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Lugares Colombinos
Bien de interés cultural
Patrimonio histórico de España
Localización
Localidad Provincia de Huelva
Datos generales
Categoría PHE: Conjunto histórico artístico
BIC: Sitio histórico y Conjunto Histórico
Código PHE: RI-53-0000083 [1]
BIC: 01210500082 [2]
Declaración PHE: 2 de marzo de 1967
BIC: 18 de octubre 2016

El término Lugares Colombinos fue acuñado por los primeros estudiosos e historiadores del descubrimiento de América, para denominar a los lugares en los cuales Cristóbal Colón realizó los preparativos para el primer viaje colombino. Entre ellos, Washington Irving, en 1828, utiliza la denominación en su libro publicado en agosto “My journey to the Columbus Memorial Places. Spain”, traducido al español como “Mi viaje a los Lugares Colombinos”.

Posteriormente se oficializa como figura de protección cultural e histórica con el Decreto 553/1967, de 2 de marzo, del Gobierno de España, por el que fue declarada Conjunto histórico artístico[3]​ de la provincia de Huelva, en torno a aquellos lugares andaluces que tuvieron una especial relevancia en la preparación y la realización del primer viaje de Cristóbal Colón, que dio como resultado el descubrimiento de América.

Esa primera figura de protección, ha sido adaptada y ampliada, recientemente, por la Junta de Andalucía, mediante el Decreto 167/2016, de 18 de octubre, por el que se inscriben en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz, como Bien de Interés Cultural (B.I.C.), con la tipología de "Sitio histórico" y “Conjunto Histórico” de los Lugares Colombinos.[4]

Adicionamente, el 29 de enero de 2016, la candidatura "Monasterio de Santa María de La Rábida y los Lugares Colombinos de Huelva" fue inscrita en la Lista Indicativa de España del Patrimonio de la Humanidad, en la categoría de bien cultural (nº. ref 6080),[5][6]​ como propuesta para ser declarada Patrimonio de la Humanidad.

Ambas figuras de protección de los "Lugares Colombinos", incluyen como conjunto histórico a dos localidades de la provincia de Huelva: una es Palos de la Frontera (dentro de su término municipal se encuentra además el monasterio de La Rábida), y la otra localidad es Moguer. Esos lugares fueron frecuentados en múltiples ocasiones por el almirante, en ellos recibió ayuda y colaboración para el proyecto que pretendía realizar, los franciscanos del Monasterio de la Rábida, los hermanos Pinzón de Palos de la Frontera, los hermanos Niño de Moguer y otras prestigiosas familias marineras de la zona tuvieron una destacada participación en la empresa descubridora.

La zona, después del descubrimiento de América sufrió un fuerte retroceso, especialmente Palos, debido entre otras cosas a la emigración hacía las nuevas tierras descubiertas. El olvido de los hechos protagonizados por estos lugares y sus gentes fue, en parte, corregido por Washington Irving, que gracias a su viaje por estas tierras, su diario y libros sobre los días que vivió en la zona, hicieron que se despertara el interés de historiadores y de otros estudiosos por los lugares protagonistas del primer viaje de Colón.

Los Lugares Colombinos mantienen fuertes vínculos de unión con el mundo iberoamericano, y son el principal referente histórico y cultural de la provincia de Huelva. En la XXV Cumbre Iberoamericana (2016) fue aprobado un comunicado, por los jefes de Estado y de Gobierno de América Latina, España, Portugal y Andorra, reiterando el compromiso con La Rábida como lugar de encuentro de la Comunidad Iberoamericana de Naciones.[7]

Figuras de protección de los Lugares Colombinos[editar]

Decreto 553/1967 del Gobierno de España[3][editar]

En la margen izquierda del río Tinto, cerca de su desembocadura, se encuentra una zona de terreno realmente privilegiado. La naturaleza, la historia y el arte, por designio de la Providencia, se han mostrado pródigas en favorecerla. El paisaje es de una singular belleza, de extensos pinares, abiertos a la intensa luminosidad del mediodía.

La historia adquirió resonancia universal en este bello rincón andaluz. En él se encuentran enclavados los pueblos de Moguer, y Palos de la Frontera y el Monasterio de la Rábida; cuyos solos nombres bastan para evocar una de las mayores gestas históricas: el Descubrimiento de América. El arte también dejó su impronta en estos lugares.

Mapa topográfico de Huelva y los Lugares Colombinos (s. XVIII).

En Moguer, con su convento de Santa Clara de estilo gótico-mudéjar y la iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Granada, con su torre árabe conocida por la «Giralda Chica», y su Casa Consistorial de estilo neoclásico.

En Palos, con su Iglesia de San Jorge, y el Monasterio de la Rábida, que fue en su origen templo romano y luego mezquita árabe hasta convertirse en templo cristiano, que en su forma actual conserva como parte más antigua su iglesia gótico-mudéjár, probablemente del siglo XIV.

Historia y arte alcanzan en estos lugares una maravillosa conjunción, y así, según la tradición en la iglesia de Santa Clara de Moguer oró Cristóbal Colón antes de su salida a las Indias; en la de San Jorge, de Palos, leyó el Comisario la pragmática por la que la Reina Católica autorizaba el reclutamiento de gente para el viaje, y la Rábida, en fin, fue para el descubridor, a la par que refugio, centro de estudios y enseñanza.

Pero tanto el arte como la historia ha tenido en este lugar un constante fluir que se manifiesta en los tiempos modernos bajo la personalidad de un poeta, también universal, Juan Ramón Jiménez, que en los pinares de Moguer, en las calles luminosas del pueblo, en sus antiguas mansiones, en la naturaleza esplendorosa que le rodeaba, encontró inspiración para una de las más hermosas obras del habla española: «Platero y yo».

Todo lo expuesto entraña suficientes razones para que estos lugares sean colocados bajo la protección del Estado, mediante la oportuna declaración monumental. En su consecuencia, y a propuesta del Ministro de Educación y Ciencia, y previa declaración del Consejo de Ministro en su reunión del día veinticuatro de febrero de mil novecientos sesenta y siete.

Se dispone: Se declara Conjunto histórico artístico con el nombre de "Lugares Colombinos" el sector comprendido en los límites del plano unido al expediente instruido para esta declaración.

