz Notas
Apollo Apolo Francesco Rasi tenor [30]
Venere Venus Desconocido probablemente soprano [e]
Amore Cupido Desconocido probablemente soprano [f]
Teseo Teseo posiblemente Antonio Brandi, «Il Brandino» alto [32]
Arianna Ariadna Virginia Ramponi-Andreini, «La Florinda» soprano [30]
Consigliero Consejero posiblemente Francesco Campagnolo tenor [32][g]
Messaggero, Tirsi Mensajero posiblemente Santi Orlandi tenor [32]
Dorilla Dorila posiblemente Sabina Rossi soprano [32]
Nuntio I Primer enviado posiblemente Francesco Campagnolo tenor [32]
Nuntio II Segundo enviado Desconocido
Giove Júpiter posiblemente Bassano Casola tenor [32]
Bacco Baco Francesco Rasi tenor [30]
Coro di soldati di Teseo; Coro di pescatori; Coro di soldati di Bacco —en español: «Coro de los soldados de Teseo; Coro de pescadores; Coro de los soldados de Baco»—

Sinopsis

La acción va precedida de un breve prólogo del dios Apolo.[34]​ Luego aparecen Venus y Cupido conversando en una costa desierta: Venus informa a Cupido de que el duque Teseo de Atenas llegará en compañía de Ariadna a la isla de Naxos de camino a Atenas. Huyen de Creta, donde la pareja ha sido cómplice del asesinato del Minotauro, monstruo hermanastro de Ariadna, en el laberinto que hay bajo el palacio de su padre, el rey Minos.[34]

Venus sabe que Teseo tiene la intención de abandonar a Ariadna en Naxos y continuar solo su marcha hacia Atenas, y cuando Cupido se ofrece para volver a encender la pasión de Teseo por Ariadna, Venus le indica que ha decidido unir a la bella mortal con el dios Baco, pidiéndole a Cupido que haga posible el amor entre Baco y Ariadna.[35]​ Cupido se oculta en la isla a la espera de que Teseo y Ariadna lleguen.[35]

Ariadna reflexiona sobre su deslealtad hacia su padre, pero declara su amor a Teseo. Sale a encontrar refugio para pasar la noche, tras lo cual el coro de pescadores compara sus ojos con las estrellas del cielo.[35]​ Mientras tanto, Teseo, a solas con su consejero, habla de abandonar a Ariadna. Ambos justifican la decisión basándose en que no sería aceptable para el pueblo de Atenas que la consorte de su gobernante hubiera abandonado a su padre y ayudado a asesinar a su hermanastro.[35]

Un coro saluda a la aurora cuando Ariadna, después de pasar una noche de insomnio, regresa a la orilla con su compañera Dorila y se da cuenta de que la nave de Teseo se aleja. Dorila la consuela y Ariadna, a pesar de su desesperación y de saber que Teseo no volverá jamás, decide ir al jardín para esperarlo. En un interludio pastoril, un coro canta las delicias de la vida rural y expresa la esperanza de que Teseo no olvide a Ariadna. Cuando un mensajero les hace saber la noticia de que Ariadna ha sido abandonada y está afligida, el coro canta de nuevo, esta vez para consolarla.[35]

En la playa, Ariadna canta su lamento por su amor perdido y se dispone a suicidarse. Justo en ese momento unas fanfarrias anuncian la llegada de alguien, y Ariadna, esperanzada, mira hacia el horizonte tratando de divisar a Teseo. En otro interludio, el coro expresa la esperanza de Ariadna por el retorno de su amado, pero un segundo emisario anuncia que no es Teseo, sino el dios Baco quien acaba de llegar.[34]​ Un ballo cantado celebra el compromiso anticipado de Baco y Ariadna. En la escena final reaparecen Cupido y Venus, quien, satisfecha con su plan, se eleva desde el mar antes de que Júpiter proclame sus bendiciones desde el Olimpo. La unión de Baco y la bella mortal es sellada mientras el dios promete a Ariadna la inmortalidad en el Olimpo y una corona de estrellas.[35]

Historia de la representación

Estreno (Mantua, 1608)

