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Usuario:Ernesto Lucero/Taller

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El  Frente Revolucionario Indoamericanista Popular (FRIP) o bien Frente Revolucionario Indoamericanista y Popular ( con la y), fue un partido nacionalista de izquierda del norte argentino que surgió en 1961 y que  desapareció en 1965 al  fusionarse con  el partido trotskista Palabra Obrera para dar  nacimiento al Partido Revolucionario de los Trabajadores. Hay historiadores que citan erróneamente al partido como Frente Revolucionario Indoamericano Popular. El historiador argentino Héctor Löbbe afirma que el nombre correcto es Frente Revolucionario Indoamericanista Popular. El historiador y militante trotskista Ernesto González ha escrito que el FRIP se fundó en 1959 si bien otros autores afirman que el año de la fundación fue 1961.

Orígenes

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Los hermanos Santucho fundaron el FRIP en 1961. Fue el 9 de julio de 1961: una treintena de militantes santiagueños y tucumanos dirigidos por los hermanos Asdrúbal y Francisco René Santucho realizaron el congreso fundacional. En la declaración de principios se afirmaba que la inferioridad de los latinoamericanos era consecuencia de la opresión económica que padecían desde la colonización española. Por otra parte el atraso de Latinoamérica era una consecuencia de la deformación estructural causada por la dominación imperialista. En Argentina y el resto de la región las castas explotadoras eran cómplices conscientes e inconscientes del imperialismo. La aceptación de la libertad política sin tener en cuenta la opresión económica significaba legalizar el sistema de explotación. Los partidos políticos se convertían en encubridores de las castas explotadoras. La revolución cubana merecía la absoluta solidaridad de los latinoamericanos.[1]​ Francisco René Santucho era seguidor de Haya de la Torre, el fundador del APRA peruano por lo menos hasta el rompimiento de Mariátegui.

El FRIP se proponía insertarse entre los trabajadores rurales, definidos como el sujeto social clave para la revolución en las provincias de Tucumán, Santiago del Estero y Salta. Con fuertes simpatías por el proceso de la Revolución Cubana, los miembros del FRIP tenían planteos nacionalistas, indigenistas y antiimperialistas. El historiador Pablo Pozzi[2]​ (2004) señala que  según Juan Carlos “Cacho” Ledesma el FRIP nace de tres vertientes: la librería y revista Dimensión impulsada por Francisco René Santucho en Santiago del Estero entre 1955 y 1962, el Movimiento Independiente de Estudiantes en Ciencias Económicas (MIECE) impulsado por Mario Roberto Santucho en la Universidad Nacional de Tucumán y un núcleo de militantes de Salta y Santiago del Estero vinculados a Francisco René Santucho. Según Pablo Pozzi el FRIP distaba mucho de manifestarse un partido de izquierda. Concebía al imperialismo como un factor externo de dominación y no como una fase del desarrollo capitalista. Martín Mangiatini[3]​ (2018) considera que el FRIP fue un partido de estudiantes y trabajadores de las provincias de Tucumán, Santiago del Estero y Salta.

Publicaciones

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El FRIP publicó a partir de octubre de 1961 un Boletín mensual .  Luego se publicó la revista "Norte Revolucionario", que tenía secciones y consignas en quechua. En sus primeras publicaciones utilizaron consignas en quechua con su traducción al español. En 1962 y 1963 el FRIP publicó el folleto “La lucha de los pueblos indoamericanos. Antiimperialismo e integración” redactado por Francisco René Santucho. Otros documentos fueron “Cuatro tesis sobre el norte argentino” y “El proletariado rural, detonante de la revolución argentina. Tesis políticas del FRIP” escrito  por Mario Roberto Santucho. Este último documento fue aprobado por el congreso del FRIP de los días 17,18 y 19 de enero de 1964. El documento presenta diez tesis en las cuales se caracteriza a Argentina como un país semi-colonial y pseudo industrializado. El imperialismo entrelaza sus intereses con los de la gran burguesía argentina y la oligarquía terrateniente y las convierte en clases subalternas. La seudo industrialización argentina reforzaba los vínculos con el capital externo. La burguesía argentina según la tesis segunda era incapaz de terminar con la dependencia y de lograr un desarrollo autónomo e independiente. Solamente la burguesía mediana y la pequeña burguesía podían jugar un papel de aliados circunstanciales con el proletariado. La tesis 3 señalaba que la seudo industrialización acentuaba los desniveles regionales e incrementaba la explotación de los obreros de las regiones más atrasadas del país mientras crecían los islotes industriales como Buenos Aires. La tesis cuatro identificaba a la burocracia sindical centralizada en Buenos Aires como un obstáculo para el desarrollo del proletariado. Dicha burocracia se había fortalecido ante la inexistencia de un partido revolucionario. Se consideraba que existía una burocracia sindical enquistada que era un obstáculo para la liberación del proletariado. Dicha tesis  afirmaba que : “La burocracia sindical centralizada en Buenos Aires es el principal obstáculo para el desarrollo del proletariado y debe enfrentársela sobre la base del movimiento obrero del interior” . Se sostenía  que la existencia de sectores privilegiados en el seno de la clase obrera, concentrados en los grandes núcleos industriales habían favorecido la consolidación de un poderoso aparato burocrático.

