Usuario:Eladiorego/Taller

Hola ¿Que tal?.--Niplos-disc. 20:36 4 abr 2008 (UTC)

Renoir

Pierre Auguste Renoir (1841-1919) es quizá el pintor Impresionista que más exaltó la belleza del mundo, don una visión idílica marcada por la inocencia y la alegría. Sus elegantes retratos, refinamiento de desnudos femeninos y brillantez de escenas costumbristas son fruto de una filosofía basada en la búsqueda armónica dde la vida. El Impresionismo fue una revolución pictórica en la cual Renoir destacó por su serenidad y optimismo. Para él la pintura era un placer que le proporcionaba una inmensa felicidad. Él mismo solía decir que “Cuando Pisarro pintaba una escena de Paris, ponía siempre un entierro, mientras yo habría puesto una boda.

Fue un hombre sencillo que no llevó una vida fácil, pasando apremios económicos hasta llegar a la cincuentena. En este momento ha de hacer frente a ataques de reuma que con el paso de los años le privarían de gran parte de su movilidad y le harían sufrir enormemente. A pesar de esto no perdió su ilusión, e incluso se hizo sujetar un pincel a la muñeca para seguir pintando hasta su muerte.

CONTEXTO HISTÓRICO

El periodo histórico que le tocó vivir a Renoir fue bastante convulso, coincidiendo con el Segundo Imperio, la Comuna y la II República.

Renoir llegó con su familia a Paris en 1854 siendo un adolescente; en 1870 fue llamado a filas para combatir en la guerra contra Prusia. Este fue un periodo triste para el pintor pues sus amigos Monet y Pisarro se exiliaron a Inglaterra, a la vez que Fedreric Bazille moría en combate.

El 4 de Septiembre de 1870 se proclama la III República y en Febrero de 1871 se firma la derrota de Francia ante Bismarck.

Este invierno fue difícil para la población, lo que unido a un creciente descontento social desde 1869 provocó el estallido de la Comuna que sacudió Paris entre marzo y mayo de 1871, saldándose con un balance de 17.000 a 25.000 muertos. Renoir fue considerado simpatizante de la Comuna y se vio obligado a esconderse. A pesar de su fracaso, la Comuna tuvo un gran impacto pues era la expresión de la lucha social.

A pesar de todo el mundo de las letras y las artes tenía gran vitalidad. Aunque Napoleón II no era especialmente sensible a la cultura, intentó modernizar París al estilo del Londres de la época. Una de las medidas tomadas fueron la organización de las exposiciones universales de 1855 y 1867 que trajeron las locomotoras y las últimas innovaciones en el plano industrial. Con el ferrocarril llegaron multitud de extranjeros; además la nueva burguesía se convirtió en el motor una sociedad.

Con este telón de fondo aparece la novela realista en contraposición de la romántica. Aparecen poetas que reivindican el arte por el arte. Con respecto a la pintura la aparición del Impresionismo hacia 1870 se impuso sobre el academicismo reinante. Los impresionistas no determinaban previamente la composición del cuadro antes de su realización sino que practicaban la improvisación.