Comisión sobre Abusos Sexuales en la Iglesia católica francesa
La Comisión Independiente sobre los Abusos Sexuales en la Iglesia (Ciase), también llamada Comisión Sauvé, analizó los abusos sexuales a menores y personas vulnerables cometidas desde los años 1950 en la Iglesia católica en Francia.
La comisión estimó que, al menos, entre el 2,5% y el 2,8% de los sacerdotes y religiosos en Francia cometieron agresiones sexuales o violaciones a aproximadamente 216 000 víctimas, adultas y vivas en el momento de redactar el informe (2021). Si se incluye a los agresores seglares, el número de víctimas sube a más de 330 000. El informe hizo recomendaciones, en particular sobre indemnizaciones y reformas institucionales, y se pronunció sobre la responsabilidad de la Iglesia, que anunció procedimientos de indemnización, pero está dividida sobre las medidas a tomar.
Historia
[editar]En noviembre de 2018, Jean-Marc Sauvé, vicepresidente honorario del Consejo de Estado. fue nombrado por la Conferencia Episcopal Francesa (CEF) y la Conferencia de Religiosos y Religiosas de Francia (Corref), para presidir la Comisión Independiente sobre los abusos sexuales en la Iglesia desde los años 1950. La Iglesia buscaba « una personalidad cuya credibilidad y notoriedad garantizasen su imparcialidad e independencia ». La comisión debía aclarar los casos de abuso sexual de menores en la Iglesia y proponer medidas correctivas y reparadoras..
Jean-Marc Sauvé afirmó que aceptó esta misión porque «se trataba de hechos graves: abusos sexuales cometidos contra jóvenes y personas vulnerables cuyas vidas han quedado dañadas permanentemente. Además, la Iglesia está comprometida con un proceso de autorreflexión y transparencia sobre los fallos que haya podido haber, de reparación y reforma para evitar que los problemas se repitan.» Sauvé subrayó que «sólo aclarando la verdad podremos escapar de las sospechas y controversias en las que hemos entrado». La comisión terminó su trabajo y publicó su informe en octubre de 2021.
Composición
[editar]La comisión incluyó 22 miembros, doce hombres y diez mujeres. No había ningún sacerdote o religioso, ni miembros de asociaciones de víctimas ni activistas sobre el tema. Sus miembros eran expertos en psiquiatría, derecho, teología, sociología, antropología , etc. La comisión incluyó creyentes de diferentes religiones, agnósticos y ateos.
Contenido del informe
[editar]Alcance de la violencia sexual
[editar]Número de agresores y de víctimas
[editar]El informe, de 2500 páginas, distinguía dos perfiles de depredación: ocasional o habitual, a veces, de forma organizada, sobre todo cuando las víctimas eran muchachos jóvenes. La comisión estimó una proporción de aproximadamente el 3% de pedo-delincuentes dentro de la Iglesia católica en Francia desde 1950.
El número de víctimas, en su mayoría de sexo masculino, se estimó en 216 000 (de las cuales el 32% sufrió violaciones), contando sólo la violencia cometida por clérigos y religiosos, y 330 000 incluyendo a las víctimas de laicos que trabajaban en instituciones de la Iglesia, sin contar los que no declararon porque las víctimas habían fallecido o eran aún menores de edad.
Recomendaciones
[editar]Indemnizaciones financieras
[editar]Para la Ciase, la Iglesia debía asumir responsabilidades tanto individuales como institucionales, tanto en ámbito penal como civil, dando lugar a indemnizaciones económicas, y no simples contribuciones financieras, como propuso en marzo de 2021 la asamblea de obispos. La Ciase insistió en que esta compensación fuese administrada por un organismo independiente que pudiese recurrir al patrimonio de la Iglesia, sin apelar a la generosidad de los fieles.
En dos meses, el Fondo de Ayuda y Lucha contra los Abusos Infantiles recaudó veinte millones de euros, procedentes principalmente de aportaciones de las diócesis, pero también de donaciones personales. En abril de 2022, 526 víctimas habían solicitado reconocimiento y reparación. El baremo previsto establecía un límite máximo de 60 000 € por víctima.
Gobierno de la iglesia
[editar]La Ciase recomendaba que el gobierno de la Iglesia examinase en profundidad las consecuencias de la concentración de poder en manos de los obispos. Se recomendaba fortalecer la presencia de laicos, y en particular de mujeres, en los órganos de decisión de la Iglesia.
Evolución del derecho canónico en materia penal
[editar]La comisión consideró que que el secreto de confesión no debería permitir a los confesores eludir la obligación de denunciar los casos de violencia sexual a la fiscalía. Recordar esta obligación protegería a los menores en el futuro. Los tribunales penales canónicos deberían permitir el derecho de apelación, el acceso efectivo al tribunal y la libre elección de abogado, integrando a sacerdotes expertos y jueces laicos capacitados.
Selección y formación de seminaristas y novicios.
[editar]La comisión recomendó incluir en la formación continua del clero módulos relacionados con la lucha contra la pedofilia.
Celibato sacerdotal
[editar]La comisión pidió que se abriese una reflexión sobre el celibato sacerdotal, para autorizar la ordenación de hombres casados.
Reacciones
[editar]El Papa Francisco tomó nota del informe Sauvé “con dolor". Pidió a la Iglesia de Francia, que emprendiese el camino de la redención. El 9 de diciembre, el Papa iba a recibir a Jean-Marc Sauvé, pero la reunión fue suspendida sin fijarse nueva fecha.
Una encuesta realizada en octubre de 2021 mostró que el 85 % de los católicos estaban furiosos después de la publicación del informe y que 76% creía que la reacción de la jerarquía había sido insuficiente.
Notas y referencias
[editar]Todas las notas y referencias de este artículo están en francés. Se invita a los lectores que deseen profundizar en el tema a consultar la versión original del artículo en francés.