El abrumador componente proletario de la estructura económico-social argentina, no podía menos que orientar la mirada del FRIP hacia el modelo insurreccional según Carnovale (2010). Las tesis 5 a 10 se referían a las características del proletariado rural del norte argentino. Según Carlos Orzaocoa, las diez tesis alejaban al FRIP del peronismo y del radicalismo que eran considerados como partidos burgueses. También implicaba un alejamiento de la izquierda tradicional del Partido Comunista.

Ideología

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El FRIP adquirió un perfil ideológico de tipo nacionalista revolucionario de izquierda[4]​. Gorriarán Merlo[5]​ lo caracterizó posteriormente como un partido nacionalista.  El FRIP fue influenciado por el  político e intelectual peruano Víctor Raúl Haya de la Torre, fundador del APRA, por José Carlos Mariátegui y por los intelectuales argentinos  José Hernández Arregui y Arturo Jauretche. El FRIP señalaba la importancia de la lucha indígena en la liberación latinoamericana. María Seoane (1992) describe el programa fundacional y define al FRIP en 1961 como nacionalista y pre-marxista, porque en vez de clases hablaban de "casta". Era además anti-estalinista, antiimperialista, anticapitalista, y anti-sistémico porque identificaba al sistema con la partidocracia. Martin Mangiatini ( 2018) considera que el FRIP fue adoptando una retórica ligada a cierta tradición marxista.

A grandes rasgos el FRIP consideraba que la burguesía nacional argentina era incapaz de romper la dominación imperialista. El proletariado rural, es decir los obreros del campo, actuaría como vanguardia e incorporaría al campesinado en la lucha por la liberación social y nacional. Según la historiadora Vera Carnovale[6]​ el  FRIP caracterizaba a la Argentina como un país “semi-colonial” y “seudo-industrializado”. La seudo-industrialización había acentuado desniveles regionales: los islotes industriales de Buenos Aires y el Litoral coexistían con formas de explotación colonial o semi-colonial en las industrias primarias del Interior. El capitalismo argentino, en su desarrollo desigual y dependiente, había conformado un numeroso proletariado rural que, sometido a formas extremas de explotación, había alcanzado, en los primeros años de la década de 1960 y especialmente en los ingenios azucareros, el método más avanzado de combate espontáneo de la clase obrera argentina: la ocupación de fábricas. Si en la tradición insurrecionalista era el proletariado industrial urbano el actor social principal  convertido en “clase para sí”, en la  adaptación  que hizo el FRIP, el  detonante de esa revolución sería el “proletariado rural con su vanguardia, el proletariado azucarero. El FRIP era muy crítico de la línea de los partidos comunistas de América Latina. El estalinismo de los partidos comunistas eludía la subjetividad indoamericana y no veían a la masa india como una fuerza revolucionaria.

El historiador y militante trotskista proveniente de Palabra Obrera Ernesto González[7]​ considera que el FRIP fue un grupo de intelectuales y universitarios del Noroeste de Argentina que tenia un perfil nacionalista, pequeño burgués y localista. Se reivindicaba la gesta de Tupac Amarú y se sostenía que el interior del país sufría la colonización del litoral. El FRIP subestimaba a la clase obrera urbana a la cual tildaba de conformista y consideraba que la vanguardia estaba compuesta por los trabajadores hacheros del monte santiagueño. Sus métodos era reformistas según González. El FRIP tenía una valoración positiva del peronismo obrero y consideraba que el 17 de octubre de 1945 había sido una fecha relevante en la historia de la clase obrera argentina.

. Se  insistía en la necesidad de una organización de vanguardia que trabajara en el terreno sindical e indicara una estrategia revolucionaria. Según Martin Mangiatini (2028) el FRIP buscó insertarse dentro de la Federación Obrera Santiagueña de la Industria Forestal (FOSIF) en donde pugnó sin éxito por llegar a su conducción y especialmente en la FOTIA. Su participación en el proletariado azucarero se transformó en un rasgo distintivo que le permitió expandirse en las provincias de Santiago del Estero, Salta y Tucumán.

El FRIP estaba interesado en la cultura guaraní y su expansión por Uruguay, Paraguay y Brasil y en su relación con la cultura quechua. Se resaltaba la armonía entre los seres vivientes y la naturaleza con un claro contenido ecológico que aludía a la Pachamama.

Visión posterior de Mario Roberto Santucho

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Más tarde Mario Roberto Santucho definió al FRIP como: “un pequeño grupo pequeño-burgués nacido en 1961 con una concepción populista y que, merced al trabajo de  masas que había encarado en Santiago y Tucumán, entre sectores del proletariado azucarero y forestal y en las barriadas pobres, había ido adoptando progresivamente el método  y las concepciones marxistas”.

