Cementerio de Lloret de Mar

Valla y puerta principal.
Plano del proyecto original.

El cementerio de Lloret de Mar fue proyectado por Joaquim Artau i Fàbregas (1876-1946), un maestro de obras que lo construyó entre 1896 y 1901.

En el cementerio de Lloret, buena parte del espacio está dedicado a los grandes panteones y a los hipogeos, sepulturas en tierra con una decoración escultural encima. A partir de una paseo central donde se ubican los entierros principales y más famosos, la parte derecha está dedicada a nichos, y la parte izquierda está constituida por hipogeos y pequeños mausoleos de estética neogótica y adosados entre sí. El aspecto exterior recuerda a construcciones similares de la época con una valla de reja majestuosa, a pesar de las dimensiones reducidas de la población en aquellos años.

Como ocurre con otros municipios de la costa catalana, como Arenys de Mar o Canet de Mar fue construido en un momento de esplendor del modernismo que coincide con el regreso de muchos indianos a sus villas de origen. Estos, ricos y con ganas de perpetuar su memoria, encargaron sus panteones y mausoleos a los mejores artistas de la época.

Entre las obras principales hay piezas de Puig i Cadafalch, Gallissà, Vicenç Artigas o Bonaventura Conill.

Obras destacadas[editar]

De Puig i Cadafalch[editar]

  • Panteón Costa-Macià (1902): Es uno de los más complejos y ricos del conjunto. Es una pequeña capilla neogótica con cubierta sobre finas columnas y arcos de medio punto a los cuatro lados. En el interior hay un pequeño altar de mosaico policromado, al igual que las vueltas, acabadas en una clave que representa un caballero. Los mosaicos son de Lluís Brú y las esculturas de Eusebio Arnau.

De Antoni Maria Gallissà[editar]

  • Panteón Casanovas-Terrats (1901): Panteón de estructura compleja, neogótico con las sepulturas a tierra, pero con un pseudo-sarcófago a media altura, desde el que arrancan cuatro finas columnas con pináculos y gárgolas que acaban en un remado profusamente decorado con un crismón. Las esculturas son de Eusebio Arnau y la cerrajería de Manuel Ballarín.

De Bonaventura Conill i Montobbio[editar]

  • Panteón Esqueu-Villalonga (1904-1909): Es lo más alto y visible desde el exterior del recinto. Presenta la figura de un dragón que sostiene una calavera sobre la que ha roto las tablas de la ley. Al centro del conjunto un altísimo arco acabado en una cruz con un sagrado corazón y, al extremo opuesto del dragón, aparece el sarcófago en un lugar preeminente.
  • Hipogeos: La mayor parte de la obra de Conill en el cementerio son hipogeos de primera clase, es decir, las sepulturas a ras de tierra con una escultura encima y separados entre sí.

De Vicenç Artigas i Albertí[editar]

  • Panteón Cabañas (1902): Mausoleo-capilla con cuatro ángeles orando en las esquinas y una cruz muy decorada en la cumbre, por encima de una cornisa barrocoa. Totalmente hecha en piedra y profusamente trabajada con motivos vegetales. En el interior, una clave con la simbología de Cristo y de los cuatro evangelistas.

Otros autores[editar]

Algunas de las figuras más significativas de las que se encuentran en el paseo central del recinto. Obviamente, hay muchas más obras anónimas o sin identificar por todo el cementerio.

Bibliografía[editar]

  • Rosa Alcoy. El cementiri de Lloret de Mar: Indagacions sobre un conjunt modernista. Ayuntamiento de Lloret de Mar, 1990. ISBN 845059622X

Enlaces externos[editar]