Decreto 167/2016 del gobierno de la Junta de Andalucía[4][editar]

Planimetría delimitación BIC

….. II.- Los Lugares Colombinos dentro de la provincia de Huelva representan un bien cultural cuyos valores patrimoniales devienen de la rememoración de un hecho histórico de gran trascendencia para la Humanidad como es el descubrimiento de América. Este hecho particular que ilustra la mentalidad de la época y la cultura en el Renacimiento (siglo XV), es conocido mundialmente, ostentando un valor universal.

Bajo su denominación se agrupan los lugares históricos que tuvieron relevancia durante la gesta colombina, cuyo primer viaje inició Cristóbal Colón en 1492 en la búsqueda de una nueva ruta hacia Oriente, pero también aquellos lugares y elementos que conmemoraron el hecho histórico en el IV Centenario (1892), la Exposición Iberoamericana de 1929 y el V Centenario (1992), conformando un ámbito de un enorme valor emblemático que se reivindica en la actualidad como una sólida manera de mantener lazos culturales con pueblos del otro lado del Atlántico.

La mayor parte de estos lugares cuentan ya con una protección patrimonial desde 1967, cuando el Decreto 553/1967, de 2 de marzo, declaró conjunto histórico-artístico un extenso territorio coincidente en buena parte con el ámbito que ahora es objeto de la presente inscripción en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz. Varias razones aconsejan, sin embargo, renovar esta protección mediante el presente Decreto, más acorde con la realidad territorial presente, y en aplicación del marco legal que se deriva de la Ley 14/2007. Por una parte, se considera necesario incorporar bienes, que como es el caso del Monumento a Colón o a la Fe Descubridora, quedaron fuera del perímetro protegido en 1967, por otra, es oportuno precisar con mayor detalle la delimitación cartográfica del perímetro exterior. Así la antigua delimitación de conjunto histórico se sustituye por la de sitio histórico para todo el ámbito, se excluye del mismo a la Isla Saltés, que por sus valores arqueológicos ya forma parte de la Zona Arqueológica de Huelva inscrita en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz, con la consideración de Bien de Interés Cultural, mediante Orden de 14 de mayo de 2001 (publicada en BOJA núm. 75, de 3 de julio de 2001), y se reserva la de conjunto histórico sólo para los cascos históricos de Moguer y Palos de la Frontera.

Se identifica, por tanto, todo un legado patrimonial vinculado a la memoria de la gesta colombina y su incidencia a lo largo de la historia en las poblaciones de Palos de la Frontera, Moguer, Huelva y San Juan del Puerto, del que sobresalen como valores más destacados el monasterio de Santa María de la Rábida, y los conjuntos históricos de Palos de la Frontera y Moguer cuyos testimonios arquitectónicos más significativos constituyen el iglesia de San Jorge Mártir, el Castillo y la Fontanilla, en el núcleo de Palos, mientras que en Moguer destacan el Monasterio de Santa Clara, el Hospital del Corpus Christi, el Castillo, el Convento de San Francisco, y la Parroquia de Santa María de la Granada, entre otros.

Todos estos referentes materiales evocan los preparativos y disposiciones que hubo que realizar desde que el navegante apareciera en el monasterio de La Rábida en 1485, después de la negativa de la Corona portuguesa a hacerse cargo de su empresa de ir a Oriente por Occidente.

Señala la historiografía que Colón se dirigió a la próxima villa de Huelva para dejar a su hijo Diego en casa de sus parientes, los Muliart. En el convento franciscano encontró el apoyo de fray Antonio de Marchena, con profundos conocimientos cosmográficos y de fray Juan Pérez, de gran influencia sobre la Reina Isabel, que lo defenderán en distintas ocasiones entre 1486 y 1492, momento en el que el proyecto fue finalmente aceptado por los Reyes en Santa Fe (Granada).

Otro de los apoyos importantes que el marino tuvo en la aceptación de su plan fue el de la abadesa del Monasterio de Santa Clara de Moguer, Inés Enríquez, emparentada con el rey Fernando. Consta documentalmente que la abadesa mantuvo relación epistolar con el Almirante, y cómo este veló e hizo decir una misa de acción de gracias en la iglesia conventual de Santa Clara la madrugada del 16 de marzo de 1493, al regreso de su primer viaje, cumpliendo así con el voto enunciado por la tripulación de la carabela «Niña» el jueves 14 de febrero de aquel año cuando una tormenta amenazó con hundir la nave a la altura de las Azores.

Por los documentos históricos se sabe también que los Reyes tuvieron que comprar la mitad de la villa de Palos para que la expedición marítima saliera desde un puerto de la Corona, como correspondía al trato de los patrocinadores, revistiendo este hecho especial significado para la población de Palos. En la plaza de la iglesia de San Jorge Mártir –la tradición popular sostiene que fue dentro de dicha iglesia–, se llevó a cabo la solemne notificación al Concejo de la Real provisión de 30 de abril de 1492 por la que se ordenaba la participación de la villa en el proyectado viaje.

Desde 1493, el duque y señor de la villa de San Juan del Puerto promocionó a través de privilegios su puerto, lo que supuso la llegada de nuevos pobladores con el fin de impulsar un importante crecimiento económico, el cual se vería incrementado durante el siglo XV con la crisis de la villa de Palos de la Frontera y su consecuente relegación en el plano de los negocios marítimos de la ribera del Tinto. Este predominio del puerto de San Juan implicó no sólo un importante incremento demográfico, sino que además atrajo a numerosos comerciantes extranjeros -ingleses, florentinos, bretones y portugueses, los cuales contribuyeron a multiplicar el volumen comercial así como demandaron la construcción de importantes instalaciones portuarias. Otra muestra de ello son sendos molinos mareales de la Edad Moderna existentes en las inmediaciones del puerto histórico, más concretamente los situados próximos a la desembocadura del estero Juan de Coto, tal y como se denomina en la documentación histórica, anexo a las tierras que explotaba la cuñada de Colón, Briolanja Muñiz, en el paraje denominado Montecillo, ejido concedido a ésta por el duque de Medina Sidonia.

