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El Caso El Universo (457-Q-2011) fue un proceso judicial en Ecuador que generó mucha controversia a nivel nacional y que acaparó la atención internacional debido a la presunta violación contra el principio de la libertad de expresión. El caso inició a través de una querella interpuesta por el presidente ecuatoriano Rafael Correa en contra del diario El Universo, sus directivos y su editor de opinión de aquel entonces por el supuesto delito de injurias calumniosas.

La querella se basó en un artículo de opinión escrito por Emilio Palacio, articulista y director de opinión del diario, en el que se analizaban los hechos de la revuelta policial del 30 de septiembre de 2010 en contra de las políticas de Correa y se afirmaba que el mandatario dio autorización a las fuerzas armadas para la utilización disparos en el ingreso a un centro de salud, en el cual él se encontraba aislado tras las protestas policiales, con la finalidad de rescatarlo.

El juez de primera instancia fallo a favor del querellante en contra del diario imponiendo una pena de tres años de prisión para cada uno de los querellados, así como el pago total de 40 millones de dólares como indemnización. Luego de que los demandados presentaron el recurso de apelación, el tribunal de segunda instancia asignado confirmó la sentencia. El recurso de casación fue rechazado posteriormente por la Corte Nacional de Justicia confirmando nuevamente la sentencia. Finalmente, ante la posibilidad de llevar el caso ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos, el querellante Rafael Correa decidió conceder la remisión de las condenas dictadas en contra de los querellados.

Antecedentes[editar]

Relación del gobierno de Rafael Correa con los medios de comunicación[editar]

Desde su posesión en el cargo como presidente de Ecuador, Rafael Correa tuvo conflictos con los medios de comunicación del país. El gobierno de Correa acusaba a los medios de comunicación de formar parte de la oposición, y aseguraba que estaban distorsionando la información en favor de grupos de poder que conspiraban en su contra. Los medios aludidos del Ecuador habían declarado ser independientes, y que habían sido atacados por transmitir las opiniones de la oposición ecuatoriana.

Sucesos ocurridos en el 30-S[editar]

El 30 de septiembre de 2010, casi un mes después de la aprobación de la Ley de Servicio Público (LOSEP), los cuarteles de policía de Quito, Guayaquil y varias otras ciudades del país, iniciaron una paralización en sus actividades, seguido de varias manifestaciones. Durante aquel día se registraron desmanes en la población debido a la falta de resguardo policial, como saqueos y destrucción a la propiedad privada. La protesta de los agentes de la Policía Nacional -y de ciertos miembros de la Fuerza Aérea- se centraba principalmente en la inconformidad de que ellos pasaban a regirse dentro del marco legal instaurado en la LOSEP. Correa, quien asistió al Regimiento No°. 1 de la Policía Nacional en la ciudad de Quito, tuvo que ser evacuado para su resguardo y fue alojado en el Hospital de Policía Nacional. Los policías amotinados cercaron el hospital con el propósito de negociar una reforma a la Ley, sin embargo, en la noche, miembros de las fuerzas armadas se enfrentaron a los policías a las afueras del hospital. Finalmente, Correa fue sacado del centro de salud por el operativo militar y conducido hasta el Palacio de Carondelet en donde ya había una manifestación a favor del presidente.

Los hechos posteriores al denominado 30-S generaron varias acusaciones. El oficialismo acusó a la oposición de conspirar en contra de la vida del presidente e intentar un golpe de Estado. Por otra parte, la oposición mantuvo la teoría de que no hubo intentona golpista y que las versiones fueron manipuladas por parte del gobierno para victimizarse y elevar la popularidad del primer mandatario.

Artículo «No a las mentiras» del diario El Universo[editar]

El 6 de febrero de 2011 fue publicado el artículo «NO a las mentiras» en la sección de opinión del diario El Universo, de autoría de Emilio Palacio.[1]​ Palacio de ocupada el cargo de director de opinión de dicho diario en aquel entonces, y en varias ocasiones anteriores había tenido conflictos con el presidente Rafael Correa y otros miembros del gabinete de gobierno. En el artículo se acusaba al gobierno -específicamente a Correa- de haber cometido un delito de lesa humanidad al supuestamente haber dado la orden a los militares de disparar a un hospital lleno de civiles durante los hechos ocurridos en la revuelta policial de 2010, para lograr el rescate del mandatario.

Proceso judicial[editar]

Querella[editar]

El 22 de marzo de 2011, el presidente Rafael Correa presentó una querella en la ciudad de Guayaquil, con el patrocinio de sus abogados Gutemberg Vera y Alambert Vera. La demanda penal fue hecha contra la Compañía Anónima El Universo; el editor de opinión, Emilio Palacio, quien redactó el artículo «NO a las mentiras»; el director del diario, Carlos Pérez Barriga; y, los subdirectores César Pérez Barriga y Nicolás Pérez Lapentti, por supuesta responsabilidad coadyuvante.

En la querrella se manisfestaba que los demandados incurrieron en el delito de injuria calumniosa, y se acusaba de haberle generado daño moral. El delito de injuria calumniosa estaba tipificado en los artículos 189 y 191 en el -actualmente derogado- Código Penal (vigente hasta el 9 de agosto de 2014), en el cual se describe el tipo penal como "la falsa imputación de un delito". Dentro de la querella se pedía prisión por 3 años a los denunciados, así como la compensación de 80 millones de dólares por daño moral.

La querella fue receptada en el Juzgado Décimo Quinto de Garantías Penales del Guayas, a cargo del juez Oswaldo Sierra Ayora. Rafael Correa planteó esta acción penal privada a título personal, es decir, en calidad de ciudadano y no como presidente de la República.

Véase también[editar]

Referencias[editar]

  1. Palacio, Emilio (6 de enero de 2011). NO a las mentiras. Guayaquil: Diario El Universo. Consultado el 11 de febrero de 2015.