Memories of My Trip es un álbum recopilatorio de Chris Barber. El conjunto de dos CD celebró el 80 aniversario del veterano del trad jazz británico e incluye, entre otros, colaboraciones con Van Morrison, Mark Knopfler, Dr. John y Eric Clapton. Las grabaciones, realizadas entre 1958 y 2010 con varias formaciones, fueron lanzadas en 2011 en Proper Records. El álbum es un homenaje a su larga y exitosa carrera.[1]
Según Chris M. Slawecki, que revisó el álbum en All About Jazz, hay muy pocas retrospectivas de jazz más completas y atractivas que Memories of My Trip, que cubre seis décadas de grabaciones y actuaciones de uno de los músicos de jazz tradicional más longevos de Gran Bretaña. Las preciosas memorias de Barber son resaltadas por admiradores como Muddy Waters, Keith Emerson, Eric Clapton, Van Morrison y otros fuera del ámbito del jazz tradicional.[3]
Hugh Rainey escribió en Jazz Journal, de 1958 a 2010 y centrándose en el propio Chris Barber, el álbum hace numerosas paradas en su camino musical y presenta una amplia gama de colaboraciones, a veces sorprendentemente eclécticas, con celebridades de los campos del jazz, el blues, el góspel y el blues rock. Chris Barber puede estar orgulloso de estos encuentros innovadores y, sin duda, esclarecedores. Un viaje paralelo a través del desarrollo de su propia banda, desde Bobby Shaftoe [de 1954] hasta Battersea Rain Dance y más allá hasta sus actuaciones en big band, sería un álbum complementario muy valioso.[1]
John Fordham le dio al álbum tres estrellas en The Guardian y escribió que las colaboraciones con Van Morrison, Mark Knopfler, Dr. John y Eric Clapton son prueba de lo influyente que fue Barber para una generación de músicos de rock que se inspiraron no sólo en su compromiso con las raíces del jazz, sino también en una actitud no sectaria que algunos puristas consideraban herética. Una versión magníficamente ruidosa de Oh Did't He Ramble, 1976 con Van Morrison y el Dr. John es uno de los ejemplos más destacados, al igual que el denso riff de la banda que toca bajo las ágiles líneas del clarinetista de Nueva Orleans Albert Nicholas en C Jam Blues. En opinión del autor, una presentación más sólida del repertorio habitual de gira de este grupo -y menos invitados estrella- podría haber resultado en un tributo ligeramente más equilibrado.[4]