Según las evidencias materiales, el estudio de la cartografía histórica y del nivel estratigráfico de la marisma, así como los datos paleográficos y el contexto histórico avalan la existencia de una ensenada natural donde fondearían los barcos en época del Descubrimiento, conservándose el topónimo de «puerto escondido», asimilable a otros puertos existentes en la ribera del Tinto con las mismas características, entre ellos el de Palos de la Frontera, consistente en una ensenada litoral, resguardada pero diáfana y abierta a la desembocadura del río Tinto. La propia lógica de evolución de la marisma supondría una colmatación de la referida ensenada natural que retrotrajo la línea mareal que vino aparejado de una remodelación de las estructura portuarias para adaptarlas al incremento de tráfico portuario.

La relación del Almirante con las poblaciones de Palos y Moguer se justifica por la importancia que tuvieron en el aprovisionamiento de embarcaciones y marineros, gracias a los contactos que estableció con los armadores Martín Alonso Pinzón de Palos y Pedro Alonso Niño de Moguer. El 3 de agosto de 1492 la flotilla formada por tres embarcaciones, la nao Santa María –propiedad de Juan de la Cosa–, la Pinta –propiedad de los Pinzón–, y la Niña –propiedad de los Niño–, bautizada oficialmente con el nombre de Santa Clara, zarparon desde el puerto de Palos. La noche anterior los marinos velaron en el templo de San Jorge, saliendo por la Puerta de los Novios en dirección al embarcadero que estaba junto a la Fontanilla.

En relación con la importancia simbólica que el ámbito posee se relacionan las conmemoraciones del hecho histórico y las celebraciones del IV y el V Centenario del Descubrimiento de América, cobrando relevancia patrimonial el Monumento a los Descubridores del IV Centenario, obra de Ricardo Velázquez Bosco y restaurado por Luis Feduchi entre los años 1963-1967 y el Monumento a la Fe Descubridora de la escultora norteamericana Gertrude Vanderbilt Whitney construido en 1927 para la Exposición Iberoamericana de 1929 cuyo principal valor consiste en constituir uno de los emblemas de la ciudad de Huelva.

Igualmente, conviene tener presente la vinculación de los Lugares Colombinos con personajes relevantes a lo largo de la historia, especialmente con aquellos relacionados con la empresa americana o con ciertas personalidades del mundo de las letras y de las artes. Así, Washington Irving pasó por ellos en 1828, la Reina Regente María Cristina de Austria con su hijo lo hizo también en 1892, y los duques de Montpensier salvaron al monasterio de su ruina en 1854 gracias a unas obras de restauración realizadas bajo su patrocinio. El rey Alfonso XII hizo su visita en 1882. Daniel Vázquez Díaz no sólo visitó la Rábida, sino que dejó lo mejor de su genio creador en las paredes de una de las salas. En el siglo XX destaca la presencia del Papa Juan Pablo II, quien junto con los Reyes de España hicieron su visita para conmemorar el V Centenario del Descubrimiento y formalizar la Coronación Canónica de la Virgen de los Milagros.

El valor histórico y simbólico del ámbito que se concreta en distintos sectores patrimoniales se manifiesta en la importancia concedida a las fechas del 3 de agosto y el 12 de octubre, que se rememoran anualmente con diversos actos por la Real Sociedad Colombina y otras instituciones como la Diputación Provincial de Huelva y los Ayuntamientos de Palos, Huelva y Moguer. Asimismo la fecha del 3 de agosto coincide en la localidad de Palos con la víspera del traslado de la imagen titular del monasterio, la Virgen de los Milagros o Santa María de la Rábida, a la Iglesia de San Jorge Mártir, templo en el que permanece hasta fin del mes, cuando la Virgen es devuelta en romería a la Rábida. También el 3 de agosto es día en el que la ciudad de Huelva celebra desde finales del siglo XIX sus fiestas Colombinas en recuerdo de la partida de las naves de Colón.

Vinculado igualmente a la Gesta Colombina se encuentra el Santuario de Nuestra Señora de La Cinta de Huelva, que ostenta una protección individualizada como Bien de Interés Cultural, con la tipología de Monumento, por Decreto 180/1993, de 30 de noviembre. A dicho santuario acudió, según se recoge en diversas fuentes, Cristóbal Colón a la vuelta de su primer viaje, tras una tormenta que amenazó con hundir la carabela «Niña» a la altura de Lisboa, en acción de gracias por la intercesión de la Virgen de la Cinta, a la que los marineros de dicha embarcación habían pedido protección. Dicho acontecimiento del «Voto Colombino» es rememorado anualmente cada 10 de marzo en el santuario por la Real Sociedad Colombina en un acto solemne presidido por el Almirante Jefe de la Flota en representación de la Armada Española. ..............

Se acuerda: Inscribir en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz, como Bienes de Interés Cultural, con la tipología de Sitio Histórico, el ámbito sectorizado de los Lugares Colombinos, en los municipios de Huelva, Moguer, Palos de la Frontera y San Juan del Puerto (Huelva), y con la tipología de Conjunto Histórico, de los sectores delimitados a tal efecto de las poblaciones de Moguer y Palos de la Frontera (Huelva), cuya descripción y delimitación figuran en el Anexo al presente Decreto.

Declaración de los "Lugares Colombinos" Patrimonio de la Humanidad[6][editar]

Logotipo del programa Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO.

La iniciativa partió, a primeros del año 2010, de la Asociación de Estudios Iberoamericanos y Colombinos "Rábida". Esta recabó el apoyo de los distintos agentes sociales (sindicatos, empresarios, asociaciones vecinales, grupos políticos, etc) para su adhesión al manifiesto, para que La Rábida y los Lugares Colombinos de Huelva sean declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. También puso en marcha una campaña de recogida de firmas para apoyar la candidatura, así como una iniciativa web para recabar apoyos en la red.

El 24 de febrero de 2011 el Senado apoyaba, con el voto unánime de todos los grupos políticos, la petición de Patrimonio de la Humanidad para los Lugares del Descubrimiento, la creación de una Sede Cultural de las Cumbres Iberoamericanas en la provincia de Huelva y la celebración de encuentros de Jefes de Estado, y de Presidentes de Gobierno de la Unión Europea y de Iberoamérica.