La fecha de la boda de Francisco Gonzaga fue pospuesta en varias ocasiones debido a problemas diplomáticos que retrasaron la llegada de la novia a Mantua hasta el 24 de mayo de 1608.[30]​ Las festividades comenzaron finalmente cuatro días después[36]​ y L'Arianna fue representada el 28 de mayo de 1608, siendo el primero de varios espectáculos extraordinarios. Para la ocasión se construyó un gran teatro provisional que —de acuerdo con el cronista de la corte Federico Follino— habría albergado a seis mil personas, cifra que el historiador Carter considera dudosa.[37]​ Sea cual fuera su tamaño, el teatro no tenía capacidad suficiente para albergar a todos aquellos que quisieron presenciar la obra. La crónica de Follino recoge que, a pesar de que el duque había limitado estrictamente el número de familias que podían asistir, algunos visitantes extranjeros distinguidos no pudieron presenciar la obra sentados y tuvieron que agolparse alrededor de las puertas.[36]

La representación se prolongó durante dos horas y media[36]​ y, a pesar de transcurrir en un solo decorado,[37]​ el montaje fue muy lujoso y contó con 300 operarios para manipular la maquinaria escénica.[38]​ La crónica de Follino describe el escenario como «un roquedal salvaje en medio de las olas, en cuya parte más alejada del horizonte se veían en movimiento constante». Tan pronto como la acción comienza, Apolo aparece «sentado en una hermosa nube... que, bajando poco a poco... alcanza en breve espacio de tiempo el escenario... desapareciendo al momento». «Después, todos los artistas demostraron ser excelentes en el arte del canto; todas las escenas tuvieron un éxito más que maravilloso».[36]

El entusiasmo de Follino tuvo eco en otras crónicas realizadas por los dignatarios para sus propias cortes: el embajador de la casa de Este, quien se refirió a la obra como «una comedia musical», mencionó en particular la interpretación de Andreini que, en su lamento, «hizo que muchos llorasen», y la de Francesco Rasi en el papel de Baco, que «cantó divinamente».[39]​ Uno de los compañeros del compositor Monteverdi, Marco da Gagliano, escribió que la música de Monteverdi «había emocionado a toda la audiencia hasta el llanto».[40]

Reestreno (Venecia, 1639-40)

A pesar de la buena acogida que tuvo L'Arianna en su estreno, el duque no solicitó una segunda representación, como sí había hecho con L'Orfeo el año anterior.[41]​ La siguiente representación de L'Arianna habría tenido lugar en 1614, cuando la corte de los Médici en Florencia solicitó una copia de la partitura, presumiblemente con la intención de ponerla en escena. Sin embargo, no hay constancia de que haya habido representación alguna en esa ciudad.[42]

En 1620, Striggio solicitó a Monteverdi que le enviara la música para una actuación proyectada en Mantua como parte de la celebración del cumpleaños de la duquesa Catalina. Monteverdi se tomó el trabajo de preparar un nuevo manuscrito con algunas revisiones, corriendo con los gastos. Sin embargo, informó a Striggio posteriormente de que, si hubiera tenido más tiempo, habría revisado la obra más a fondo.[43]​ Al no tener más noticias de la corte de Mantua, Monteverdi escribió a Striggio el 18 de abril de 1620, ofreciéndole ayuda con la puesta en escena; un mes más tarde, sin embargo, le comunicaron que las celebraciones para la duquesa se ​​habían reducido, y no había tenido lugar ninguna representación de L'Arianna.[44]

Existen indicios de una representación en Dubrovnik poco después de 1620, ya que en 1633 se publicó en Ancona una traducción croata del libreto.[25]​ Sin embargo, el único reestreno confirmado de la obra tuvo lugar en Venecia en 1640. El primer teatro de ópera público de esa ciudad, el nuevo Teatro San Cassiano, se había inaugurado en marzo de 1637 con una puesta en escena de L'Andromeda de Francesco Manelli.[45]​ A raíz de la popularidad de este y otros espectáculos, otras salas remodelaron sus instalaciones para acomodarse a las exigencias de la ópera. L'Arianna fue elegida para la apertura del Teatro San Moisè como teatro de ópera durante el Carnaval de 1639-1640.[h]​ En 1639 se publicó una versión revisada del libreto, con recortes y modificaciones sustanciales respecto de la versión de 1608, que eliminaron aquellos pasajes específicamente ligados a la boda de Gonzaga en Mantua.[46]​ El compositor, quien para entonces tenía alrededor de setenta y tres años, había adquirido un prestigio considerable en Venecia por haber sido director de música en la basílica de San Marcos desde 1613. En la dedicatoria del libreto revisado y reeditado fue descrito como «el más admirado Apolo del siglo y la mayor inteligencia del cielo de la armonía».[47]

