Usuario:Bleff/Tallerafrodita

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Afrodita (en francés: Aphrodite) es una película muda erótica argentina de 1928 dirigida por Luis Moglia Barth y basada en la novela homónima de Pierre Louÿs.

Antecedentes y desarrollo[editar]

Moglia Barth no dio detalles sobre la trayectoria profesional del reparto de Afrodita y afirmó que ninguno de ellos siguió trabajando en cine.[1]​ Solo mencionó la participación de Pola,[1]​ una modelo de artistas que ese mismo año había aparecido en los tableaux-vivant que el cineasta rosarino Camilo Zaccaría Soprani presentaba junto a las funciones de su película Mujer, ¡tú eres la belleza! en el Teatro Apolo de Buenos Aires.[2]​ La película de Soprani fue pionera del erotismo softcore y estaba centrada en los usos artísticos del desnudo femenino.[2]​ Según Fernando Martín Peña, Mujer, ¡tú eres la belleza! «desarrollaba el tema alternando lo documental (un rápido repaso por la historia de la representación de la figura humana, la rutina de los estudiantes de artes plásticas, los ejercicios recomendados a las modelos para sostener sus poses), con una extensa serie de desnudos femeninos, individuales o de conjunto, cuidadosamente compuestos».[2]

Lanzamiento y recepción[editar]

En una entrevista de 1973, Moglia Barth recordó: «El éxito fue tan grande que las entradas se agotaban. Nosotros mismos hacíamos vender entradas fuera de la boletería, en la calle Maipú, al doble del precio. (...) El mayor problema era esconder a los artistas, porque éstos se querían ver en la pantalla todos los días y yo temía que al descender de los palcos se confundieran con el público».[1]

Pareciera que la llegada del calor trae aparejada la aparición de cuanta película pornográfica tienen atesorada en el archivo ciertas alquiladoras de menor cuantía. Salen como las vizcachas al amparo de las sombras que en este caso son los cines de dudosa moralidad. (...) Estas películas hacen un daño grandísimo al cine porque obligan a las autoridades a propender sanciones penales y censura que redundan en perjuicio de todos los empresarios. Hacen daño porque dan pasto a la crítica cinéfoba, siempre alerta a dar el golpe de gracia al espectáculo cinematográfico. El calor trae aparejado varios males para el cine, pero el de las películas indecentes es el peor.[3]


Conservación[editar]

Véase también[editar]

Referencias[editar]

  1. a b c Peña, 2012, Sexo y censura.
  2. a b c Peña, 2012, Cine en provincias.
  3. Peña, Fernando Martín (26 de mayo de 2009). «El extraño caso de un film prohibido». El País. Montevideo. Consultado el 14 de abril de 2024. 

Bibliografía[editar]

Enlaces externos[editar]