El 13 de octubre de 2011 se reunieron el Alcalde de Moguer, Gustavo Cuéllar, el primer mandatario palermo, Carmelo Romero, y la presidenta de la Diputación de Huelva, Petronila Guerrero, para aunar esfuerzos y liderar de manera conjunta la candidatura para que La Rábida y Los Lugares Colombinos fueran declarados Patrimonio de la Humanidad. El objetivo era conseguir que los dos ayuntamientos, vinculados de manera directa a la gran gesta americana, asumieran el protagonismo que les corresponde en la promoción de la candidatura presentada por la administración provincial, una candidatura preparada en colaboración con la Universidad de Huelva y la Universidad Internacional de Andalucía, quienes se han encargado de elaborar y argumentar con rigor científico la solicitud. El expediente de solicitud presentado, se entregó a la Junta de Andalucía, que es quien debía seguir la tramitación del procedimiento.

El 16 de noviembre de 2011, los ediles colombinos entregaron al consejero de Cultura de la Junta de Andalucía, la documentación elaborada, para impulsar la candidatura de "La Rábida y los Lugares Colombinos" para la Declaración de Patrimonio de la Humanidad por parte de la UNESCO, de forma paralela la Diputación de Huelva encargó a la Universidad de Huelva y a la Universidad Internacional de Andalucía la elaboración del documento técnico que avalara la propuesta.

El 3 de marzo de 2013 la comisión de expertos de las universidades entregó el documento técnico histórico elaborado.[8]​ Una vez se completa el resto de la documentación necesaria para la tramitación del expediente, el 29 de julio de 2015,[9]​ se entrega a la Junta de Andalucía. A partir de este momento el proceso de solicitud, de declaración de Patrimonio de la Humanidad para los Lugares Colombinos, pasa a ser liderado por la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía, que deberá solicitar también la implicación del Ministerio de Asuntos Exteriores para comenzar a recabar apoyos internacionales que avalen, argumenten y agilicen la petición. Una vez concluida la elaboración del expediente, éste fué remitido al Consejo Español de Patrimonio Histórico, entidad que deberá elevar finalmente la solicitud formal de declaración a la UNESCO.

Primer viaje descubridor.

El 2 de octubre de 2015, en la reunión nº 77, el Consejo de Patrimonio Histórico del Gobierno de España incluyó en la la Lista Indicativa de España de Patrimonio Mundial de la UNESCO" cuatro propuestas, entre las que se encuentra la propuesta de los Lugares Colombinos, presentada por la Junta de Andalucía.[6]​ La propuesta incluye 14 bienes culturales pertenecientes a los municipios Palos de la Frontera, Moguer, San Juan del Puerto y Huelva. De Palos de la Frontera se incluyen el Monasterio de Santa María de La Rábida, el Monumento a los Descubridores, llamada también Columna del IV Centenario, la Iglesia de San Jorge, La Fontanilla, la Casa de Martín Alonso Pinzón y el Puerto Histórico de Palos. Moguer aporta el Monasterio de Santa Clara, el Convento de San Francisco, La Casa Museo de Zenobia y Juan Ramón Jiménez y el Puerto Histórico de Moguer. En Huelva, los bienes culturales que integran el documento son el Santuario de Nuestra Señora de La Cinta, la casa Colón y el Monumento a la Fe Descubridora. Por último, en San Juan del Puerto se incluye su Puerto Histórico.

La "Lista Indicativa" es de vital importancia, ya que, si un bien no figura en la misma al menos con un año de antelación, el país no podrá elevar al Comité del Patrimonio de la Humanidad, una propuesta de candidatura de dicho bien. A partir de este momento el Estado debe elaborar el expediente siendo lo más exhaustivo posible y adjuntando toda la documentación necesaria de acuerdo con el formato recogido en las Directrices Operativas. Esta documentación debe enviarse al Centro de Patrimonio Mundial antes del 1 de febrero de cada año, es decir, 18 meses antes de la Reunión del Comité. El Centro verifica que la documentación es correcta y la traslada a los Órganos Consultivos para su posterior evaluación. Una vez evaluada, los 21 miembros del Comité, tras estudiar los informes del los Órganos Consultivos y debatirlo, deciden finalmente sobre la candidatura.[10]

Conjuntos históricos[editar]

Palos de la Frontera[editar]

Palos[editar]

Iglesia de San Jorge Mártir.

En Palos de la Frontera (Cuna del Descubrimiento de América) se encuentra la iglesia de San Jorge Mártir (siglo XV), donde se leyó la real provisión instando a la entrega de dos carabelas aprovisionadas a Colón.[11]​ Fue declarada Monumento Nacional en 1931.

Cerca de esta Iglesia se encuentra el Puerto de Palos de la Frontera, puerto fluvial del que partió la expedición descubridora, constituido por 7 hornos (dos de cerámica, uno de alimentos, uno de cal y un gran horno de ladrillos y teja), una alota, los astilleros y la fuente la Fontanilla. Desde la Puerta de los Novios de la Iglesia de San Jorge se accedía al histórico muelle del que partió la expedición descubridora de América, junto al cual se encontraba la Fontanilla, que era la fuente pública de Palos, construida sobre un antiguo brocal de época romana y protegida por un templete o tetrapylum, construido con ladrillos en el siglo XIII [12]​ al estilo mudéjar, donde, según afirma la tradición, se abastecieron de agua las naves Santa María, la Niña y la Pinta.

La Fontanilla.

De esta localidad eran también los hermanos Pinzón (Martín Alonso Pinzón, Vicente Yañez Pinzón y Francisco Martín Pinzón), co-descubridores de América. Martín Alonso, el mayor de los hermanos, fue determinante para la empresa descubridora, ya que gracias a su prestigio como armador y experto marino se consiguió animar a la marinería de toda la comarca, además contribuyó notoriamente en la empresa aportando la tercera parte de los gastos en metálico y desechando las primeras naves embargadas por Colón contratando otras más adecuadas.[13]​ Se puede visitar la casa-museo de dichos hermanos en esta localidad, de la cual se conserva su fachada del siglo XV, y parte de su solería original.

También se puede pasear por las orillas del río Tinto en el entorno del muelle de la Calzadilla, de donde partió el Raid aéreo Plus Ultra, cerca se encuentra un antiguo camino rural de la “Ribera del Tinto o de los Lugares Colombinos”, que discurre paralelo al rio desde Moguer hasta el paraje de la Rábida.


La Rábida[editar]

Monasterio de La Rábida.

A escasos 3 kilómetros del casco urbano, cerca de la desembocadura del río Tinto, se erige el cenobio franciscano de “Santa María de La Rábida” (siglos XIV - XV), donde en 1485 llegó por primera vez Cristóbal Colón con su hijo Diego, cansado y desanimado después de su fracaso con Juan II en la corte portuguesa.