La ópera fue recibida con gran entusiasmo por el público veneciano, ya familiarizado con el Lamento, que se había publicado en dicha ciudad en 1623,[48]​ aunque unas pocas semanas después el teatro reemplazó L'Arianna por una nueva ópera de Monteverdi, Il ritorno d'Ulisse in patria (El regreso de Ulises a la patria), que resultó un éxito aún mayor.[49]

Desaparición de la partitura

Después de la de Venecia entre 1639 y 1640, no hay más registros de representaciones de L'Arianna. El libreto de Rinuccini, que fue publicado en varias ocasiones en vida de Monteverdi, sobrevivió intacto, pero la partitura de la ópera desapareció algún tiempo después de 1640, con la excepción del lamento de Ariadna de la escena sexta,[2]​ conocido como Lamento d'Arianna.[i]

La desaparición de la música de esta ópera no es un caso aislado; la mayor parte de las obras teatrales de Monteverdi se perdieron, incluyendo seis de sus nueve óperas. La explicación de Carter para tan alto porcentaje es que «los recuerdos eran cortos y la música de las obras a gran escala a menudo no trascendía más allá de sus circunstancias inmediatas». De hecho, este tipo de música rara vez se publicó y era común que se desechara rápidamente.[50][51]

Lamento d'Arianna

Primeras dos páginas de la primera edición del Lamento d'Arianna, publicado por Gardano en Venecia en 1623.

El Lamento d'Arianna se libró del olvido gracias a la decisión de Monteverdi de publicarlo de manera independiente a la ópera: primero en 1614 como un madrigal a cinco voces,[52]​ después en 1623 en dos arreglos —uno de ellos como una monodia[53]​ y, finalmente, en 1641 como un himno sagrado, Lamento della Madonna, publicado en su colección Selva morale e spirituale.[54][55]

La adaptación a cinco voces fue incluida en el Sexto libro de madrigales del compositor. Hay indicios de que este arreglo se hizo por sugerencia de un anónimo caballero veneciano que pensó que la melodía se beneficiaría del contrapunto.[56]​ En 1868 el Lamento fue publicado en París y en 1910 el compositor italiano Ottorino Respighi publicó una transcripción orquestal.[57]

En su análisis crítico, la musicóloga Suzanne Cusick afirma que «en gran medida, la fama y el legado histórico de Monteverdi han perdurado durante siglos gracias a la apreciación universal de su éxito con el célebre Lamento, [que] fue una de las obras más emuladas e influyentes de principios del siglo xvii». Asimismo, lo ha considerado uno de los mejores recitativos ariosos compuestos por Monteverdi.[58]

Lasciatemi morire, lasciatemi morire, / e che volete voi, che mi conforte / in così dura sorte, / in così gran martire? / Lasciatemi morire
Dejadme morir, dejadme morir, ¿qué queréis que me conforte ante tan duro destino, ante tan gran martirio?... Dejadme morir.
Lamento d'Arianna, escena VII.

En opinión de Cusick, Monteverdi «creó el lamento como un género reconocible de la música de cámara vocal y como una escena habitual en la ópera que llegaría a ser fundamental, un género que define las óperas públicas a gran escala del siglo xvii en Venecia»,[58]​ y concluye señalando que las mujeres de Mantua habrían reconocido las transformaciones representadas en el lamento como un trasunto de sus propias historias personales. Monteverdi, en su opinión, trató de representar con la música el triunfo final de la piedad femenina sobre la promiscuidad: «la pérdida gradual que experimenta Ariadna de su propia pasión durante el lamento constituye una muestra musical pública del arrepentimiento de esta mujer imprudente que se había atrevido a elegir a su propio compañero».[58]​ En su estudio The Recitative Soliloquy, Margaret Murata indica que los lamentos de esta clase eran una característica básica de las óperas de alrededor de 1650, pero que «a partir de entonces fueron declinando hasta el triunfo total del aria hacia 1670».[59]​ Mark Ringer, en su análisis de los dramas musicales de Monteverdi, sugiere que el lamento define la innovación creadora de una manera similar a la que, dos siglos y medio más tarde, el preludio y el Liebestod en Tristán e Isolda anunciarían el descubrimiento por parte de Richard Wagner de nuevas fronteras expresivas.[60]

