Son unas empanadillas de masa no fermentada con forma semicircular, de 10 cm de largo, 5 de ancho y 3 de grosor. La receta original aragonesa está rellena de mermelada de calabaza, aunque es común el relleno de cabello de ángel y se elabora la masa con aceite, harina de trigo, huevo, anís y mistela o moscatel dependiendo de la zona. Existen variantes como la que se prepara en la localidad tarraconense de Amposta que puede llevar boniato o requesón en lugar de cabello de ángel. Son también muy conocidos los pastissets elaborados en la localidad catalana de Tortosa.