Nª Sª de los Milagros.

En este pequeño monasterio encontró hospitalidad, ayuda y apoyo, especialmente por parte de dos frailes fray Juan Pérez, guardián del Convento, que había servido la corte castellana como contador y confesor y fray Antonio de Marchena, custodio y astrólogo famoso, consejero también de la corte de Castilla. Ambos religiosos le apoyaron ante la Corte y le ayudaron a conseguir las naves y tripulaciones que necesitaba. Dicho convento fue lugar de refugio y de desarrollo de la idea colombina, ya que sus religiosos eran grandes conocedores de las ciencias de aquella época.[14][15]

Destacan por su interés artístico la iglesia gótico-mudéjar, así como las estancias decoradas con frescos de Daniel Vázquez Díaz, el claustro y el museo, donde se conservan numerosos objetos conmemorativas del Descubrimiento de América.[16]​ Y, sobre todo, la titular del monasterio, la Virgen de los Milagros - Santa María de La Rábida, conocida por ambos nombres indistintamente; data del siglo XIV y es una bella muestra de gótico manierista y elegante, que imprime a la figura una singular curvatura, de forma que cambia de aspecto por poco que se varíe la perspectiva. Ante esta misma imagen rezaron Cristóbal Colón y el resto de la marinería descubridora la noche antes de la partida. Fue coronada por Juan Pablo II el 14 de junio de 1993.[17][18]​ Es la única imagen de la Virgen María coronada por el papa polaco en España.

El Monasterio fue declarado Monumento Nacional en 1856.[19]​ Mereció además la declaración de “Primer Monumento histórico de los pueblos Hispánicos”.[20]​ El 28 de febrero de 1992 le fue otorgada la por parte de la Junta de Andalucía la "Medalla de Oro de Andalucía".[21]​ Así mismo en la IX Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y Presidentes de Gobierno en su declaración de La Habana, se reconoció a La Rábida como lugar de encuentro de la Comunidad Iberoamericana de Naciones.[22]

En el entorno de La Rábida se encuentra situado el Muelle de las Carabelas, instalación museística que alberga las reproducciones de la nao Santa María y las carabelas Pinta y Niña.

Moguer[editar]

Monasterio de Santa Clara.

En Moguer, Cristóbal Colón visitó en repetidas ocasiones el Monasterio de Santa Clara (siglo XIV), cuya abadesa, Inés Enríquez, tía de Fernando el Católico, apoyó el viaje descubridor ante la Corte. Destacan dentro de este Monasterio el claustro de las Madres, cuya planta baja, del siglo XIV y con reminiscencias almohades, forma el claustro conventual más antiguo de Andalucía; la enfermería, edificio renacentista del siglo XVI de dos plantas con columnas genovesas; y la propia iglesia del cenobio, de tres naves y ábside poligonal. El altar mayor está cubierto con el retablo tallado en 1642 por Jerónimo Velázquez, y en el coro se puede apreciar la única sillería nazarí que se conserva en España (siglo XIV).[23]​ Junto a él se sitúa el Monumento a Colón.

Réplica de la carabela "Niña". Era propiedad de los Hermanos Niño.

Colón también encontró apoyo en el clérigo Martín Sánchez y el hacendado Juan Rodríguez Cabezudo a quien confió la custodia de su hijo Diego, pero sobro todos, en los Hermanos Niño, que tuvieron una destacada participación en los preparativos y desarrollo del viaje decubridor. Una vez superadas las primeras reticencias al proyecto de Colón, se convirtieron en férreos defensores del viaje, y pusieron todo su empeño en llevar a cabo la empresa Colombina. Convencieron a su marineria, para que se alistaran en el viaje. También aportaron, a su costa, la carabela La Niña, propiedad de Juan Niño, siendo los responsables de los preparativos de su carabela, que se realizaron en julio de 1492, en el Puerto de Moguer.[24]

En los astilleros del Puerto de Moguer se construyó la carabela La Niña hacia 1488, y en cumplimiento de una de las provisiones que llevaba Colón, concedidas por los Reyes Católicos, que obligaba a las villas de las costas andaluzas,[25]​ y por medio de una comisión dirigida a la villa de Moguer para que cumplieran dicha provisión,[26]​ se embargó dos barcos en presencia del escribano moguereño Alonso Pardo.

Tras regresar del viaje Descubridor, Cristóbal Colón pasó, junto a la tripulación de La Niña, la primera noche de vigilia, en la iglesia de Santa Clara, cumpliendo la promesa o Voto Colombino realizado en alta mar, cuando una tempestad estuvo a punto de hacer zozobrar la carabela La Niña, capitana en el viaje de regreso por el naufragio en América de la Santa María. Este Monasterio, fue declarado Monumento Nacional en 1931, y es junto al Convento de San Francisco, el Hospital del Corpus Christi, el Castillo, la Iglesia de Santa María de la Granada y el Puerto de Moguer los elementos Colombinos más destacados de Moguer.

Hoy, Moguer, también es conocido por ser la cuna del Premio Nobel Juan Ramón Jiménez, autor de Platero y yo. Se puede visitar su Casa Museo (siglo XVIII), la casa natal (siglo XIX) y la finca de Fuentepiña (siglo XIX).[27]

Bienes materiales protegidos[editar]

Palos de la Frontera[editar]

Palos:

- Iglesia de San Jorge Mártir

- Puerto Histórico de Palos

- Castillo de Palos

- La Fontanilla

- Casa Museo de Martín Alonso Pinzón

La Rábida:

- Monasterio de Santa María de la Rábida

- Monumento a los Descubridores

Moguer[editar]

- Monasterio de Santa Clara

- Hospital del Corpus Christi

- Castillo de Moguer

- Puerto Histórico de Moguer

- Convento de San Francisco

- Iglesia Nuestra Señora de la Granada

- Casa Consistorial

- Casa Museo Zenobia y Juan Ramón

Huelva[editar]

- Monumento a Colón o a la Fe Descubridora

San Juan del Puerto[editar]

- Puerto Histórico de San Juan del Puerto

Motivación histórica[editar]

Los Reyes Católicos, particularmente la reina Isabel I de Castilla, decidieron ayudar a Cristóbal Colón en su proyecto de llegar a Asia por el oeste, atravesando la mar océana. El 17 de abril de 1492, Colón firmó con los reyes las Capitulaciones de Santa Fe, documentos por los cuales se autorizó, sin financiar, la expedición de Cristóbal Colón a las Indias por el mar hacia occidente. Además se le concedieron a Colón una serie de prebendas y títulos, entre ellos: Almirante, Gobernador, Virrey y el 10% de las riquezas. También se firmaron varias provisiones y cédulas para que ayudasen a Colón en aquellas villas y puertos de mar a las que se dirigía.

