Francisco Bernal

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Francisco Bernal

Maestro de capilla de la Catedral de Coria
1814-1823
Predecesor Juan José Bueno
Sucesor Florentín Rotellar

Información personal
Fallecimiento 1823 Ver y modificar los datos en Wikidata
Coria (España) Ver y modificar los datos en Wikidata
Nacionalidad Española
Religión Catolicismo Ver y modificar los datos en Wikidata
Educación
Educado en Catedral de Santa María de la Asunción de Coria Ver y modificar los datos en Wikidata
Información profesional
Ocupación Compositor, maestro de capilla y organista Ver y modificar los datos en Wikidata
Años activo desde 1780

Francisco Bernal (fl. 1780-1823) fue un compositor y maestro de capilla español.[1][2]

Vida[editar]

Es poco lo que se conoce de la vida de Francisco Bernal. Bernal aparece en una lista de seises de la Catedral de Coria copiada por Diego Gómez Parro, músico tenor, en 1780 en la portada de un libro de música que incluye obras de Navarro, Palomino, Caballero, Oliva y Pacheco.[1]

Los seises son seis:
  1. Francisco Bernal.
  2. Antonio Sánchez.
  3. Ramón Bernal.
  4. Alonso Huertas.
  5. Francisco Rebollo.
  6. Fernando Rebollo.

Con toda probabilidad se trata del mismo maestro Bernal, por lo que se formaría musicalmente en la Catedral de Coria bajo la tutela del maestro Mateo Pascual. También se conserva una misa a cuatro violines de 1794 «compuesta por Francisco Bernal, seise de la Santa Yglesia Cathedral de Coria». La diferencia en las fechas introduce una incógnita sobre el tiempo en el que Bernal formó parte del coro de infantes, que Alicia Martín Terrón sitúa a partir de por lo menos 1788 hasta la fecha más temprana de 1796, que parece ser la fecha en la que Juan José Bueno realizó la lista de infantes mencionada. En su informe de 1796 Bueno menciona que Bernal llevaba ocho años aprendiendo el órgano.[1][2]

También se desconoce su evolución laboral posterior, hasta su llegada al magisterio de Coria. El maestro de la Catedral de Coria, Juan José Bueno, había fallecido en 1813, dejando el cargo vacante. En ese momento Bernal se encontraba de racionero organista de la Colegiata de Talavera de la Reina, cuando solicitó la organistía de Coria. El cabildo aceptó la proposición de Bernal el 5 de febrero de 1814 para los cargos de maestro de capilla y organista primero con un salario de 400 ducados anuales y 24 fanegas de trigo.[1]

En 1819 se fijaron las obligaciones del maestro de capilla:[1]

Sobre las obligaciones del Maestro de Capilla:
  1. Que sin conceder ni entrar ahora en disputa de si le compete o no el privilegio de encontrarse ocupado un mes por Natividad y otro en Corpus por contemplación a los villancicos que debe disponer para que se canten en dichas festividades, esto no obstante no ha de gozar de ningún privilegio cuando le toque hacer la semana de organista, sino que la ha de desempeñar sin excusa ni pretexto alguno.
  2. Que siempre y cuando que por el Sr. Presidente se lo mande ha de poner para que se cante por la Capilla cualquiera de las obras o composiciones que le señale.
  3. Que cuando sea necesario ha de pasar mandándoselo el Sr. Presidente a tocar el órgano, para aprovechar la voz del segundo organista en la Capilla.
  4. Que de razón de las obras de músico que con arreglo al Estatuto ha debido componer y entregar a beneficio de la Fábrica en los años que lleva el Maestro, y en lo sucesivo presente un año en post de año en cumplimiento de su deber.
  5. Que los villancicos para la próxima festividad del Corpus los presente para su revisión al Sr. Presidente del Cabildo para que corran si no tuviere reparo su letra.
Actas Capitulares de la Catedral de Coria, 9 de junio de 1819

La obligación de cuidar de los infantes del coro, habitualmente responsabilidad del maestro de capilla en las catedrales españolas, en la Catedral de Coria, tras la mala experiencia con el maestro Juan José Bueno, los seises eran cuidados por otros músicos. En el caso del maestro Bernal, el cabildo nombró en 1815 al bajón primero, Francisco Rebolledo, para la responsabilidad, «[...] con obligación de continuar la enseñanza hasta que por el Cabildo se declare si esta es o no de cargo del Maestro de Capilla conforme a Estatutos». En 1820 fallecía Rebolledo y el cabildo decidió pasar la responsabilidad al maestro: «[...] que no solo ha de instruir a los Seises en las lecciones de Musica, sino hacer que se confiesen a menudo, que aprendan la doctrina Christiana, y la humildad, decencia, y compostura que deben guardar en el Coro».[2]

El cabildo no apreciaba la calidad musical del maestro. Se le negó en varias ocasiones un aumento del salario a 500 ducados, para igualarlo al del sochantre. Se le pedía a menudo que entregase sus composiciones con tiempo, por si tenía que corregirlas el racionero Garnier y fue censurado por ello en alguna ocasión.[1]

Leyóse la censura puesta por el Señor Garnier a los Villancicos del Corpus, en el qual su Señoría manifiesta que con respecto a la parte artística no advierte colorido de fuerza en sus versos, contornos proporcionados al objeto, ni la armonía correspondiente con otros defectos que nota, pero mediante la premura de tiempo y no hallarse cosa contraria a nuestra Santa religión, es de parecer se de la consiguiente licencia para que se canten.
Actas Capitulares de la Catedral de Coria, 18 de junio de 1820

Francisco Bernal debió fallecer hacia finales de marzo principios de abril de 1823, ya que el 11 de abril el organista segundo, Vicente Olmedo, solicitaba un aumento del salario «[...] con motivo del mayor servicio que presta en el Organo a causa de la muerte del primero». El cabildo le concedió nueve reales desde el 1 de abril.[2]

Obra[editar]

Se conservan composiciones de Francisco Bernal en la Catedral de Coria.[3]

Referencias[editar]

  1. a b c d e f Barrios Manzano, María del Pilar (enero-septiembre 1991). «La música en la catedral de Coria (Cáceres) durante el magisterio de capilla de Francisco Bernal (1814-1823)». Revista de musicología 14 (1-2). ISSN 0210-1459. JSTOR 20795477. doi:10.2307/20795477. Consultado el 21 de enero de 2024. 
  2. a b c d Martín Terrón, Alicia (20 de enero de 2016). Rodilla León, Francisco, ed. Esplendor y ocaso en las instituciones eclesiásticas del norte de Extremadura: las prácticas musicales en las Catedrales de Plasencia y Coria entre 1750 y 1839. (tesis doctoral). Universidad de Extremadura. Departamento de Didáctica de la Expresión Musical, Plástica y Corporal. pp. 437 ss. Consultado el 20 de enero de 2024. 
  3. Ezquerro Esteban, Antonio (1996). «Memoria de actividades de RISM-España / 1995. V. Archivo de música de la Catedral de Coria (Cáceres). E:COR». Anuario musical: Revista de musicología del CSIC (51): 247-269. ISSN 0211-3538. Consultado el 20 de enero de 2024.