José Antonio Molina Sánchez

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José Antonio Molina Sánchez

Camino de Gorongosa. Óleo sobre lienzo
Información personal
Nacimiento 20 de junio de 1918
Murcia, España Bandera de España
Fallecimiento 16 de diciembre de 2009
Murcia Bandera de España
Nacionalidad Española
Información profesional
Ocupación Pintor Ver y modificar los datos en Wikidata
Movimiento Contemporáneo Español

José Antonio Molina Sánchez (Murcia, España, 1918 - ibidem, 2009) fue un pintor español, reconocido como uno de los principales representantes de la pintura murciana. Formando parte de la Generación de Posguerra, se le considera también un miembro de la 'generación puente' entre la Generación del 27 y los artistas emergentes de los años 70. Su inconfundible obra, en gran medida inspirada en la observación natural, frecuentemente representaba figuras angelicales. Aunque alcanzó reconocimiento y recibió múltiples premios, Molina Sánchez se mantuvo alejado de la autopromoción, priorizando la autenticidad en su arte.

Infancia[editar]

Molina Sánchez vivió los primeros años de su vida marcados por circunstancias difíciles. Su padre murió cuando Molina Sánchez tenía solo cinco años, y poco después, también perdió a su madre, Remedios Sánchez Abellán. Estas pérdidas le llevaron a dividir su niñez entre dos hogares distintos: el de su abuela materna, dueña de una panadería en un barrio humilde, y el de su familia paterna, de un ambiente más distinguido e intelectual.

Este entorno diverso nutrió en Molina Sánchez una curiosidad natural y un aprecio por el aprendizaje. Influenciado por un tío apasionado por la pintura y su colección de arte, sus primeras expresiones artísticas tomaron forma a través de dibujos que evocaban ilustraciones de Don Quijote y mapas de España. Esta habilidad para el arte se destacaba entre sus compañeros de clase.

Su fervor por la pintura se amplificó en 1929, cuando, con solo 11 años, tuvo la oportunidad de visitar exposiciones en el Círculo de Bellas Artes.[1][2][3][4]

Estudios[editar]

Se formó en la Escuela de Artes y Oficios de Murcia bajo la dirección del escultor José Planes. En la década de 1930, publicó sus primeros retratos formales y comenzó a colaborar en revistas y periódicos como ilustrador.

A pesar de haber asistido brevemente a la Real Sociedad Económica de Amigos del País bajo la tutela de Sánchez Picazo, fue en la Escuela de Artes y Oficios de Murcia donde profundizó su formación, especializándose en modelado. Durante este tiempo, cultivó relaciones con Almela Costa y Luis Garay, aprendiendo de su experiencia. Su aprecio por el arte moderno se desarrolló en gran medida gracias a su amistad con el poeta Cano Pato.

En la década de 1940, amplió su educación artística al ingresar a la Escuela Superior de Bellas Artes de San Carlos en Valencia, evolucionando hacia la figuración objetiva en su pintura. En 1942, se mudó a Madrid, donde compartió momentos con el pintor Antonio Gómez Cano, un amigo cercano. También tuvo la oportunidad de exponer junto al reconocido Vázquez Díaz y colaborar en periódicos y revistas destacadas como "El Español" y "Vértigo". Su paso por Madrid también estuvo marcado por profundos estudios en el Museo del Prado.

En 1953, gracias a una beca, viajó a Italia y Francia, sumergiéndose en las corrientes renacentistas y modernas del arte. Además de su educación formal, las extensas travesías de Molina Sánchez le brindaron oportunidades únicas para estudiar variadas colecciones artísticas, participar en misiones artísticas internacionales y establecer vínculos con diversas tendencias y escuelas europeas y africanas.

A pesar de su amplia formación y destreza, Molina Sánchez siempre mantuvo una visión modesta sobre su educación, valorando tanto el aprendizaje académico como las experiencias y conexiones forjadas a lo largo de su trayectoria.[1][2][3][4]

Desarrollo Profesional y Ascenso en el Mundo Artístico[editar]

A sus 16 años, una de sus obras fue aceptada en la Exposición-Salón de Primavera de Murcia y a partir de 1935, sus colaboraciones con periódicos locales lo introdujeron en el ámbito profesional.