Iglesia de San Jorge Mártir de Palos de la Frontera.

Una provisión fue dirigida a la villa de Palos de la Frontera por una sanción impuesta a algunos de los vecinos de esta villa. El 23 de mayo de 1492, a las puertas de la Iglesia de San Jorge de Palos de la Frontera, en presencia de Cristóbal Colón, fray Juan Pérez y las autoridades locales, se dio lectura a la Real Provisión, firmada por los Reyes Católicos, en la que se ordenaba a ciertos vecinos de la villa palerma poner a disposición de Colón dos carabelas totalmente armadas y aparejadas.

Real Provisión de los Reyes Católicos
DIRIGIDA A CIERTOS VECINOS DE PALOS PARA QUE ENTREGUEN A CRISTÓBAL COLÓN DOS CARABELAS
Granada, 30 de Abril de 1492.
Vien sabedes como por algunas cosas fechas e cometidas por vosotros en desserbicio nuestro, por los del nuestro Consejo fuistes condenados a que fuésedes obligados a nos servir dos meses con dos carabelas armadas a vuestras propias costas e espensas cada e quando e doquier que por nos vos fuese mandado so ciertas penas, segund que todo más largamente en la dicha sentencia que contra vosotros fue dada se contiene. E agora, por quanto nos avemos mandado a Christoval Colón que vaya con tres carabelas de armada, como nuestro capitán de las dichas tres carabelas, para ciertas partes de la mar océana sobre algunas cosas que cunplen a nuestro servicio e nos queremos que llebe consigo las dichas dos carabelas con que asy nos aveis de servir...
Archivo General de Indias. Signatura: PATRONATO, 295, N.3.[11]

Los vecinos a los que es referida dicha provisión contestarían:

... que estaban presto de la cumplir en todo y por todo segund sus Altezas lo mandan...
Parte trasera de la Real Provisión.[11]

pero la marinería de la zona, que no era obligada por la real provisión, no estaba dispuesta a formar parte de la expedición con un desconocido, como lo era Colón para aquellos hombres. Independientemente de la mayor o menor credibilidad de las ideas colombinas, los hombres de Palos nunca secundarían al genovés a no ser que le acompañara algún navegante respetado en la villa. Con la oposición de los vecinos y de los marineros, Colón recurrió a una de las provisiones expedidas por los monarcas en la que se le concedió permiso para reclutar marineros entre los encarcelados, aunque finalmente esto no fue necesario.

Puerto de Moguer y Astilleros de La Niña.

Otra real provisión concedida a Colón, por los Reyes Católicos, obligaba a las villas de las costas andaluzas,[25]​ y por medio de una comisión posterior dirigida a la villa de Moguer, a ceder dos barcos a la empresa descubridora.[26]​Colón ejecutó esta Real provisión en el Puerto de Moguer, embargando dos barcos en presencia del escribano Alonso Pardo, embarcaciones que más tarde fueron desechadas.[24]

Real Provisión de los Reyes Católicos
Dirigida a los vecinos de Moguer, a través del contino Juan de Peñalosa, para que entreguen a Cristóbal Colón dos carabelas
...las cibdades e villas e logares de la costa de la mar de Andalucía como de todos los nros. reynos e Señorios (...) Sabedes que nos habemos mandado a Christobal Colon que con tres carabelas vaya a ciertas partes de la mar oceana como nro. capitan (...) por ende nos vos mandamos a todos e a cada uno de vos en vros. logares e jurisdicciones que cada quel dicho Christobal Colon hobiere menester....
Granada, 30 de abril de 1492.
Archivo General de Indias. Signatura: PATRONATO, 295, N.4.

En estas circunstancias, y gracias a la ayuda de los franciscanos del monasterio de La Rábida y a Pero Vázquez de la Frontera, viejo y respetado marino de la zona, Colón conoció a Martín Alonso Pinzón,[28]​ rico armador y líder natural de la zona gracias a sus muchas navegaciones tanto por el Océano Atlántico como por el Mar Mediterráneo, y por los que había amasado fortuna y fama. Además de los ánimos y la influencia de estas amistades, al mayor de los hermanos Pinzón le habría convencido también la propuesta que, según el testimonio de Alonso Gallego en los Pleitos colombinos, Colón le hizo a Martín Alonso:

Señor Martín Alonso Pinçón, vamos a este viage que, si salimos con él y Dios nos descubre tierras, yo os prometo por la Corona Real de partir con vos como un hermano.
Puerto histórico de Palos.

Sea como fuere Martín Alonso desde aquel momento comenzó una enérgica campaña en favor de la empresa. Aportó de su hacienda personal medio millón de maravedís, la tercera parte de los gastos en metálico de la empresa.[29][30]​ y convence a sus hermanos, Francisco y Vicente, y a los Hermanos Niño, destacada familia marinera de Moguer, y con los cuales se consigue animar y enrolar a toda la marinería necesaria para la empresa, hombres de Palos, del vecino Moguer, de Huelva, del resto de la comarca[31][32]​ e incluso de fuera de Andalucía. Marinería que ahora sí se arriesgaba a aquella navegación, ya que el hecho de que Martín Alonso Pinzón, con sus hermanos y los Hermanos Niño, estuvieran a la cabeza de dicha armada, era una garantía para los hombres de la zona del Tinto-Odiel.[33][34]

Ultimados los preparativos la expedición partió del Puerto de Palos, el 3 de agosto de 1492. La escuadra colombina estaba formada por las carabelas Pinta, Niña y la nao Santa María. La Pinta fue costeadas por el concejo de Palos, en cumplimiento de la citada real provisión y La Niña fue aportada por los Hermanos Niño.[35][24]​ La tripulación estaba formada por unos 90 hombres aproximadamente, siendo la gran mayoría de los pueblos colombinos de Moguer y Palos de la Frontera.[36]

Washington Irving, redescubridor de los Lugares Colombinos[editar]

Washington Irving

Washington Irving está considerado como el autor de la primera biografía de Cristóbal Colón.[37]​ Su fascinación por la figura de Colon y la aventura descubridora motivó que Irving visitara España en 1826, invitado por el embajador americano en Madrid, Sir Alej Everett, que le entrega unos documentos relativos al descubrimiento, conservados en San Lorenzo del Escorial, para que los estudiase. Posteriormente, el 1 de marzo de 1828, Irving decide acudir al Archivo General de Indias, en Sevilla, para seguir investigando.