En su contexto operístico, el lamento adopta la forma de un recitativo prolongado de más de setenta líneas vocales, interpretado en cinco secciones divididas por los comentarios del coro —que, junto a las secciones de Dorilla, también perdidas, fueron restauradas en la nueva versión de Wilson—. Algunas de las expresiones son presagiadas en la escena inmediatamente anterior, en la que el primer enviado describe la difícil situación de Ariadna junto a un coro de compasivos pescadores. El lamento manifiesta diversas reacciones emocionales de Ariadna tras su abandono: tristeza, ira, miedo, autocompasión, desolación y futilidad. Cusick llama la atención sobre la manera en que Monteverdi es capaz de igualar con la música los «gestos retóricos y sintácticos» del texto de Rinuccini.[58]​ Las palabras de apertura repetidas Lasciatemi morire («dejadme morir») van acompañadas de un acorde de séptima de dominante que Ringer describe como «una inolvidable puñalada cromática de dolor»; Monteverdi fue uno de los primeros en usar este recurso musical. Lo que sigue, dice Ringer, tiene un alcance y profundidad «comparable a la mayoría de los incisivos soliloquios de Shakespeare». Las palabras Lasciatemi morire son seguidas por O Teseo, O Teseo mio («Oh Teseo, mi Teseo»). Las dos frases representan las emociones encontradas de Ariadna: desesperación y deseo. A lo largo del lamento, la indignación y la ira son interrumpidas por la ternura, hasta la repetición final de O Teseo, tras la cual una línea descendente lleva al lamento a una conclusión tranquila.[60]

El tema de la ópera, desarrollado sobre libreto de Vincenzo Cassani, fue puesto en música un siglo después por Benedetto Marcello en una versión del mismo título: Arianna. Entre otros compositores que han adoptado el formato y el estilo del lamento de Ariadna se encuentran Francesco Cavalli, cuya ópera Le nozze di Teti e di Peleo contiene tres de estas piezas, Francesco Costa, que incluyó una versión del texto de Rinuccini en su colección de madrigales Pianta d'Arianna,[61]​ y Sigismondo d'India, que escribió varios lamentos en la década de 1620 después de la versión monódica del Lamento d'Arianna publicada en 1623.[62]​ El propio Monteverdi utilizó el formato del lamento expresivo en sus dos óperas tardías, Il ritorno d'Ulisse in patria y L'incoronazione di Poppea, para los personajes de Penélope y Octavia, respectivamente. En 1641, Monteverdi convirtió el Lamento d'Arianna en canción sagrada sobre texto en latín, el Pianto della Madonna, que incluyó en su Selva morale e spirituale, la última de sus obras publicadas en vida.[63]

Grabaciones del Lamento d'Arianna

Existen numerosas grabaciones tanto del madrigal a cinco voces, como de la versión para voz solista, del Lamento. Las grabaciones de solistas incluyen varias versiones para voz de tenor o barítono. Entre los cantantes principales que han realizado grabaciones están las sopranos Emma Kirkby y Véronique Gens, y las mezzosopranos Janet Baker y Anne Sofie von Otter.[64][65]​ Además, en las estadísticas de Operabase el Lamento d'Arianna aparece representado en el período que va del año 2005 al año 2010.[66]

Ediciones

Se publicaron al menos ocho versiones del libreto entre 1608 y 1640:

  • Aurelio et Ludovico Osanna, Mantua, 1608. Publicación del texto incluido en el informe de Federico Follini de la obra en 1608;[25][67]
  • Heredi di Francesco Osanna, Mantua, 1608. Posiblemente el texto distribuido entre el público en la representación de 1608;[25]
  • I. Giunti, Florencia, 1608;[25][67]
  • Bernardo Giunti, Giovan Battista Ciotti & Co., Venecia, 1608;[25][67]
  • Ghirardo et Iseppo Imberti, Venecia, 1622;[67]
  • G. F. Gundulić, Ancona, 1633. traducción croata, preparada para una posible actuación en Dubrovnik c. 1620. (versión en 5);[68][25]
  • Angelo Salvadori, Venecia, 1639. Versión revisada preparada para la readaptación de 1640;[25][67]
  • Antonio Bariletti, Venecia, 1640.[25][67]