Fusión con Palabra Obrera

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El contacto entre el FRIP y el partido trotskista de Nahuel Moreno Palabra Obrera  nació a partir de las vinculaciones de Mario  Roberto Santucho con  militantes de la FOTIA que pertenecían a ese partido. Según Mangiatini (2018) la conformación del nuevo partido fue producto del vínculo que se gestó en el marco de la militancia conjunta de los equipos de ambos partidos en los ingenios azucareros tucumanos de Santa Ana y San José. Al mismo tiempo el FRIP había constituido un equipo de estudiantes santiagueños en Buenos Aires que también establecieron vínculos con militantes trotskistas de Palabra Obrera. En el invierno de 1963 Santucho se reunió con Nahuel Moreno en la ciudad de Tucumán después de una serie de contactos preliminares. Esta alianza generó una discusión con su hermano Francisco René Santucho, quien se oponía a la transformación del FRIP en una organización celular y de cuadros, según afirma María Seoane[8]​ (1992). Ambos partidos tenían en común la oposición a los partidos comunistas ortodoxos, la desconfianza en el parlamentarismo burgués y la idea de crear un partido político nacional uniendo a los campesinos y obreros rurales del norte con los obreros industriales del sur.

En enero de 1964 se realizó el último congreso del FRIP en el aula magna de la Facultad de Ciencias Económicas de Tucumán en preparación de la fusión con Palabra Obrera. Francisco René Santucho se opuso a la unificación con Palabra Obrera. El boletín del FRIP pasó a llamarse "Norte Revolucionario". El texto de este último congreso se llamó "El proletariado rural, detonante de la revolución argentina. Tesis políticas del FRIP. ".

Lentamente se establecieron las bases para la unión de ambos partidos FRIP-Palabra Obrera. Ambas organizaciones intercambiaron militantes. El FRIP envió un grupo a Buenos Aires especialmente a la zona sur mientras que Palabra Obrero envió militantes a Tucumán. Entre ellos estaba Ernesto González, hombre de confianza de Nahuel Moreno, quien convivió con Santucho durante un mes. El 17 de julio de 1964 se firmó el acuerdo de la creación del frente único FRIP-Palabra Obrera. En diciembre de 1964 Palabra Obrera informaba que se había avanzado en la fusión de ambos grupos en la constitución de Partido Único de la Revolución Argentina. Hubo desacuerdos con respecto a la adhesión a la Cuarta Internacional trotskista. Según González los dirigentes del FRIP tenían un fuerte prejuicio en su contra debido a su carácter localista y no internacionalista y lo mismo sucedía con el concepto de centralismo democrático que no era compartida por el FRIP si bien finalmente aceptaron estos puntos.

Ambas organizaciones se fusionaron en 1965 y conformaron el PRT (Partido Revolucionario de los Trabajadores) durante la presidencia de Illia. La fundación se realizó en el local del Sindicato de Peluqueros del barrio de Once, en la ciudad de Buenos Aires, el día 25 de mayo de 1965. Participaron casi un centenar de miembros de ambas organizaciones. Fue el primer congreso del PRT. Se aprobó el documento titulado "Cuatro tesis sobre el norte argentino" escrito por Santucho y un texto de Nahuel Moreno acerca de Cuba, que luego se publicaría en el libro " La revolución latinoamericana" en el cual justificaba la táctica de la lucha guerrillera.

El historiador del PRT-ERP  Pablo Pozzi,  señala que los dirigentes del FRIP se volcaron a la confluencia con Palabra Obrera para darle un carácter nacional a su organización, para unir y fortalecer la presencia de los revolucionarios en la FOTIA y por la atracción que para este grupo significó el encuentro con Nahuel Moreno como teórico y como cuadro político.

Referencias

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  1. Seoane María (1992) Todo o nada. La historia secreta y la historia pública del jefe guerrillero Mario Roberto Santucho. Planeta. Espejo de la Argentina.
  2. Pozzi Pablo (2004) Por las sendas argentinas. El PRT-ERP .La guerrilla marxista. Eudeba. Buenos Aires. Argentina.
  3. Mangiatini Martín (2018). Itinerarios militantes. Del Partido Revolucionario de los Trabajadores al Partido Socialista de los Trabajadores ( 1965-1976). Imago Mundi. Buenos Aires.
  4. Silva Mariños Lisandro (2017) Frente antiimperialista y por el socialismo. Un ejército político de masas impulsado por el PRT. Ediciones La llamarada. Ediciones a vencer. Buenos Aires. Argentina.
  5. Gorriarán. Democracia y Liberación (1984). Ediciones reencuentro. Colombia.
  6. Carnovale Vera (2010). La guerra revolucionaria del PRT-ERP. Cuadernos del CISH.
  7. González Ernesto (año) El trotskismo obrero e internacionalista en Argentina. Editorial Antidoto.
  8. Seoane María (1992). Todo o nada. La historia secreta y la historia pública del jefe guerrillero Mario Roberto Santucho. Planeta. Espejo de la Argentina. Buenos Aires. Argentina


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