Aprovechando su estancia en la ciudad hispalense, el autor organiza el viaje a los Lugares Colombinos con el objetivo de documentarse, conocer los lugares, los hechos que en ellos transcurrieron y las personas que protagonizaron el Descubrimiento de América. El viaje de Washington Irving a la provincia de Huelva se produce los días 12, 13 y 14 de agosto de 1828. Son especialmente valiosas las notas recogidas en su diario, de lo acontecido en su visita a Palos, La Rábida, y Moguer; en las que describe la realidad de los Lugares Colombinos del año 1828. También relata los contactos mantenidos con los descendientes de los hermanos Pinzón de la época.

Entre la amplia bibliografía de Washington Irving, los títulos “Mi viaje a los Lugares Colombinos” publicada en 1928, Historia de la vida y viajes de Cristóbal Colón publicada en 1833, "Viajes y descubrimientos de los compañeros de Colón", y el apéndice que incluía A visit to Palos', publicada en 1854 y las notas de su diario de los días 12, 13 y 14 de mayo de 1828 de la visita a los Lugares Colombinos, fueron determinantes en la difusión y recuperación histórica de dichos lugares. Gracias a estas obras Palos de la Frontera, La Rábida, Moguer, los hermanos Pinzón, los hermanos Niño, Fray Juan Pérez, etc.; fueron conocidos mundialmente como protagonistas del Descubrimiento de América.

En febrero de 2016, el Parlamento Andaluz, aprobó la inclusión Huelva en la Ruta de Washington Irving, incluyendo los Lugares Colombinos, en base a la visita que realizo, en 1828, a Moguer, Palos y La Rábida.[38][39]

La Diputación Provincial de Huelva, con motivo de la celebración anual del Descubrimiento de América, el 12 de octubre de 2001, hizo un reconocimiento oficial de la labor difusora y de rescate de la memoria histórica de los Lugares Colombinos realizada por Washington Irving en todo el mundo.[40]

Accesos[editar]

Al principio los accesos se caracterizaban por ser a través de la ría de Huelva por medio de pequeñas embarcaciones, o a través de la antigua carretera Huelva-Sevilla (actual A-472) a su paso por San Juan del Puerto. Una vez que en la década de los 70 llegan las industrias a la zona, se construye el puente sobre la ría de Huelva, que une a la capital tanto con las playas de Mazagón como con los "Lugares Colombinos".

Los accesos por tanto hacia la zona son por las siguientes vías:

  • Desde Huelva capital: a través de la H-30, la N-442 y H-624 hacia La Rábida (10 km) y Palos de la Frontera (13 km) y a través de la H-30, A-49 (dirección Sevilla) y A-494 hacia Moguer (20 km).
  • Desde la provincia de Sevilla: a través de la A-49 (dirección Huelva) y la A-494 hacia Moguer (86 km), Palos de la Frontera (93 km) y La Rábida (96 km).

Véase también[editar]

Referencias[editar]