En la década de 1930, un ambiente artístico floreciente en Murcia facilitó que Molina estableciera conexiones con otros jóvenes artistas. Durante la contienda nacional, continuó su formación bajo la tutela del pintor Almela Costa y estableció una relación con el poeta Cano Pato, ampliando así su perspectiva sobre el Arte Moderno.

La decisión de Molina de trasladarse a Madrid buscando mayores oportunidades no estuvo exenta de desafíos. Sin embargo, gracias a la ayuda de figuras como Gómez Cano, pudo integrarse en la escena artística madrileña. Su red de conexiones y su educación autodidacta en el Museo del Prado fortalecieron su desarrollo artístico.

Finalmente, en 1945, Molina Sánchez celebró su primera exposición individual en Madrid. A partir de este momento, su presencia en la escena artística española creció constantemente, destacándose en diversas exposiciones y obteniendo reconocimientos, lo que le consolidó como una figura prominente en la pintura española del siglo XX.[1]

Viajes e Influencias Internacionales[editar]

Molina Sánchez, a lo largo de su carrera, buscó inspiración más allá de las fronteras españolas, convirtiéndose sus viajes en elementos trascendentales en su desarrollo artístico. Después de una destacada exposición en Lisboa, decidió quedarse en la ciudad portuguesa durante casi un año. Durante este tiempo, experimentó un ambiente cultural distinto del de la España de postguerra, estableciendo conexiones con diversos artistas y escritores y absorbiendo la apertura del arte portugués a influencias externas.

En 1953, obtuvo una beca que le facilitó viajar por Italia y Francia. En Italia, se empapó del arte renacentista, mientras que en Francia se sumergió en las tendencias modernas. Estas experiencias enriquecieron su perspectiva y técnica.

Además, realizó exposiciones en ciudades como Estrasburgo y Basilea, y participó en eventos artísticos de renombre como la Bienal de Venecia y la Misión Internacional de Arte en Évora.

Un viaje particularmente transformador fue su expedición por África. Aunque no adoptó directamente el arte vernáculo africano, el continente dejó una impresión duradera en él, llevándolo a pintar sobre sus experiencias allí durante dos años. Estos viajes internacionales no solo influenciaron su estilo y temática, sino que también reforzaron la idea de la importancia del reconocimiento de los artistas españoles fuera de España.[1]

Visión Personal y Reconocimiento[editar]

Molina Sánchez se caracterizó por una postura humilde y reservada hacia la fama, a pesar de su reconocido talento en el mundo artístico. Aunque obtenía premios y elogios, evitaba la autopromoción y llegó a distanciarse de competencias artísticas, considerando que no definían la verdadera esencia de su obra. Si bien leía críticas, no se dejaba guiar totalmente por ellas, buscando mantener la autenticidad en su trabajo. Esta perspectiva única no impidió que recibiera reconocimiento, sobre todo en lugares como Estoril, Aveiro y Murcia. Su arte, con referencias africanas, tuvo especial resonancia en Portugal. A nivel internacional, destacan premios como la Medalla de Bronce en la Bienal de Alejandría.[1][5][6][7]​ Sin embargo, para Molina, el mayor logro siempre fue la libre expresión a través de su arte, según el mismo manifestaba:[2]

Defiendo mis ideas a través de mis ángeles


Referencias[editar]

  1. a b c d e Martínez Cerezo, Antonio (1974). Servicio de Publicaciones del Ministerio de Educación y Ciencia., ed. Molína Sanchez, Artistas Españoles Contemporáneos. Consultado el 25 de agosto de 2023. 
  2. a b c Soler, Pedro (17 de diciembre de 2009). «Muere Molina Sánchez, el pintor de los ángeles». La Verdad. 
  3. a b «Muere a los 91 años el pintor José Antonio Molina Sánchez». La Información. 16 de diciembre de 2009. 
  4. a b «José Antonio Molina Sánchez». Región de Murcia digital. 
  5. «José Antonio Molina Sánchez, I Premio de las Artes y las Letras de la Región de Murcia». ABC. 31 de diciembre de 2008. p. 58. 
  6. Campoy, Antonio Manuel (22 de junio de 1980). «Molina Sánchez, Su Huerta y sus Ángeles». ABC. p. 105. 
  7. Rubio, Javier (23 de mayo de 1985). «Molina Sánchez». ABC. p. 117. 

Enlaces externos[editar]