Notas

  1. El libreto de Rinuccini está disponible en varias ediciones.[10]
  2. La obra de Peri se rechazó por completo, pero la nueva versión de Dafne se programó para el carnaval de 1607-1608.
  3. Eurídice es una ópera con música de Peri y Giulio Caccini.[22]
  4. Se han sugerido otras disposiciones del texto; el musicólogo Bojan Bujić, por ejemplo, ha planteado una alternativa de un prólogo y cinco escenas.[25]
  5. De acuerdo con Carter, la asunción de ese papel que fue cantado por Settimia Caccini es incorrecto, ya que ella no estaba en Mantua en ese momento.[30]​ Una carta de un cortesano de Mantua, citado por Fabbri, indica que el fragmento fue otorgado a un cantante de Florencia que había sido enviado como posible sustituto de Martinelli.[31]
  6. Es posible que Andreini pudo haber cantado este papel.[32]
  7. Carter indica que Campagnolo cantó en L'Arianna, pero no especifica qué papel o papeles.[33]
  8. La fecha exacta de esta representación no se encuentra registrada.
  9. El Lamento d'Arianna es conocido también por las primeras palabras de su texto Lasciatemi morire, «Déjame morir».

Referencias

  1. a b «L'Arianna». Libretti d'Opera (en italiano). Italia. 30 de mayo de 2007 [1608]. Archivado desde el original el 18 de octubre de 2007. Consultado el 15 de septiembre de 2015. 
  2. a b c Belgrano, Elisabeth (2015). «Lasciatemi morire & Rochers vous êtes sourds: interpreting Arianna’s tears, sighs and pain, by investigating Italian and French ornaments through vocal practice-based research». Instatterminus. Consultado el 1 de noviembre de 2015. 
  3. Whenham, John (1986). The Press Syndicate of the University of Cambridge, ed. Caludio Monteverdi. Orfeo (en inglés). Cambridge University Press. p. 18. ISBN 0 521 28477 5. Consultado el 4 de septiembre de 2015. 
  4. March, Juan. «Ciclo Monteverdi». Royper (Madrid: Fundación Juan March): 29. Consultado el 2 de septiembre de 2015. 
  5. Baker, Th. «Lasciatemi morire!». Lamento d'Arianna (en italiano). Consultado el 2 de septiembre de 2015. 
  6. Walter Hill, John (2008). La música barroca. Madrid: Akal. p. 213. ISBN 978-84-460-2415-3. Consultado el 2 de septiembre de 2015. 
  7. «King's Baroque». Twitter de Kings Baroque (en inglés). Londres, Inglaterra. 2013. Consultado el 3 de septiembre de 2015. 
  8. a b Carrozzo y Cimagalli, 2008, p. 44.
  9. Whenham y John, 2008, p. 67.
  10. Rosand, 2007, pp. 185-186.
  11. Randel, 2006, p. 602.
  12. a b Carter, Tim (2007). «Monteverdi, Claudio: Mantua». Oxford Music Online. Consultado el 4 de septiembre de 2010. 
  13. a b Fenlon, 1986, pp. 5-7
  14. Carter, 2002, p. 24.
  15. Ringer, 2006, p. 16.
  16. a b Fabbri y Carter, 1994, pp. 63-64
  17. Fenlon, 1986a, pp. 167-72.
  18. «Cuatro Compositores que no integran ninguna escuela». La Ópera y sus compositores. Consultado el 7 de octubre de 2015. 
  19. Fabbri y Carter, 1994, pp. 77-82.
  20. Hanning, Barbara R. «Rinuccini, Ottavio». Grove Music Online (en inglés). Consultado el 12 de enero de 2012. 
  21. Grout, Donald Jay (1971). A Short History of Opera (en inglés). New York: Columbia University Press. p. 27. ISBN 0-231-08978-3. 
  22. a b Carter, 2002, p. 17.
  23. Fabbri y Carter, 1994, p. 96.