  1. Ministerio de Cultura, Patrimonio Histórico
  2. [ http://www.iaph.es/patrimonio-inmueble-andalucia/resumen.do?id=i228213 Consejería de Cultura de la J.A., Patrimonio Inmueble de Andalucía]
  3. a b BOE nº 69 de 22/03/1967. «Decreto 553/1967, de 2 de marzo, por el que se declara conjunto histórico artístico el sector denominado «Lugares Colombinos» en la provincia de Huelva». Consultado el 22 de octubre de 2016. 
  4. a b BOJA nº 205 de 25/10/2016. «Decreto 167/2016, de 18 de octubre, por el que se declara "Sitio histórico" y “Conjunto Histórico” los Lugares Colombinos en la provincia de Huelva». Consultado el 8 de noviembre de 2016. 
  5. Véase la entrada «Monastery of Santa María de La Rábida and the Columbus Memorial Places in Huelva»de la Unesco en: [1].
  6. a b c Web del Gobierno de España. «La candidatura de los Lugares Colombinos incluida en las Lista Indicativa.». Consultado el 22 de octubre de 2016. 
  7. Web de Europa Press. «La Rábida lugar de encuentro de la Comunidad Iberoamericana de Naciones». Consultado el 8 de octubre de 2016. 
  8. Europa Press. «La comisión de expertos de las universidades entregan el documento técnico». Consultado el 6 de marzo de 2013. 
  9. Europa Press.es. «La Junta de Andalucía recibe el expediente completo para su trámitación.». Consultado el 29 de julio de 2015. 
  10. Web del Gobierno de España. «Siguiente pasos a la inclusión en la Lista Indicativa.». Consultado el 3 de septiembre de 2015. 
  11. a b c Real Provisión de los Reyes Católicos que fue enviada a Diego Rodríguez Prieto y otros compañeros, vecinos de la villa de Palos, a fin de que tuvieran preparadas dos carabelas para partir con Cristóbal Colón. [2] Granada, 30 de abril de 1492. Archivo General de Indias. Signatura: PATRONATO, 295, N.3. (castellano antiguo)
  12. IZQUIERDO LABRADO, Julio (1987). Palos de la Frontera en el Antiguo Régimen (1380-1830). Huelva: Instituto de Cooperación Iberoamericana / Ayuntamiento de Palos de la Frontera. 
  13. Diputación de Huelva. «Los marineros de Huelva». Archivado desde el original el 27 de noviembre de 2015. Consultado el 27 de agosto de 2009. 
    • ORTEGA, Ángel (1925, el original). La Rábida. Historia documental crítica. 4 vol. (Ed. facsímil) 3. Diputación Provincial de Huelva. Servicio de Publicaciones. pp. 38-39. ISBN 978-84-500-3860-6. 
    • MORALES PADRÓN, Francisco (1961). Las relaciones entre Colón y Martín Alonso Pinzón. in: Actas. Vol. 3. Lisboa. S. 433-442. 
    • MANZANO Y MANZANO, Juan; MANZANO FERNANDEZ-HEREDIA, Ana Maria (1988). Los Pinzones y el Descubrimiento de América. 3 vol. Madrid: Ediciones de Cultura Hispanica. ISBN 9788472324428. 
    • ÍÑIGUEZ SÁNCHEZ-ARJONA, Benito (1991). Martín Alonso Pinzón, el calumniado. Sevilla: Imp. José de Haro. ISBN 9788460410126. 
  14. www.cervantesvirtual.com. «Biografía de Cristóbal Colón». Biblioteca virtual Miguel de Cervantes. Consultado el consultado el 18 de diciembre de 2007.. 
  15. www.artehistoria.jcyl.es. «Biografía de Cristóbal Colón». ARTEHISTORIA. Archivado desde el original el 27 de noviembre de 2015. Consultado el consultado el 18 de diciembre de 2007.. 
  16. www.diphuelva.es. «Monasterio de Santa María de La Rábida». Diputación de Huelva. Archivado desde el original el 27 de noviembre de 2015. Consultado el consultado el 18 de diciembre de 2007.. 
  17. conferenciaepiscopal.es (1993). «Cuarto viaje apostólico a España». Consultado el consultado el 10 de diciembre de 2007.. 
  18. planalfa.es. «El Papa en los Lugares Colombinos». Archivado desde el original el 27 de noviembre de 2015. Consultado el consultado el 10 de diciembre de 2007.. 
  19. «Expediente sobre la declaración de Monumento Nacional al Monasterio de Santa María de la Rábida.». Consultado el consultado el 18 de diciembre de 2007.. 
  20. I Congreso Hispanoamericano de Historia. Madrid, octubre de 1949.
  21. «DECRETO 31/1992, de 25 de febrero, por el que se concede la Medalla de Andalucía, a la Fundación Franciscana de La Rábida.». B.O.J.A. Consultado el 28 de junio de 2008. 
  22. www.oei.es. «IX CUMBRE IBEROAMERICANA.». Organización de Estados Iberoamericanos. Consultado el consultado el 18 de diciembre de 2007.. 
  23. GONZÁLEZ GÓMEZ, Juan Miguel (1978). El Monasterio de Santa Clara de Moguer. Huelva: Diputación de Huelva. ISBN 9788400037529. 
  24. a b c González Cruz, David (2012). Descubridores de América, Colón, los marinos y los puertos. SILEX EDICIONES. ISBN 9788477377399. 
  25. a b Real cédula notificando a las ciudades y villas que mandan a Colón con tres carabelas a ciertas partes del mar, y que le ayuden.
    ...las cibdades e villas e logares de la costa de la mar de Andalucía como de todos los nros. reynos e Señorios (...) Sabedes que nos habemos mandado a Christobal Colon que con tres carabelas vaya a ciertas partes de la mar oceana como nro. capitan (...) por ende nos vos mandamos a todos e a cada uno de vos en vros. logares e jurisdicciones que cada quel dicho Christobal Colon hobiere menester....
    Archivo General de Indias. Signatura: PATRONATO, 295, N.4.
  26. a b Comisión al contino Juan de Peñalosa, para que haga cumplir en la villa de Moguer, una cédula de SS. AA., ordenando se entreguen a Cristóbal Colón, donde y cuando las pidiese, tres carabelas armadas y equipadas. Archivo General de Simancas. Signatura: RGS,149206,1
  27. www.fundación-jrj.es. «Fundación Juan Ramón Jiménez». Moguer, España. Consultado el 15 de diciembre de 2007. 
  28. FERNÁNDEZ DURO, Cesareo (1883). Colón y Pinzón. Real Academia de la Historia. pp. 91-92. 
  29. De Las Casas, Bartolomé. «Tomo I. Capítulo XXXIV, pág. 256.»
    • ASENSIO, José María. Martín Alonso Pinzón: Estudio histórico. La España Moderna, 1892. pp. 66-68. 
    • MANZANO Y MANZANO, Juan; MANZANO FERNÁNDEZ-HEREDIA, Ana María (1988). Los Pinzones y el Descubrimiento de América. 3 vols. Madrid: Ediciones de Cultura Hispánica. ISBN 978-84-7232-442-8. 
    • ORTEGA, Ángel. Pág. 37-110.
    • RIVERA, Carlos (1945). Martin Alonso Pinzón. Ayamonte (Huelva): Imprenta Asilio Provincial. 
  30. «Historia de la navegación: Martín Alonso Pinzón». www.mgar.net. Consultado el 23 de abril de 2009. 
  31. Eduardo IBARRA Y RODRÍGUEZ (1892). Don Fernando el Católico y el descubrimiento de América. Imprenta de Fortaner, Madrid. p. 184. 
  32. MENÉNDEZ-PIDAL, Gonzalo. «Tres puntos finales, Cristóbal Colón». Hacia una nueva imagen del mundo. Centro de Estudios Políticos y Constitucionales, 2003. ISBN 978-84-259-1245-0. 
  33. DÍAZ-TRECHUELO, María Lourdes. págs. 77-78.
  34. SUÁREZ FERNÁNDEZ, Luis (1990). Los reyes católicos. Ediciones Rialp. p. 247. ISBN 9788432125850. 
  35. ROPERO REGIDOR, Diego (1992). Los Lugares Colombinos y su entorno. Madrid: Fundación Ramón Areces. ISBN 978-84-8004-027-3. 
  36. GrandesExploradoresBBVA.com. «Grandes Exploradores de la Historia. Cristóbal Colón. La Figura. Tripulación del primer viaje de Colón». 
  37. Diputación de Huelva. «Reconocimiento de la Diputación de Huelva a Washington Irving.». Consultado el 9 de noviembre de 2016. 
  38. ABC. «Huelva ya es parte de la ruta de Washington Irving.». Consultado el 9 de marzo de 2016. 
  39. Huelva Ya. «Incluyen a Huelva en la promoción turística de la ruta de Washington Irving.». Consultado el 9 de marzo de 2016. 
  40. www.diphuelva.es. «Washington Irving, Biógrafo de Colón y Descubridor de los Lugares Colombinos». Archivado desde el original el 27 de noviembre de 2015. Consultado el 29 de diciembre de 2007. 

Bibliografía[editar]

Enlaces externos[editar]