Nuestra Señora de los Dolores y Soledad

Nuestra Señora de los Dolores y Soledad
	; La Virgen durante la Procesión de Resurrección con el castillo de Valencia de Don Juan al fondo.
Origen
Santuario	Iglesia de Nuestra Señora del Castillo Viejo (Valencia de Don Juan)
Datos generales
Veneración	Iglesia católica
Fecha de la imagen	Siglo XVIII
Estilo	Barroco
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Nuestra Señora de los Dolores y Soledad, conocida simplemente como la Dolorosa, es una advocación mariana que se encuentra en la ciudad de Valencia de Don Juan (León, España). Además, la imagen es la titular de la cofradía homónima.

La Virgen se encuentra en la Iglesia de Nuestra Señora del Castillo Viejo y procesiona en cuatro procesiones los días centrales de la Semana Santa coyantina.

Características de la imagen[editar]

La imagen de la Virgen es una talla con características del Barroco final, hecha en madera policromada. Es una imagen de vestidera de tamaño algo inferior al natural. Presenta en su rostro gestos de sufrimiento por la pasión de su hijo, llevando también una representación en el pecho de los Siete dolores de María, mediante el tradicional corazón de plata con siete puñales, estando la talla coronada con una corona de plata con varias joyas. Por otra parte, en sus manos lleva un pañuelo blanco, clavos y una corona de espinas.

Lleva puesto un manto blanco y, encima de este, el tradicional manto negro por el luto de la Dolorosa, realizado en 2003 por las Carbajalas de León, este es solo retirado tras el encuentro con el Cristo de la Salvación el Domingo de Resurrección, acto en el cual se retira también el corazón con los siete puñales sustituyéndolo por una rosa roja.

Historia[editar]

No se tienen datos de la talla hasta ya el siglo XIX, por lo que se desconoce absolutamente su autor. Según algunas fuentes la Virgen sería originalmente la titular de la Iglesia de Nuestra Señora del Castillo Viejo, hasta el traslado de la patrona de la ciudad, por el incendio de su anterior templo, en 1842.^[1]

A partir de un inventario de 1835, sabemos que la Virgen, por aquel entonces con la advocación de Nuestra Señora del Rosario, procesionaba como Soledad. Ya siendo referida, a partir de entonces, como Virgen de la Soledad y, poco después, ya bajo su nombre actual.^[2]

Originalmente, ya se había retocado la imagen para reflejar su carácter de Dolorosa, aunque en 1996, por encargo de los miembros de la recientemente fundada Cofradía de Nuestra Señora de los Dolores y Soledad, la cual data de 1995, y con apoyo de los padres agustinos, el restaurador Luis de Huéscar, cambio sus manos para asemejarlas más a las de una Virgen de los Dolores, pasando de las tradicionales manos entrelazadas de la Virgen del Rosario, a las actuales separadas para portar diversos elementos de la Pasión. Además, en las posteriores restauraciones se retocaron las lágrimas y el gesto de dolor de la Virgen para reflejar en mayor medida pena por la muerte de Cristo.

Dentro de los actos penitenciales coyantinos, es una talla clave desde que se tiene registro participando en diversas procesiones durante la Semana de Pasión destacando en la del Sábado Santo, donde es el centro del evento, en el Vía crucis del Viernes Santo, actual Procesión del Encuentro y en el Santo Entierro, evento en el cual participó únicamente con el Santo Sepulcro desde 1937 hasta la década de 1990. En los últimos años, con la creación de la Procesión de Resurrección en 2001, participa en un encuentro con el Cristo de la Salvación en la Plaza Mayor el Domingo de Pascua.

La Virgen Dolorosa en procesión[editar]

La imagen sale en procesión, durante la Semana Santa de Valencia de Don Juan, en los siguientes actos:

Andas[editar]

El trono de la Dolorosa era un tablero sencillo para cuatro portadores, hasta que, en 1993, debido al apoyo institucional y los aires renovadores de la Semana de Pasión coyantina que llevaron a la fundación de las dos cofradías penitenciales de la ciudad, se encargaron unas nuevas andas a Bernardo Barrientos. Dichas andas son las utilizadas actualmente por el Cristo de la Salvación, el cual es una obra de Manuel del Campo Escotet del año 2000.

Por su parte, la Virgen comenzó a procesionar con su trono actual ese mismo año, el cual fue hecho por Zacarías Pérez Martínez. El nuevo trono es portado por 52 braceros y cuenta con relieves con el emblema de la Cofradía y velas de cera blanca en la parte delantera para iluminar el rostro de la Madre de Dios.^[3]

Palio[editar]

En el año 2000, con la introducción del nuevo trono, la Cofradía decidió incluir en el paso una tradición recientemente implantada en la zona norte de España y típica de la Semana Santa andaluza, el procesionar a la Virgen bajo un palio. Dicho palio, que fue tejido por modistas locales, es negro, aunque presenta diversos elementos decorativos en color dorado. Este elemento ha servido no solo como elemento estético sino también como protección de la imagen y de su manto. Siendo utilizado en todas las procesiones salvo en la de Resurrección.