  24. Carter, 2002, p. 208.
  25. a b c d e f g h i Bujić, Bohan (1999). «Rinuccini the Craftsman». Early Music History (en inglés) 18: 75-117. JSTOR 853825. doi:10.1017/S0261127900001844. «requiere suscripción». 
  26. Ringer, 2006, p. 20.
  27. Stevens, Denis (ed.) (1980). The Letters of Claudio Monteverdi (en inglés). New York: Cambridge University Press. pp. 311-13. ISBN 0-521-23591-X. 
  28. Forrest Kelly, 2001, p. 33.
  29. Wilbourne, Emily (2008). La Florinda: The Performance of Virginia Ramponi Andreini (en inglés). Ann Arbor, Michagan: ProQuest Information and Learning Company. p. 232. ISBN 9780549823339. Consultado el 26 de agosto de 2015. 
  30. a b c d e f Carter, 2002, pp. 203-204
  31. Fabbri y Carter, 1994, pp. 82-83.
  32. a b c d e f g «Almanacco di Gherardo Caseglia». AmadeusOnline (en italiano). Consultado el 23 de enero de 2012. 
  33. Carter, 2002, p. 210.
  34. a b c «L'ARIANNA. Tragedia». librettidopera (en italiano). 2013. Consultado el 7 de octubre de 2015. 
  35. a b c d e f Rinuccini, Ottavio (1608). L'Arianna. Tragedia (en italiano). Mantua. Consultado el 2 de septiembre de 2015. 
  36. a b c d Fabbri y Carter, 1994, pp. 85-87
  37. a b Carter, 2002, pp. 82-83
  38. Redlich, 1952, p. 91.
  39. Fabbri y Carter, 1994, p. 92.
  40. Redlich, 1952, pp. 101-03.
  41. Ringer, 2006, p. 40.
  42. Fabbri y Carter, 1994, p. 144.
  43. Carter, 2002, p. 168.
  44. Fabbri y Carter, 1994, p. 175.
  45. Ringer, 2006, p. 130.
  46. Fabbri y Carter, 1994, pp. 250-51.
  47. Rosand, 2007, p. 18.
  48. Carter, 2002, p. 299.
  49. Ringer, 2006, p. 135-136.
  50. Carter, 2002, p. 4.
  51. Carter, 2002, pp. 299-306.
  52. Monteverdi, Claudio (1614). Il sesto libro de madrigali a cinque voci, con un dialogo a sette (pdf) (en italiano). Venicia: Ricciardo Amadino. 
  53. Monteverdi, Claudio (1623). Lamento di Arian[n]a... et con due lettere amorose in genere rappresentativo (en inglés). Venecia: Bartolomeo Magni. 
  54. Monteverdi, Claudio (1641). Selva morale et spirituale di Claudio Monteverde (pdf) (en italiano). Venecia: Bartolomeo Magni. pp. 56-60. 
  55. Dtv-Atlas zur Musik (en alemán). Múnich: DTV. 1971. 
  56. Fabbri y Carter, 1994, pp. 140-41.
  57. Carter, 2002, p. 5.
  58. a b c d Cusick, Suzanne (1994). «There Was Not a Lady Who Failed to Shed a Tear». Early Music (en inglés) 22 (1): 21-43. JSTOR 3128481. doi:10.1093/earlyj/xxii.1.21. 
  59. Murata, Margaret (1979). «The Recitative Soliloquy». publicación of the American Musicological Society (en inglés) 32 (1): 45-73. JSTOR 831268. doi:10.2307/831268. 
  60. a b Ringer, 2006, p. 96
  61. Fortune, Nigel. «Francesco Antonio Costa». Grove Music Online (en inglés). Consultado el 15 de mayo de 2013. 
  62. Carter, 2002, pp. 217-18.
  63. Ringer, 2006, p. 95
  64. «Monteverdi: Il sesto libro de madrigali, 1614, 6th Book of Madrigals». Presto Classical (en inglés). Consultado el 15 de mayo de 2012. 
  65. «Monteverdi: Lamento d'Arianna (Lasciatemi morire)». Presto Classical (en inglés). Consultado el 14 de mayo de 2012. 
  66. «Estadísticas 2013/14». Operabase (en inglés). Consultado el 29 de agosto de 2015. 
  67. a b c d e f Carter, 2002, pp. 202-03
  68. Carter, 2002, p. 208

Bibliografía

Enlaces externos